La Reserva Natural Integral de El Pijaral es uno de los espacios verdes más bonitos y mejor conservados de la isla de Tenerife. Con más de 300 hectáreas de superficie, se encuentra dentro del Parque Rural de Anaga y cuenta con la riqueza añadida de los Roques de Anambro y Chinobre, unas moles verticales de piedra que se presentan altivos, impasibles y arrogantes ante el viajero. Presenta un aspecto muy escarpado y poco accesible y aquí se encuentra una de las mejores representaciones del bosque de laurisilva de Tenerife, con especies endémicas que se hallan en peligro de extinción, como las palomas rabiche y turqué.
El Pijaral, y los senderos que alberga, están sometidos al régimen de los alisios, unos vientos característicos de la zona que afectan a la cara norte de la isla y que dejan bastante humedad en el entorno, con abundancia de brumas y nubes, como ocurre en la cumbre de Anaga, lo que otorga un halo de misterio a la zona. Son vientos que juegan un papel esencial en la recarga de los acuíferos subterráneos. Y es que El Pijaral es un rincón muy singular pero también muy frágil que conviene preservar del turismo masivo.
- El Bosque Encantado
- Sendero El Pijaral con reserva previa
- Sendero circular El Pijaral
- Mirador Cabezo del Tejo
- La pista forestal de El Pijaral
- Dónde comer cerca de la Reserva Natural El Pijaral
- Dónde dormir cerca de la Reserva Natural El Pijaral
El Bosque Encantado
El Bosque Encantado de Tenerife es el sobrenombre que recibe El Pijaral por el ambiente casi literario y mágico que se percibe una vez que el visitante se adentra en su interior. Es como si uno se introdujera dentro de un cuento de hadas. Se encuentra en la zona este de Tenerife y el trayecto hacia el Bosque Encantado regala unas vistas de ensueño de la isla.
Aquí encontrarás laureles, naranjeros salvajes, tejos, acebitos, barbuzanos, tilos, sauces canarios, brezos… numerosas especies en las que se cobijan los musgos, líquenes y hongos.
Sendero El Pijaral con reserva previa
Al estar situado dentro de una reserva natural integral, el sendero El Pijaral sólo puede ser utilizado de un modo limitado, ya que está sometido a una estricta normativa. Así, no están permitidas las rutas organizadas por empresas turísticas con ánimo de lucro y hay un cupo de 45 personas máximo de visitas al día. Debido a estas limitaciones, hay que formalizar una reserva previa que puede incluir hasta cuatro acompañantes, y que hay que conseguir, lógicamente, antes de iniciar la ruta.
La gestión es sencilla, rápida y sin coste. Únicamente tienes que seleccionar la fecha en que deseas visitar la zona y rellenar un formulario con los datos personales.
El sendero El Pijaral es uno de los más interesantes y mágicos de los que existen en Tenerife y en él podemos encontrar la pijara (woodwardia radicans) que da nombre a la ruta, un tipo de helecho gigante que puede llegar a medir hasta tres metros de longitud y que, en ocasiones, forma enormes alfombras al paso del caminante.
Sendero circular El Pijaral
El sendero circular de El Pijaral parte de La Ensillada y transcurre por el mirador y la pista de Cabezo del Tejo hasta desembocar de nuevo en el punto de partida. Mide, en total, 6,7 kilómetros de longitud y se puede realizar en algo menos de tres horas, ya que se trata de una ruta bastante sencilla que transcurre por un terreno llano.
La caminata comienza en el bosque de laurisilva, un reducto natural de la época Terciaria que antiguamente ocupaba toda la cuenca mediterránea y que, debido a las glaciaciones, desapareció. Hoy se encuentran sólo reductos de laurisilva en Costa Rica, Madeira y algunas de las islas Canarias.
En la primera parte del sendero El Pijaral, se encuentra la llamada Piedra La Jurada, un lugar donde se hacía antiguamente carbón vegetal, y el Roque Anambro, una aguja de piedra de más de 800 metros de altitud y que corresponde a un vieja chimenea volcánica que la erosión ha ido moldeando a lo largo del tiempo.
Mirador Cabezo del Tejo
A una hora de distancia del comienzo de la ruta de El Pijaral, aparece el Mirador Cabezo del Tejo, que tiene una ventana abierta a vistas espectaculares frente al Atlántico. Desde aquí, se divisa en todo su esplendor el océano Atlántico, el Roque de las Ánimas, los pueblos de Almáciga y la zona de Benijo.
La pista forestal de El Pijaral
El sendero de El Pijaral pasa también por una amplia pista forestal que se abre a la derecha del Mirador Cabezo del Tejo y que conduce a la espesura del bosque. El misterio se apodera del caminante que avanza en un entorno brumoso en medio de una frondosa capa vegetal. Si nos fijamos en el suelo, descubriremos una delicadas flores de color azul violáceo que reciben el nombre de violetas de Anaga, una especie endémica que sólo se encuentra en esta zona de Tenerife.
Dónde comer cerca de la Reserva Natural El Pijaral
El Albergue Montes de Anaga, situado en El Bailadero, es el restaurante más cercano a la reserva, donde podrás degustar algún plato típico de la gastronomía canaria. No muy lejos se encuentra también el Bar Los Churritos – Casa Fernando, donde te sorprenderás con un pulpo guisado o unos churros de pescados deliciosos. También están cerca los restaurantes El Mirador, La Ola y Casa África.
Dónde dormir cerca de la Reserva Natural El Pijaral
La mejor opción para alojarse cerca de la Reserva Natural El Pijaral, por su excelente ubicación, es el Hotel Occidental Santa Cruz Contemporáneo. Se encuentra en la zona más exclusiva de la Rambla de Santa Cruz y cuenta con una magnífica piscina abierta todo el año con solarium. También tiene una excelente oferta gastronómica en su Restaurante Alfredo. Es el punto de partida ideal para hacer una excursión a El Pijaral.
