La isla de Mallorca se ha consolidado a lo largo de los últimos años como una de las regiones europeas con más campos de golf por metro cuadrado. Desde el más antiguo, el Arabella Golf Son Vida —inaugurado en 1964—, hasta el más reciente, el Golf Maioris, a lo largo y ancho de la geografía insular se cuentan hasta veinticuatro campos de calidad. Una cifra llamativa si tenemos en cuenta que en todo el archipiélago balear el total es de veintiséis. La celebración en 2016 de la International Golf Travel Market (IGTM), una de las ferias más importantes de la industria turística del golf, vino a constatar la importancia de Mallorca como destino de golf en toda Europa. Y no es para menos, pues un estudio reveló hace poco que, del total de rounds jugados en un año medio, el 85% se corresponde con turistas extranjeros.
Por la oferta complementaria de alojamiento y restauración, y por el entorno natural que Mallorca ofrece, el golf se presenta como una excusa perfecta para desplazarse a la isla unos días. A continuación, daremos un paseo por los campos de golf más interesantes de la isla.
Campos de golf de Mallorca: 24 opciones para todos los niveles
La calidad de los campos de golf mallorquines no es un mero decir. Muchos de ellos han sido trazados por algunos de los mejores diseñadores del sector, como Jack Nicklaus, Robert Trent Jones o José María Olazábal. Nacionales y extranjeros lo saben, y por eso en 2016 un estudio reveló que al menos 200.000 turistas habían desembarcado en la isla con el golf como principal motivo. En Mallorca, además, se ha sabido explotar esta vertiente turística cuya temporada alta no coincide con la del turismo de sol y playa. El intervalo entre febrero y mayo, y el de septiembre a noviembre, son los preferidos para practicar este deporte, el cual ha venido a combatir en parte la estacionalidad habitual del turismo insular.
Sus 24 campos de golf se aglutinan en zonas concretas de la isla. Especialmente, en aquellas enclavadas en espacios naturales privilegiados, y cuya variada oferta cultural, hostelera y de ocio permite al turista una experiencia completa. Los hay para todos los niveles y edades, siendo la mayoría de campos de 18 hoyos, y los menos de 9. En el Golf Son Quint, de hecho, existe incluso un recorrido de pitch & putt, deporte amateur muy similar al golf, donde los hoyos se encuentran situados a una distancia notablemente menor entre sí.
En torno a la Bahía de Palma, situada al suroeste de la isla, aparece la mayor concentración de campos, con nombres conocidos como el de Golf Santa Ponsa, el T Golf & Country Club, el Golf de Andratx o el Golf Son Gual.
Justo en la Bahía de Alcudia, en el extremo opuesto, aparecen otros tantos, como el Golf Pollença o el Club de Golf Alcanada. Y ya en la costa de levante, el Capdepera Golf, el Club de Golf de Son Servera y el Vall D´Or Golf ponen el broche de oro a la oferta de golf en Mallorca.
Arabella Golf Son Vida
Su inauguración, en 1964, a tan sólo 6 kilómetros de Palma, abrió la historia del golf en Mallorca. Su campo es tenido por el de más tradición en la isla, no ya sólo por sus más de cincuenta años de servicio ininterrumpido, sino también por haber acogido la celebración de un evento del Tour Europeo en hasta dos ocasiones —en 1990, con victoria de Severino Ballesteros, y en 1994 cuando se alzó con el triunfo Barry Lane—. Dicen que hoy en día ya no se diseñan campos como este, por lo que la exigencia inusual de su trazado suele ser un caramelo para los golfistas más jóvenes.
Golf Son Termes
Igual que sucedía con el anterior campo, el de Golf Son Termes se encuentra en las cercanías de la Bahía de Palma, concretamente a sólo 15 kilómetros de la capital balear. Precisamente, su ubicación a los pies de la Sierra de Tramuntana —declarada Patrimonio Mundial por la UNESCO—, confiere a este campo de golf un encanto único, donde las ondulaciones y desniveles propios del terreno exigen un juego preciso e inteligente.
Son Servera Golf
El Son Servera Golf nos transporta hasta el Parque Natural de Levante, un tesoro natural colmado de pinares, pequeños pueblos y escondidas calas. Se trata, además, del segundo en antigüedad, y en líneas generales puede considerarse un campo de golf fácil. Con 18 hoyos, muchos de ellos “escondidos” entre estrechos pinares y lagos, su vocación es la de acoger a todo aquel que se acerque a conocerlo, independientemente de su nivel de juego.
Club de Golf Alcanada
Estrenado en 2003, este campo de golf se ubica al noreste de Mallorca, a tan sólo 5 kilómetros de la ciudad de Alcudia. Con 18 hoyos de recorrido, su disposición junto al mar brinda tal vez las mejores vistas que se pueden tener en Mallorca mientras se juega al golf. Permite, además, escapar momentáneamente de los bullicios habituales en los núcleos turísticos más importante de la isla, y su cercanía al Cap de Formentor resulta ideal para escaparse, después del juego, a este tesoro escondido de la naturaleza.
Santa Ponsa I
De vuelta a la Bahía de Palma, el Santa Ponsa I nos devuelve a uno de los terrenos de golf más grandes de Mallorca, con una extensión cercana a las 73 hectáreas. Abrió sus puertas en 1997, junto a sus hermanos Santa Ponsa II y III. Sin embargo, este es el único que permanece abierto al público, sin necesidad de ser miembro del club. Durante su breve historia ha acogido importantes torneos como el Abierto de Baleares y ha sido seis veces la sede de la European PGA Tour. Dicen que en él los grandes pegadores se sienten como en casa.