Con la llegada del verano en nuestro calendario, queda oficialmente inaugurada la temporada de baño en Extremadura. El clima es el ideal para realizar turismo rural y disfrutar al máximo de las piscinas naturales de Cáceres, ya que el agua no está demasiado fría. Además, la vacaciones estivales nos permiten relajarnos, viajar con calma y conocer hermosos rincones de la geografía española.
Piscinas naturales en Sierra de Gata
La comarca de Sierra de Gata encierra verdes parajes y apetecibles baños de agua dulce. La carretera que atraviesa esta zona de rico patrimonio cultural y natural está plagada de olivos, huertos, árboles frutales y tupidos bosques.
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Las Herías en Descargamaría.
Un pequeño salto de agua del río Árrago forma esta piscina en la localidad de Descargamaría. Es famosa por la colección de muros que decoran la orilla, elaborados con pequeños mosaicos de colores esmaltados, y por el espeso césped que la rodea, ideal para tumbarse al sol. Se ubica cerca del pueblo, por lo que se puede encontrar abierto algún chiringuito. Además, cuenta con zona de aparcamiento.
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Robledillo de Gata.
La piscina natural de este pueblo también la forma el río Árrago. Es pequeña pero cuenta con césped y aparcamiento. Vale la pena darse un chapuzón después de explorar la población.
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Hoyos.
Se trata de una pequeña piscina fluvial, arropada por exuberante vegetación y tan solo un chiringuito. Es el lugar perfecto para desconectar y relajarse en un entorno natural apenas urbanizado.
Piscinas naturales de Acebo
En plena Sierra de Gata se encuentra la pintoresca localidad de Acebo, un enclave con algunas de las piscinas naturales más populares y frecuentadas en verano.
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El Jevero.
Esta zona de baño con aguas cristalinas se sitúa a 2 kilómetros de Acebo. Cuenta con áreas verdes, un restaurante y un puente de piedra de estilo medieval.
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La Carreciá.
Desde el Jevero, y siguiendo el curso del río Acebo hacia abajo, se encuentra la piscina natural Carreciá, muy similar a la anterior.
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Cascada La Cervigona.
A través de un sendero que cruza la sierra extremeña se llega a este impresionante salto de agua de 60 metros de altura. Por el camino también hay otras opciones para refrescarse como la presa del Prado de las Monjas.
Piscinas naturales de Hervás
Hervás se conoce como uno de los pueblos más bonitos del Valle de Ambroz. Se caracteriza por su estrechas calles empedradas y su pintoresco barrio judío.
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Charcas Verdes.
Es un conjunto de cuatro saltos de agua famoso por la forma redondeada de sus piedras. Se puede acceder a ellas siguiendo una ruta a pie (de una hora) atravesando el valle o por medio de un camino asfaltado en coche.
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La Gargantilla.
Se encuentra rodeada de cerezos, áreas recreativas y un chiringuito. Es un lugar frecuentado por las familias de la zona, y aunque es accesible en coche se sitúa en un enclave natural increíble.
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Casas del Monte.
Está compuesta por varias piscinas naturales conectadas. Las de los niveles superiores, más cercanas a bares y cafeterías, están más masificadas, aunque hay zonas más tranquilas donde disfrutar del baño a medida que se desciende por el camino.
Piscinas naturales en Las Hurdes
Siete ríos bañan los valles de la comarca histórica de Las Hurdes. Esta zona es conocida por sus espectaculares paisajes de meandros serpenteantes y valles excavados.
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Charco Morisco en Pinofranqueado.
Esta piscina natural, la más grande de la comarca, se encuentra junto al puente de acceso a Pinofranqueado. La orilla del río de Los Ángeles actúa como paseo marítimo natural y cuenta con algunos chiringuitos donde sentarse a tomar un cerveza fresquita.
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Charco de la Olla en Mestas.
En el pueblo de Las Mestas, donde convergen el río Batuecas y el Ladrillar, se ubica esta piscina natural rodeada de puentes de piedra y antiguos molinos.
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Casar del Palomero.
Esta laguna forma parte del cauce del río de Los Ángeles y se encuentra en el puente que comunica Casar del Palomero con el municipio de Caminomorisco. Aunque se trata de un entorno natural, cuenta con un chiringuito y una agradable zona de sombra.
Piscinas naturales en Plasencia
Adeás de visitar la hermosa ciudad medieval de Plasencia, con su casco histórico, murallas y acueductos, no te pierdas los impresionantes paisajes que ofrece el Valle del Jerte.
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Garganta de los Infiernos.
Esta reserva natural es de nuestras preferidas por sus numerosos saltos de aguas, pozas y formaciones rocosas. Los principales puntos de interés están en la zona de Los Pilones, unas “marmitas” gigantes llenas de agua, y el Chorrero de la Virgen, una impresionante cascada que se puede apreciar desde el mirador.
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Parque de la Isla.
Dos ríos, el Jerte y el Chico, conforman esta isla con amplias zona verdes donde tumbarse bajo el sol. Es el lugar perfecto para practicar deporte al aire libre, dar un paseo, relajarse en una de sus terrazas o simplemente refrescarse en un día caluroso.
