Lejos de la bulliciosa Estambul se encuentran las Islas Príncipe de Turquía. Un auténtico refugio donde la naturaleza convive con antiguas casas de madera, calles tranquilas donde la gente pasea en bicicleta o calesa, y escondidas calas bañadas por el mar interior que une las aguas de los mares Negro y Egeo.

Durante el Imperio Bizantino, estas islas aisladas en medio del mar de Mármara fueron utilizadas como lugar de exilio y cárcel para príncipes y aristócratas repudiados. Varias emperatrices bizantinas vivieron en el convento de Büyükada durante su exilio, e incluso el líder bolchevique León Trotsky buscó refugio aquí cuando fue expulsado de la URSS por Stalin. Sin embargo, no siempre fue una prisión. A medida que pasaron los años, comenzó a consolidarse como un lugar de retiro entre las clases pudientes, donde instalaban sus casas de veraneo y palacetes junto al mar.

Islas Príncipe, cómo está compuesto este archipiélago

A 20 kilómetros de Estambul se encuentran las Islas Príncipe, también conocidas como Adalar, que significa archipiélago en turco. Se trata de 9 pequeños islotes donde apenas viven 14.000 personas en total. Su isla más grande, Büyükada, mide unos 5 kilómetros cuadrados y vive ajena al resto del mundo. Aquí no han llegado los vehículos a motor ni los medios digitales. Sus vecinas son  Heybeliada, Burguzada, Kinaliada, Sedef, Yassiada, Taysan, Kasik y Siyriada, estas últimas sin población.

 

 

Qué islas se pueden visitar

Solo cuatro de estas nueve islas, las principales, tienen conexión con ferry desde Estambul. Estas son Büyükada, Heybeliada, Burguzada y Kinaliada. Aunque a las otras islas se puede llegar una vez estando en las Príncipe no es muy común visitarlas, ya que no cuentan con muchos lugares de interés turístico y su acceso es prácticamente privado para el grupo de propietarios que tienen casas en las islas.

Islas Principe
Islas Príncipe

Qué hacer en las Islas Príncipe: Büyükada

Muchos turcos aprovechan el fin de semana para escaparse a las islas de Estambul y disfrutar de la playa, la brisa marina y un paseo entre bosques y colinas con vistas al mar. En particular Büyükada, la más grande de las nueve, está salpicada de villas históricas, iglesias y monasterios, cuya arquitectura te hará soñar con otra época.

Playas

Alrededor de la isla hay playas tanto públicas como privadas, de piedras o de arena. Tan solo debes escoger tu favorita:

  • Playa Eskibag: ubicada en la zona sur de la isla, esta playa privada se encuentra a unos 25 minutos en barca desde el puerto.
  • Playa Halik Koyu: esta es la playa más grande y limpia de la isla. Está equipada con hamacas, sombrillas, duchas y restaurantes donde tomar algo.
  • Playa Aya Nikola: al ser una playa pública suele estar bastante concurrida en verano, aunque es de las más tranquilas en cuanto a oleaje se refiere.
  • Playa Prenses Koyu: se trata de la playa privada del Prenses Boutique Hotel y cuenta con servicio de taxi-barco para moverte entre las playas de la isla.
  • Club de playa Yada: este club de playa privado ofrece música en vivo los fines de semana y una gran variedad de sushi. El propietario es el mismo que el del restaurante Yada, en Estambul.
  • Playa Naki Bey: a unos 10 minutos caminando del centro se encuentra esta playa familiar con restaurante buffet.
  • Playa Yoruk Ali: sin duda es la playa con más arena de la isla y un lugar excelente para familias con niños.

Rutas de senderismo

Al estar prohibidos los vehículos de motor, conocer la isla a pie es toda una experiencia. Para descubrir los principales lugares de interés te recomendamos una ruta circular ascendiendo hasta la colina Aya Yorgi.

No te puedes perder la antigua torre del Reloj ubicada en la plaza del Mercado, la iglesia Católica de San Pacífico, de estilo neo-gótico; la mezquita de Hamidiye, que es la más grande del archipiélago; la majestuosa iglesia ortodoxa de Ayios Domitrios; la sinagoga Hesed Le Avraam, un precioso edificio de color amarillo con detalles en los ventanales; la mansión Sabuncakis; o el orfanato Prinpiko, el edificio de madera más grande de Europa.

Haz una parada para comer en el restaurante Luna Park, un antiguo parque de atracciones, y sigue el recorrido hacia el Monasterio San Jorge, también conocido como Aya Yorgi, desde donde se ve un atardecer espectacular. Ya en el descenso, y de vuelta al centro histórico de la isla, podrás maravillarte con la mansión Con Pasa Kosku, la histórica, y también derruida, casa de Trotsky o la iglesia armenia Surp Asdvadzadzin.

Restaurantes

No puedes irte de Büyükada sin haber comido pescado fresco en cualquiera de los pequeños restaurantes que se encuentra junto a la playa, o sin probar el raki, un licor anisado típico de Turquía. Para esta última actividad te recomendamos el animado restaurante Prinkipo Meyhanesi. Cuenta con música en vivo los viernes y sábados. Y, por supuesto, también vende raki y mezes griegos, una selección de aperitivos típicos tradicionales.

Para comer con unas vistas espectaculares dirígete al restaurante-mirador Yücetepe Kır Gazinosu, en lo alto de la colina Aya Yorgi y junto al monasterio. Ofrece comida tradicional y unas deliciosas köfte, albóndigas de carne. También con vistas de infarto, te recomendamos el restaurante Eskibağ Teras, sobre un acantilado. Es una buena opción si te gusta el típico brunch con fruta fresca, mermeladas, pinchos y sabrosos mezes. Aunque también tienen kebabs y pescado fresco.

Islas Principe
Islas Príncipe

Para terminar con un toque dulce no te puedes perder la pastelería Büyükada Pastanesi. Te recomendamos tomar un çay (té típico) y pedir unas delicias turcas, galletas o cualquier producto horneado.

Paseo en coche de caballos

Si ya te has cansado de caminar o de montar en bici, puedes recorrer la isla en carruaje de caballos, el transporte público por excelencia. Aprovecha para conocer las mansiones y atracciones turísticas sintiendo la brisa cual miembro de la realeza otomana. El precio dependerá, en gran parte, de tus habilidades para regatear.

Recorrido en ferry desde Estambul

Las Islas Príncipe se encuentran a 1 hora y media de ferry desde Estambul. La forma más rápida y económica de llegar es a través del muelle de Kabatas, en el bullicioso barrio de Besiktas. Aunque también salen barcos desde los muelles de Kadiköy, Bostanci o Eminönü. En Kabatas hay dos estaciones: una local y otra para turistas. La local, ubicada junto a la boca del metro, es bastante más barata y puedes comprar el ticket en la máquina con la Istanbul Card. De todos modos, si prefieres la otra opción, te atenderán en una ventanilla en inglés e incluso te ofrecerán excursiones. Ten en cuenta que los ferris más rápidos y nuevos apenas hacen paradas, sin embargo el precio es más elevado.