Hoteles y resorts todo incluido en Manzanillo

Al oeste del estado de Colima y asentada sobre dos bahías gemelas, se encuentra la pequeña ciudad de Manzanillo. La tranquilidad, el clima cálido todos los días del año y la belleza de sus paisajes naturales, han convertido este lugar en el destino preferido de los viajeros que saben disfrutar del lujo de los pequeños detalles. La oferta de hoteles y resorts todo incluido en Manzanillo atestiguan el prometedor desarrollo turístico de una zona llena de atractivos para el visitante.

No se puede negar que Manzanillo tiene un sabor propio. Su gastronomía permite al visitante hacer un recorrido histórico por el estado de Colima a través del paladar. Sabores de mar que han viajado con el paso del tiempo y el desarrollo de la ciudad para instalarse ahora en el menú de los mejores alojamientos en Manzanillo. La variada oferta gastronómica de estos establecimientos permite a los huéspedes disfrutar de una experiencia vacacional a través de todos los sentidos. Los resorts todo incluido en Manzanillo, como el Barceló Karmina, son un ejemplo de la importancia que la herencia culinaria tiene en el país. Con sus cuatro restaurantes y su programa de todo incluido (desayunos, almuerzos, cenas, barra libre, snacks…) será difícil que el huésped finalice su estancia sin haber degustado algunos de los platos estrella de Manzanillo como el pez vela a la plancha, el ceviche de Colima, los langostinos al mojo o las empanadas de marlín.

Pero la experiencia de unas vacaciones todo incluido en Manzanillo va más allá del sentido del gusto. También es la comodidad de unas habitaciones diseñadas con todos los lujos propias de los establecimientos de categoría superior, las actividades diarias y sin cargo adicional (programas deportivos en las piscinas, clases de baile, música en directo...), los tratamientos corporales y faciales en los complejos de spa y el acceso exclusivo a zonas de playa privadas.

Las bahías de Manzanillo y Santiago, a las que se asoman la mayoría de los establecimientos hoteleros de la zona, son sin duda la carta de presentación de la ciudad. De ellas parten a diario las expediciones de buceo que ofrecen al viajero la posibilidad de sumergirse entre coloridos bancos de peces tropicales en dirección a Playa Audiencia. También se organizan paseos a caballo, actividades de deporte acuático y, por supuesto, las populares excursiones en barca hasta la Roca Elefante, cuyos kilométricos túneles atraviesan el interior de la bahía en dirección a las montañas.

Es precisamente en estas montañas donde los visitantes encuentran otras opciones de ocio en las que se cambian las sandalias por las botas de caminar. El Parque Cerro del Toro se eleva casi 800 metros sobre el nivel del mar en un promontorio desde el que contemplar unas magníficas vistas de la ciudad y de las relucientes aguas del Océano Pacífico. Se puede recorrer a pie, en bicicleta o a lomos de un quad, desafiando los senderos de tierra que se abren paso entre una frondosa vegetación tropical surcada por riachuelos y poblada por aves exóticas, serpientes e iguanas. Toda una aventura natural para unas vacaciones todo incluido en las que, siempre y cuando el viajero lo desee, no existe la posibilidad de aburrirse.