Si estás pensando en hacer un viaje con tu grupo de amigos, te vamos a contar los motivos de por qué Marruecos es el lugar perfecto. Es un país vibrante en el que tendréis experiencias inolvidables.
En Marruecos hay tiempo para todo, desde pasear por las medinas de las ciudades imperiales y perderse en los zocos, mientras regateáis y os echáis unas risas, hasta coger un 4×4 y atravesar el desierto. Tanto si sois de playa como de montaña, aquí encontraréis paisajes de ensueño. Y aunque creas que es imposible, la vida nocturna de Marruecos también tiene mucho que decir. Te contamos todos los planes que os esperan.
Los laberintos de las medinas y los zocos
Marrakech y Fez son dos destinos primordiales, que deben estar en vuestra lista de imprescindibles si viajáis a Marruecos en grupo. Marrakech es una de las ciudades más vivas de todo el país, de las que os dará más juego y posibilidades. La Plaza Jemaa el Fna es el verdadero corazón de la ciudad, pura efervescencia. Cada minuto se transforma en un espectáculo diferente, lleno de encantadores de serpientes, malabaristas y todo tipo de personajes. Las emociones están aseguradas. Adentraos en el Zoco para vivir el ambiente marroquí y practicar el arte del regateo. La cultura está por todos los rincones en esta urbe, así que aprovechad para conocerla al máximo.
El tamaño de la medina de Fez es absolutamente abrumador, las calles del zoco forman una tela de araña en la que perderse está garantizado, pero ese es uno de sus encantos. Id bien descansados, pues sus más de 7.000 callejones llenos de tiendas pueden agotar a cualquiera. La foto de grupo perfecta la tenéis frente a las curtidurías de Fez, una de las postales más icónicas de la ciudad, donde el cuero se sigue tiñendo de forma artesanal. Dejad que os conquiste su caos.
La vida nocturna de Marruecos
Ver los monumentos más bellos y la arquitectura tradicional marroquí, no está para nada reñido con salir de fiesta por Marruecos. Seguro que los planes nocturnos son igualmente importantes, para que el viaje de amigos sea redondo. La noche de Marrakech es una de las más animadas. Si os apetece algo más típico, quedaos en la Plaza Jemaa el Fna, pues todo el mundo sale a la calle cuando se pone el sol. Los espectáculos callejeros de músicos y los restaurantes móviles, donde probar las especialidades marroquíes, lo inundan todo. Los restaurantes alrededor de la plaza también están llenos de restaurantes, muchos de ellos con terraza y estupendas panorámicas. El Café Sesame –con su terraza chill out– es de los más populares, aunque lo habitual es que no se venda alcohol.
La zona nueva de Marrakech, tanto Gueliz como Hivernage, cuentan con un tipo de ocio mucho más occidental. Aquí los bares y restaurantes son internacionales, y sirven bebidas alcohólicas en la mayoría. Las discotecas también se concentran en este lugar, donde las entradas no son demasiado baratas y se exige ir bien vestido. Pacha es una de las más famosas, con una decoración de lo más exótica y una impresionante piscina con vistas al Atlas. Theatro o Silver también están entre las más populares.
Casablanca, una de las ciudades más grandes de Marruecos, también cuenta con una amplia oferta nocturna, al ser una de las más turísticas. Uno de los lugares más concurridos es el Bulevar de La Corniche, en el barrio de Ain Diab. Es una especie de paseo marítimo a lo largo de la costa, en el que se dan cita algunos de los mejores restaurantes, discotecas y cabarets de Casablanca. Si os apetece una noche más tranquila, con música en directo, estáis en el sitio indicado. El Manhattan Club, el Armstrong Jazz Club o el emblemático Rick’s Café, son estupendos para tomar algo y escuchar un buen grupo de jazz o pop.
Una ciudad que, últimamente, está dando mucho que hablar, en cuestión de vida nocturna, es Kenitra, a unos 50 kilómetros de Rabat. Tiene fama de ser una de las ciudades con mayor animación por la noche de todo el país. La mayoría de bares y clubs están próximos al mar, aunque también hay en el centro. Las terrazas y los espacios animados son muy numerosos. Hasta aquí llega una gran cantidad de gente joven para pasar una divertida jornada.
Cruzar la Cordillera de Atlas en coche
Alquilar un coche si vais un grupo de amigos a Marruecos, puede ser una excelente idea para hacer un verdadero road trip. Atravesar los fascinantes paisajes que separan Marrakech y la entrada del desierto del Sahara se convertirá en toda una aventura.
A este itinerario también se le conoce como la Ruta de las Mil Kasbahs. Aquí las carreteras serpentean entre las montañas y algunas de ellas son abrumadoras. La precaución al volante es esencial en este tipo de trayectos, prestando atención, sobre todo, a los camiones. Sin embargo, merece la pena alquilar un 4×4 y vivir juntos esta experiencia.
Tendréis la oportunidad de conocer la asombroso Kasbah de Ait Benhaddou, los acantilados que forman el Valle del Dadès o los cañones de más de 100 metros de altura de las Gargantas del Todra. Los parajes harán que vuestras fotos sean de película.
El final de este recorrido es el desierto. El de Merzouga es el más famoso, seguido de cerca por el de Zagora. Un paseo en camello para ver el mejor atardecer entre las dunas, una carrera en quad, pasar una animada noche a ritmo de los tambores bereberes y disfrutar de un cielo cubierto de estrellas, pondrá el broche de oro a vuestro viaje en coche.
Las playas de Marruecos
Uno de los planes estrella cuando se viaja en compañía de amigos es pasar unos agradables días en la playa. En Marruecos encontraréis playas totalmente vírgenes, en muchos casos al lado de ciudades que merece mucho la pena contemplar, como es el caso de Essaouira. Esta preciosa urbe amurallada junto al mar cuenta con una medina declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Podréis comer pescado fresco en el puerto y descubrir sus majestuosas playas.
La carretera de costa que va desde Essaouira hasta Agadir, otro de los destinos de playa predilectos, es otra ruta perfecta para hacer en coche, lo que os permitirá parar en pintorescos pueblos pesqueros y playas de arena dorada que no tienen fin. Muchas de ellas son perfectas para practicar surf, si sois aficionados a este deporte.
Los planes con amigos se multiplican cuando el destino es Marruecos. No olvidéis pasear por Chefchauen, “la ciudad azul”, una de las más mágicas de todo el país. La ciudad imperial de Meknès os trasladará a otra época. Si os apetece una excursión en plena naturaleza, tenéis que llegar hasta las Cascadas de Ouzoud, espectaculares saltos de agua de más de 100 metros de altura. ¿Qué os parece un viaje en globo para recordad toda la vida este viaje?