La orografía montañosa de Madeira es uno de los rasgos que más sorprenden al viajero en su primera visita. Cuando el avión se aproxima, su perfil se muestra integrado por grandes acantilados, pueblos a pie de costa y un interior salpicado de montañas y cubierto de un verde manto de vegetación. Entre esas cumbres está el Pico del Arieiro (Pico o do Areeiro) que con sus 1.818 metros de altitud es la tercera mayor cumbre de la isla.
Para los amantes de la naturaleza y la vida activa, el paisaje montañoso madeirense resulta una tentación y un gran descubrimiento. Esta isla portuguesa no es un destino adecuado para el turismo de masas sino para quienes busquen algo genuino y estén dispuestos a salir del circuito tradicional. Para conocer en profundidad las propuestas naturales que brinda este archipiélago hay que estar dispuestos a calzarse una botas de trekking y a dejarse sorprender por sus miles de senderos. Muchos de ellos siguen el trazado de las levadas, antiguas acequias que llevaban agua para regar los cultivos y que se reparten por su superficie. Entre todas las caminatas posibles, te animamos a realizar la Vereda que parte del Pico del Arieiro (o do Areeiro) y la levada do Caldeirão Verde, de las que te hablamos a continuación.
- Rutas de senderismo en Madeira
- Mirador a 1.817 metros de altura
- Dónde comer cerca del Pico del Arieiro
- Dónde dormir cerca del Pico del Arieiro
Rutas de senderismo en Madeira
El entorno del Pico do Areeiro (o de Arieiro) es perfecto para ser recorrido a pie mediante diversas rutas de trekking. Algunas regalan paisajes y experiencias tan impresionantes como la Vereda do Areeiro, y otras descubren viejos caminos, túneles y valles como la Vereda do Caldeirão Verde.
Vereda do Areeiro
La Vereda do Areeiro (PR1) conecta los dos picos más elevados de Madeira, tiene una extensión de unos 8 kilómetros y se puede hacer en tres horas y media de caminata. Sus puntos fuertes son los increíbles paisajes que brinda del macizo montañoso, algunos túneles y valles. Toda esta zona forma parte de la Red Natura 2000.
La ruta comienza en el Pico do Areeiro y pasa junto al mirador do Ninho da Manta, desde donde se puede ver el valle de Fajã da Nogueira, San Roque do Faial y parte de la cordillera central. Es necesario continuar caminando por el sendero en dirección al Pico Ruivo, rodear posteriormente el Pico das Torres, y hacer varias subidas y bajadas antes de llegar a la parte final, la cual lleva al refugio del Pico Ruivo. Pero no te asustes, se considera que este sendero tiene un nivel de dificultad media. Además de los paisajes, por el camino se pueden ver cuevas excavadas en la toba volcánica, muchas aves y plantas endémicas de la isla como la violeta de flor amarilla o las orquídeas de roca.
Levada o Vereda do Caldeirão Verde
La segunda propuesta es hacer un trekking por la Vereda do Caldeirão Verde (PR9) que tiene una extensión de 8,7 kilómetros (ida) y una dificultad media. El tiempo que se requiere para hacerla es de unas 5 horas y media. La caminata comienza en el Parque Forestal de Queimadas y lleva por la meseta de la levada do Caldeirão Verde, a unos 980 metros de altitud.
Los puntos fuertes de esta ruta son los espectaculares paisajes montañosos del interior de Madeira y sus interesantes tramos de túneles, excavados a mano, en los que incluso tendrás que usar linterna para pasarlos con seguridad. Por el camino se disfruta de una flora singular formada por ejemplares de cedros de Madeira, brezos centenarios, hayas europeas y cedros japoneses. Si te gustan las aves, lleva prismáticos porque hay reyezuelos listados y lavanderas cascadeñas de Madeira, entre otras especies. Las buenas fotografías están aseguradas en estos entornos que son auténticos vergeles como el lago de Caldeirão Verde.
Mirador a 1.817 metros de altura
Muy cerca del Pico del Arieiro se encuentra un mirador que desde sus 1.817 metros de altura regala unas impresionantes panorámicas del macizo central, sobre todo si el día está despejado. En caso de que existan muchas brumas o nubes bajas puede que lo único que veas es un mar de nubes… Sin embargo, merece la pena acercarse hasta allí y esperar un poco a que cambie el tiempo, a veces se despeja de repente. Una recomendación adicional en esta zona es ir bien abrigado y con cortavientos ya que el aire sopla frío y con fuerza (no olvides la altura a la que estarás) y se puede pasar mucho frío.
Dónde comer cerca del Pico del Arieiro
Si has dejado el coche en el Pico del Arieiro (Pico do Areeiro), tras la caminata puedes comer allí mismo. En este lugar se sitúa un restaurante-cafetería, Boutique do Areeiro, con una terraza estupenda que regala grandes vistas. No esperes una carta con especialidades gourmet pero sí que tienen sopas, ensaladas, tostas y sandwiches para reponer fuerzas tras el paseo. Si prefieres algo más elaborado, puedes dirigirte a la población de Curral das Freiras (a 15 kilómetros) donde se sitúa Sabores do Curral, un restaurante que ofrece una terraza con unas panorámicas increíbles y una carta muy completa. Es el lugar perfecto para probar los sabores de la isla, y el trato al cliente es exquisito. Otra opción desde Pico del Arieiro es el restaurante Casa de Abrigo do Poiso, en Poiso (a unos 7 kilómetros), que ofrece platos tradicionales, sopas, bacalao, carnes a la brasa y propuestas vegetarianas.
Dónde dormir cerca del Pico del Arieiro
Si además de las actividades en plena naturaleza también te gusta disfrutar de un entorno animado con buenos restaurantes, lugares para salir y paseos nocturnos, te recomendamos que te alojes en Funchal. La capital de Madeira es pequeña pero brinda una buena oferta urbana compatible con las rutas senderistas durante el día. En esta ciudad se sitúa el Allegro Madeira, un hotel de cuatro estrellas con una gran calidad de servicios para el huésped.
Situado en la zona del Lido, este hotel Adults only se encuentra totalmente renovado y muestra una imagen moderna y alegre. Sus 124 habitaciones son amplias y con buenas vistas al mar o a Funchal; además, cuenta con una gran piscina, Centro Wellness, gimnasio y un Rooftop Bar 360 donde despedir el día con un cóctel en la mano. ¿Puede haber un plan mejor? Sin duda, descubrir la belleza de Madeira desde la comodidad de sus instalaciones es un privilegio al alcance de todos.