En Granada encontramos la Costa Tropical, un enclave paradisíaco que nada tiene que envidiar a las playas que hay al otro lado del océano. En total, 73 kilómetros de playa situados en el litoral de Granada que ofrecen aguas limpias y claras y una temperatura agradable para estar allí casi todo el año.

Son diecisiete los municipios que se sitúan en esta costa, entre los que se encuentran Almuñécar, Motril, La Herradura o Salobreña. Y aquí encontramos playas para todos los gustos, pero con una esencia propia del trópico, de hecho, durante muchos siglos este era el único sitio donde se daban las condiciones propicias para cultivar frutas tropicales como el aguacate o el mango, fuera de su tierra.

Además de unas calas y playas de aires tropicales, en estos pueblos encontramos mucha historia. Desde la época romana, hasta influencias de la ocupación nazarí e iglesias erguidas sobre antiguas mezquitas.

  1. Playas de Almuñecar
  2. Playas de Salobreña
  3. Playa de La Guardia
  4. Playa de La Herradura
  5. Playa de Cantarriján
  6. Playa de La Rijana
  7. Playa de La Joya
  8. Playa Cambriles
  9. Playa Casarones
  10. Playa Calahonda
  11. Playas de Albuñol

Para un destino próximo de vacaciones, sin duda la Costa Tropical es un indispensable. Y todas sus playas son un motivo más para visitarlo.

Playas de Almuñecar

El litoral de este municipio es uno de los más concurridos de toda la Costa Tropical. En total, 19 kilómetros de costa, que lo hacen el destino preferido por los turistas que frecuentan esta zona.

Entre tantos kilómetros encontramos una gran variedad de playas para todos los gustos o para vivir cada día una experiencia diferente. Playas largas, pequeñas calas o rincones naturistas, la costa de Almuñécar es para todos los públicos.

Aquí tenemos la playa de San Cristóbal, una de las más largas de la zona, bañada por las aguas claras del mediterráneo y con arena fina oscura. Se encuentra en una de las áreas más urbanizadas de la zona, por lo que cuenta con todos los servicios. En un lado de la playa se encuentra el Peñón del Santo y justo en el otro extremo la Cala de La China.

Al otro lado del Peñón del Santo está la playa Puerta del Mar, se trata de la más céntrica del pueblo por lo que es una de las más pobladas. Tiene uno de los paseos marítimos más bonitos, donde se puede encontrar un monumento fenicio.

Costa de Almuñecar
Vistas de la costa de Almuñecar

Playas de Salobreña

Este es un municipio más tranquilo que Almuñécar, sus playas están menos masificadas debido a que están menos urbanizadas, pero la mayoría cuentan con servicios de hamacas, chiringuitos, alquiler de sombrillas… Son uno de los lugares más idóneos para ir a la playa con niños.

La playa de la Charca es una de las mejores opciones. Conocida también como Salomar, es una playa compuesta por arena fina, pero a medida que te acercas a la orilla van apareciendo guijarros. Tiene un acceso fácil y un parking a la entrada, aunque suele estar lleno en temporada alta debido a la gran ocupación en estas fechas.

Si lo que buscas es tranquilidad ve a la playa El Caletón. Es una cala pequeña, menos concurrida y con aguas muy tranquilas. Su fondo marino es espectacular, por lo que una de las actividades más recomendadas es el snorkel.

Costa de Salobreña
Vistas de la costa de Salobreña

Playa de La Guardia

También en Salobreña se encuentra la playa de La Guardia. Un rincón en la costa de lo más tranquilo, sin masificar, pero con las comodidades y servicios que ofrecen las playas urbanas. Es una elección perfecta para pasar un día de Sol con niños o en pareja.

Es larga, aunque hace forma de U, cuenta con arena fina oscura y aguas cristalinas con poco oleaje. Su acceso es fácil y tiene un parking a la entrada. Dispone también, de un centro donde hacer actividades como kayak, hidropedales o alquilar hamacas y sombrillas.

Además, tiene una amplia variedad de restaurantes y chiringuitos en primera línea de playa, por si te entra hambre entre baño y baño.

Playa de La Herradura

La zona costera de este municipio se declaró Paraje Natural en el año 1989. Es sin duda una de las áreas con más encanto, aunque menos conocida de la Costa Tropical. Está situada en este pueblo, de tradición marinera, y es considerada una de las mejores playas de Granada.

El paseo marítimo bordea toda la zona de playa y es un enclave perfecto para disfrutar con niños y hacer deporte. En ocasiones el mar es propicio para practicar windsurf pero el más popular es el buceo o el snorkel. La Herradura tiene uno de los fondos marinos más bonitos y ricos de toda la costa granadina y sus costas se llenan de aventureros que se disponen a disfrutarlo.

Playa de la Herradura
Playa de la Herradura

Playa de Cantarriján

También en La Herradura, encontramos esta localización naturista. Esta playa nudista es una de las más concurridas a pesar de que tiene un acceso un poco más complicado. Tiene vegetación en la parte trasera, cuenta con arena fina oscura y un mar con aguas tranquilas.

Playa de La Rijana

En el pueblo de Castell de Ferro, municipio de Gualchos, se encuentra esta playa. Se trata de una zona de calas ya que la costa es más abrupta y escarpada, por lo que además es una zona poco masificada.

La Playa de la Rijana es la más conocida de este municipio. Tiene arena oscura y unas aguas excepcionalmente claras, es perfecta para hacer submarinismo o snorkel. No es fácil de encontrar y acceder, por lo que está poco concurrida.

Playa de la Rijana
Playa de la Rijana

Playa de La Joya

Llegar hasta aquí es una auténtica odisea, pertenece al pueblo de Motril y es una de las calas de más difícil acceso de la zona, pero el lugar merece la pena. Se trata de un enclave resguardado de la civilización rodeado de acantilados y paredes rocosas.

Es un territorio prácticamente virgen a donde acudir cuando se busca pasar un día de lo más relajado, acompañado del sonido del mar.

Esto es de lo mejor que la Costa Tropical granadina ofrece: calas escondidas, playas de ámbito más familiar, pero sobretodo un clima idóneo para disfrutar de las aguas cristalinas del mediterráneo todo el año.

Playa Cambriles

Con 850 metros de largo y 45 de ancho, esta bonita playa de arena oscura y pequeñas piedrecitas es un verdadero paraíso para los amantes de la calma. Situada entre Castell de Ferro y Lújar, en realidad es la continuación de la playa de Castell y su fondo marino está protegido por su gran riqueza biológica. Sólo tiene un chiringuito que ofrece comidas, pero sí cuenta con un servicio de alquiler de tumbonas y duchas. A cambio, tiene muchísima tranquilidad y está muy poco concurrida. Esta playa de aguas tranquilas está delimitada por los acantilados de Lújar y por unas pequeñas calas pedregosas. Dicen que quien pisa por aquí siempre regresa.

Playa Casarones

Es una de las dos playas más recoletas y tranquilas del entorno de Rubite, un pueblo que se halla encaramado en la sierra de la Contraviesa y cuyos 500 habitantes tienen sus ojos puestos en el Mediterráneo. Está exactamente en la pequeña población de Casarones, en una zona de invernaderos, y es una calita de apenas 450 metros bastante estrecha (12 metros) de rocas y arena gruesa. No cuenta con ningún tipo de equipamiento ni servicio, pero sí regala calma y mucha paz. Tiene un pequeño paseo marítimo.

Playa Calahonda

Situada en la pequeña localidad de Calahonda, a 14 kilómetros de Motril, esta magnífica playa de aguas transparentes tiene una longitud de unos 1.300 metros de arena gruesa oscura y limpia y un ancho promedio de unos 40 metros. Casi siempre está en calma, por lo que es un espacio ideal para la práctica de determinados deportes acuáticos, como el submarinismo o el esnórquel. Su clima templado durante todo el año la han convertido en un paraíso tropical y son muchos los que han elegido este bonito enclave de la costa granadina como residencia permanente. Bordeada de urbanizaciones armoniosas, cuenta con todo tipo de servicios y su nivel de conservación es bueno.

Playas de Albuñol

La pequeña localidad granadina de Albuñol no se puede quejar de playas. En su entorno hay nada menos que siete y todas merecen un buen chapuzón: Cala Chilches, El Cuervo, El Gaiterillo, El Ruso, La Playiya, La Rábita y Pozuelo. Con un total de 3,3 kilómetros de largo, ninguna de ellas cuenta con el distintivo de Bandera Azul. Sin embargo, la mayoría tiene aguas tranquilas y arena oscura, un índice bajo de ocupación y están situadas lejos de núcleos urbanos. Te contamos algunas características de cada una:

Calahonda
Localidad de Calahonda
  • Cala Chilches: Tiene una longitud de 300 metros y una anchura de 15. Se trata de una playa aislada de pequeñas piedras y arena, sin equipamientos ni servicios. Se puede llegar hasta ella en coche.
  • El Cuervo: Con una longitud de 250 metros y una anchura de 15, su arena es oscura y está entremezclada con pequeñas piedrecitas. Situada junto a la carretera N-340, está rodeada de montañas y normalmente su índice de ocupación es bajo debido a su difícil acceso y su falta de señalización. No tiene equipamientos.
  • El Gaiterillo. Ubicada junto a la carretera N-340, esta playa de arena oscura y aguas tranquilas es también muy estrecha y se encuentra en una zona aislada. Está rodeada de montañas y su índice de ocupación es bajo incluso en temporada alta.
  • El Ruso. Esta pequeña playa de arena oscura se encuentra a los pies de un acantilado y suele estar prácticamente vacía debido a su difícil acceso y a que no está señalizada.
  • La Playiya. Es una playa muy pequeña de arena oscura y aguas tranquilas. También está rodeada de montañas y su índice de ocupación es bajo.
  • La Rábita. Es una playa de grava y de aguas tranquilas que está en una zona urbana rodeada de extensiones de cultivos de invernadero. Su índice de ocupación también es bajo.
  • Esta playa de arena oscura y aguas tranquilas está rodeada de rocas y es un sitio muy agradable para darse un baño sin ruidos y en calma. El índice de ocupación es bajo, incluso en temporada alta.