Cuando en otros lugares se habla de la moda de salir a las terrazas, en Málaga se nos escapa una sonrisa. Llevamos toda la vida disfrutando de la calle, del tapeo al aire libre en los bares, de los paseos a la orilla del mar y del placer de reinventarnos cada temporada. Si la playa y el terraceo son las estrellas del verano, en invierno añadimos también planes divertidos y culturales para hacer que cada fin de semana sea diferente. Eso sí, deben aportar una chispa especial o un toque “cultureta” que nos sorprenda y nos alegre el día. Los próximos siete planes cumplen con las dos condiciones, lo difícil es elegir con cuál de ellos empezar.
- Vistas desde la Catedral de Málaga
- Ruta de cervezas artesanales
- De la mano de Picasso
- Cementerio inglés de Málaga
- Abrir la mente en La Térmica
- Taller de cerámica
- Bucear entre libros de segunda mano
Vistas desde la Catedral de Málaga
No sólo a los niños les gusta andar por las alturas, también los mayores disfrutamos admirando perspectivas insólitas desde lugares tan especiales como la Catedral de la Encarnación. El premio de subir los 200 peldaños de la escalera de caracol de la torre norte es admirar una panorámica increíble de Málaga, ver las formas semiesféricas de la cubierta desde arriba y el campanario a pocos metros. Aunque subir cueste un poco, la imagen de la ciudad con el Mediterráneo al fondo compensa con creces. En la Catedral disponen de una entrada combinada que permite visitar su interior y subir a las cubiertas, así que no desaproveches la ocasión para hacerlo todo.
Ruta de cervezas artesanales
Las visitas a bodegas son cada día más habituales, pero aún no lo son tanto las catas de cervezas o pasear por alguna fábrica cervecera. En Málaga hay dos factorías que abren sus puertas a visitantes y curiosos para que conozcan el proceso de elaboración y sus tipos de cerveza. Una de ellas es Cervezas Victoria, que desvela durante 90 minutos todos los secretos de esta cerveza malagueña. Situada en un magnífico edificio que ha ganado varios premios de arquitectura, ofrece terminar la visita con una cata o con un “taller de tiraje”. La segunda propuesta es La Fábrica, la microcervecería de Cruzcampo, donde organizan visitas, catas de 4 cervezas e incluso maridaje con tapas. Dos planazos para mayores de 18 años.
De la mano de Picasso
Siempre es un buen momento para conocer mejor a Pablo Picasso y deleitarse con sus obras. Es un auténtico privilegio seguir los pasos de este artista por Málaga, una ciudad que formó parte de su infancia, inspiró sus primeras obras y forjó su personalidad. Lo ideal es hacerlo por orden cronológico, aunque tampoco es obligatorio. Visita el Museo-Casa Natal, en la Plaza de la Merced; la parroquia de Santiago, donde fue bautizado; y la Escuela de Bellas Artes de San Telmo, en la que su padre era profesor y él tuvo su primer contacto con el arte. Puedes seguir por el Museo Municipal de Málaga, donde su padre tenía el taller; y la plaza de toros La Malagueta, que recuerda la importancia que la tauromaquia tuvo en su obra. Tras esta introducción, llega el momento de emocionarse con sus obras, y el lugar indicado es el Museo Picasso de Málaga, alojado en el magnífico palacio de Bellavista.
Además, hasta el 31 de enero se puede recorrer la exposición ‘Picasso visto por Otero’, donde se exhiben las fotografías que hizo Roberto Otero al artista y una selección de libros ilustrados por Picasso.
Cementerio inglés de Málaga
Las visitas a los cementerios siempre añaden un plus de emoción –o incluso de temor– pero, casi siempre, nuestra curiosidad supera el primer momento de indecisión. En España hay muchos camposantos considerados monumentales donde las visitas se convierten en paseos culturales. Y el cementerio Inglés de Málaga es uno de ellos, reconocido además como Bien de Interés Cultural desde 2012.
Es el cementerio protestante más antiguo de la España peninsular y fue fundado por el cónsul británico William Mark con la intención de acoger a quienes no podían ser enterrados en cementerios católicos. La primera persona que fue sepultada, según los registros, fue George Stephens, dueño del bergantín Cicero, que se ahogó en el puerto de Málaga en enero de 1831. Allí también se pueden ver las tumbas de personajes relevantes como los escritores Jorge Guillén y Gerald Brenan, la economista Marjorie Grice-Hutchinson o la del autor y periodista finlandés Aarne Haapakoski.
Abrir la mente en La Térmica
La nueva creación, la cultura transgresora, los espectáculos provocadores, el pensamiento plural… todos los planteamientos tienen cabida en La Térmica. A lo largo de los años este espacio ha ido demostrando su importancia como centro de creación y formación cultural contemporánea abierto a la iniciativa ciudadana.
En su programa de actividades siempre hay algo nuevo y sorprendente, una exposición, un debate, un concierto, una obra de teatro o incluso un taller… Hasta el 22 de enero de 2021 se podrá visitar la muestra “Marilyn Manson: 21 años en el infierno” con las inquietantes imágenes de Perou, un reconocido fotógrafo británico de moda y retratos.
Taller de cerámica
Aquellos que tengan ya unos añitos, recordarán la famosa escena de modelado de barro de la película ‘Ghost’… algunos desde entonces soñamos con sentarnos ante un torno y probar suerte. No es fácil hacer una pieza de cerámica en condiciones pero sí constituye una actividad muy relajante y creativa para dejar a un lado el estrés y centrarse en la creación. Un buen lugar para iniciarse es Arcilla Arcilla Arcilla, donde Isabella de Haro, con una paciencia infinita, ayuda a dar los primeros pasos en el arte de la cerámica. Desde su espacio también propone talleres combinados con Mindfulness, apoyándose en otra profesional experta en este campo.
Bucear entre libros de segunda mano
Entrar en una librería de segunda mano es como bucear en busca de un tesoro, algo que te deja sin respiración cuando encuentras alguna de las muchas joyas que se ocultan bajo un montón de libros. Un lugar ideal para practicar el arte de la caza y captura de joyas literarias es la Librería low cost Re-Read (calle Victoria, 27), un lugar que desprende tan buen rollo que dan ganas de quedarse a vivir allí.
Nunca sales con las manos vacías y por un precio muy ajustado, ya que un libro te cuesta 3 euros; dos libros, 5 euros; y si te llevas 5 libros, sólo te sale por 10 euros. Con estas gangas tenemos las lecturas de todo el invierno por muy poca inversión. Además, si tienes en casa libros que ya has leído o que te han dejado de interesar, puedes llevarlos y te los re-compran.