El archipiélago de Madeira es uno de esos destinos que, a pesar de ser portugués, siempre hemos considerado un lugar poco accesible. Sin embargo, gracias a los vuelos directos o con escala en Portugal se ha convertido en una de las escapadas idóneas para los amantes de la isla, de la naturaleza y de los sitios poco masificados. Aunque habitualmente Madeira es el primer lugar en el que pensamos dentro del conjunto insular, la pequeña Porto Santo resulta un complemento idóneo porque cuenta con extensas playas de arena dorada, algo que es menos habitual en su hermana mayor.
Como curiosidad podemos contarte que la arena fina de la playa de Porto Santo posee unas características especiales y que incluso se utiliza para curar problemas reumáticos y motores. Por su parte, el agua del mar ofrece yodo, magnesio, calcio… elementos que vienen fenomenal para recuperarse de etapas estresantes. Aunque Porto Santo sea una isla menos verde y montañosa que Madeira también se pueden hacer caminatas para completar la estancia en el litoral. Y, por supuesto, hay que dedicar unas horas a recorrer la capital, Vila Baleira, donde se concentra la mayor parte de la población.
- Cómo es Porto Santo
- Historia de Porto Santo
- Cómo son las casas tradicionales de Porto santo
- Playa de Porto Santo
- Miradores de Porto Santo
- Cómo llegar a Porto Santo
- Dónde comer en Porto Santo
- Dónde dormir cerca de Porto Santo
Cómo es Porto Santo
Te damos algunos datos sobre la isla de Porto Santo que pueden resultar de interés: tiene una superficie de 42,48 km2 y se sitúa a unos 500 kilómetros de la costa africana y 1.000 de Europa. Su orografía es muy distinta de la de Madeira, aunque también tiene algunas cimas como Pico de Facho que sobrepasa los 500 metros de altitud. Es una isla que se presta a ser visitada durante todo el año porque sus temperaturas son agradables y su clima es seco. Si practicas submarinismo te interesa saber que el agua del mar alcanza en verano unos 25ºC, y unos grados menos en invierno. Pero lo mejor es que descubras por ti mismo todo lo que ofrece mediante una excursión.
Historia de Porto Santo
La isla de Porto Santo fue descubierta por João Gonçalves Zarco y Bartolomeu Perestrelo en el año 1418. Estos navegantes habían sido enviados por el rey Juan I de Portugal para hallar nuevas tierras que conquistar en la franja oeste africana. Se cree que el nombre de Porto Santo (“puerto santo”) se debe a la protección que ofrecía esta bahía de las tempestades y el mar abierto. Los primeros colonos llegaron poco después, en la década de 1420. El primer gobernador de la isla fue Bartolomeu Perestrelo, quien se dice que liberó conejos que llevaba en el barco y que causaron un gran estropicio en la flora local. En los inicios no fueron años fáciles, al problema de los conejos hubo que sumar la escasez de agua y los ataques de piratas pero poco a poco salió adelante y afianzó una pequeña población.
Otra de las curiosidades que hay que mencionar en Porto Santo es que Cristóbal Colón se casó con Filipa Moniz Perestrelo, la hija del gobernador. No te pierdas la casa donde la pareja residió y que actualmente se encuentra musealizada.
Cómo son las casas tradicionales de Porto santo
Al igual que en la isla de Madeira hay que fijarse en las viviendas de Santana con los techos de paja, en Porto Santo hay que conocer las tradicionales casas de Salão. Estas residencias de aspecto humilde, tienen los tejados cubiertos con mortero de arcilla con el que se protege de los cambios de temperatura y se aísla del exterior. En verano, resultan frescas porque al agrietarse circula el aire, y en invierno absorbe la lluvia y se impermeabiliza por sí sola. Interesante, ¿verdad?
Playa de Porto Santo
La playa de Porto Santo se extiende por el sur de la isla a lo largo nueve kilómetros de forma continuada. En las distintas franjas que la componen recibe distintos nombres como Penedo, Cabeço da Ponta, Calheta, Fontinha, Pedras Pretas y Ribeiro Salgado. En su totalidad es un arenal excepcional, con una arena fina y dorada, con tramos reconocidos con bandera azul y que son accesibles (como la praia de Fontinha).
Si ya has visitado las playas de la isla de Madeira, entenderás que las playas de Porto Santo son únicas y diferentes, auténticos paraísos donde caminar, darte un baño o relajarte tumbado en la arena. No te pierdas los magníficos atardeceres desde la playa.
Miradores de Porto Santo
Una de las rutas recomendables en Porto Santo es la que conecta los miradores de la isla. Circular por este pequeño territorio parando en sus puntos panorámicos es casi obligado. Uno esos puntos que regala increíbles vistas es el mirador de Portela, donde rodeados de molinos de viento muestra una imagen de la kilométrica playa de Porto Santo. Entre nuestros favoritos también está el mirador de la Fonte de Areia, en la costa norte, desde donde se ven los acantilados y el islote de Fonte de Areia. Otro imprescindible es el mirador de la Flores, que se abre a la playa de Calheta y a los islotes de Ferro, Cal y Cima.
Toma nota también del mirador de las Lombas, situado sobre la capital y que muestra vistas de la bahía, y del mirador de la Ponta da Canaveira, desde donde se ve el islote do Ferro. Y para terminar la ruta, el mirador de Pico do Castelo, con vistas a la ciudad y a los islotes de Cal y Cima, y el mirador de Terra Chã, que muestra la costa oeste de la isla y los islotes de Cenouras, Fora y Pico Branco.
Cómo llegar a Porto Santo
A Porto Santo se puede acceder en avión o en barco. Lo más habitual es llegar en ferry desde la isla de Madeira, ya que existe una línea regular que realiza varias salidas al día. Aunque el viaje tiene una duración de dos horas y media, no son pocos los viajeros que se lo plantean como una excursión de una sola jornada, saliendo en el primer ferry del día y regresando en el último. Para conocer horarios y precios, sólo tienes que consultar en la compañía Porto Santo Line.
Dónde comer en Porto Santo
A pesar del tamaño reducido de la isla, en Porto Santo hay buenos restaurantes donde disfrutar de la gastronomía local. Si quieres comer con vistas y casi con los pies en la arena, te sugerimos acercarte al restaurante O Calhetas, en la Ponta da Calheta, donde la cocina marinera es magnífica. Pescados a la brasa, pulpo, lapas, arroces… todo delicioso. La segunda opción que te sugerimos están en Vila Baleira, la capital, y tiene unos grandes ventanales desde donde se admira el océano. Es el restaurante Casa do Velho Dragoeiro, y también ofrece una exquisita cocina marinera a partir de productos locales. Buena relación calidad precio y servicio atento y amable. Por último, también debemos mencionar el restaurante Panorama, que hace honor a su nombre y tiene unas vistas preciosas de la playa. Aquí podrás disfrutar tanto de pescados como de carnes, todo es exquisito. Reserva al atardecer y pide ventana.
Dónde dormir cerca de Porto Santo
Si te planteas la excursión a Porto Santo como una actividad de ida y vuelta desde la isla de Madeira, alójate en Funchal para salir desde su puerto en el primer ferry del día. En esta ciudad se sitúa el Allegro Madeira Adults only, un cuatro estrellas totalmente renovado que se puede convertir en el campamento base que necesitas para recorrer el archipiélago. Este agradable hotel situado en la zona del Lido, cuenta con unas amplias habitaciones decoradas con toques alegres, y zonas comunes con piscina y jardines. Además, también ofrece bares, restaurante, gimnasio, Centro Wellness y un rooftop desde donde despedir el día con una copa de vino local en las manos. ¡No hay mejor plan!