Situada en el noroeste de la provincia de Alicante, Villena muestra su silueta inconfundible con su gran castillo medieval en lo alto, muy bien conservado y dando fe de la antigua grandeza de esta villa, que ya tuvo el título de ciudad en el siglo XVI. Es la capital de la comarca del Alto Vinalopó y limita al oeste con la Región de Murcia y Castilla-La Mancha y al norte con la provincia de Valencia.
Esta villa, ubicada en las estribaciones de la Sierra de Salinas, tiene una larguísima historia, que se remonta al Paleolítico Medio y seguramente es la zona con más biodiversidad de la provincia de Alicante, pues aquí se pueden ver con facilidad ginetas, gatos monteses, jabalíes, conejos, aves rapaces y perdices.
Hoy, Villena cuenta con 35.000 habitantes y en su casco histórico conviven las vieja piedras de los edificios monumentales de hace siglos y los más atrevidos ejemplos de la arquitectura contemporánea. Conviene disfrutar de un bonito paseo por el casco histórico de Villena y descubrir su rico patrimonio cultural, en el que caben ermitas, iglesias, museos, palacios, plazas y hasta un colosal castillo.
- Historia de Villena
- Recorrido por el casco histórico
- Castillo de la Atalaya
- Dónde comer en Villena
- Qué ver en los alrededores de Villena
- Itinerarios Alicante
- Dónde dormir cerca de Villena
Historia de Villena
Hay constancia de que en la zona donde hoy está Villena existía un poblado durante el Paleolítico Medio, pero hay dudas todavía de si la ciudad actual data de los tiempos de los visigodos o es anterior. Después de la dominación musulmana, pasó a ser un señorío, principado, ducado y finalmente marquesado, hasta que en 1525 Carlos V le otorgó el título de ciudad, coincidiendo con el momento de mayor esplendor de Villena.
En 1833 dejó de depender del Reino de Murcia para pasar al Reino de Valencia. Entonces, la economía estaba centrada en la agricultura, aunque la industria fue cobrando auge poco a poco, especialmente en los sectores del calzado, la construcción y los muebles.
Recorrido por el casco histórico
Villena tiene muchos atractivos turísticos para mostrar al visitante dentro de su casco histórico. Entre ellos, se encuentran el Ayuntamiento y la Casa de la Cultura. Uno de los lugares más singulares de Villena es el Museo Festero, ubicado en un palacete de estilo modernista, donde se puede admirar la evolución de las populares Fiestas de Moros y Cristianos de Villena y los diferentes trajes que se han llevado a lo largo del tiempo.
Puedes hacer después una parada en la Plaza Mayor, una de las más antiguas de España. Aquí precisamente nació uno de los compositores de zarzuela más conocidos: Ruperto Chapí. Y más adelante, te encontrarás con la iglesia de Santa María, que preside el sinuoso barrio de El Rabal, y con la iglesia de Santiago, edificada entre los siglos XIV y XVI con estilos gótico y renacentista.
Si eres de Madrid y te interesa la escultura, puedes dirigirte al Museo Navarro Santafé, porque aquí se encuentran muchas de las obras del autor de “El oso y el madroño”, la célebre escultura de la Puerta del Sol de Madrid. No puede faltar tampoco una visita al Castillo de la Atalaya en tu recorrido por el casco histórico. De época almohade, fue construido en el siglo XII, aunque fue ampliado en el siglo XV por Don Juan Pacheco, segundo marqués de Villena.
Desde el centro de Villena, puedes participar en la Ruta del Vino de Alicante y hasta recorrer una parte del Camino del Cid.
Castillo de la Atalaya
Se trata de un fortaleza espectacular levantada durante el imperio almohade a finales del siglo XII como refugio para los musulmanes que habitaban en Villena. También de esta época es la muralla interior y los dos primeros pisos de la torre del homenaje, con sus impresionantes y singulares bóvedas.
Jaime I conquistó el castillo en 1240 y, desde entonces, el Señorío de Villena pasó a manos de la familia Manuel, primeros señores feudales. En el siglo XIV fue príncipe de Villena el escritor Don Juan Manuel, autor de “El conde Lucanor”. Ya en el siglo XV, el castillo fue gobernado por la poderosa familia Pacheco, marqueses de Villena, que añadieron dos nuevos pisos a la torre y construyeron la segunda muralla. Y en 1476, los Reyes Católicos arrebataron el castillo a los Pacheco tras un duro asedio, del que quedan numerosas huellas en el patio de armas.
Durante los siguientes siglos, el castillo de Villena fue un escenario importante de las guerras de Germanías, la Sucesión o la Independencia, tal como muestran los impactos de artillería existentes y los grafitis de la torre, realizados por los cautivos.
Dónde comer en Villena
En Villena existen numerosos restaurantes donde podrás disfrutar de un buen almuerzo o una agradable cena con propuestas típicas de la gastronomía alicantina y mediterránea. Los más conocidos son La Teja Azul, especializado en arroces; Miguel Ángel, restaurante incluido en la Ruta del Vino de Alicante; Equélite, situado junto a la academia de tenis de Juan Carlos Ferrero en Villena; Auroch Bar, restaurante de cocina fusión con los sabores de siempre; El Culto Terraza, cuya carta está basada en los productos de temporada; Salvadora, un restaurante centenario que tiene en los arroces parte de su ADN; Riesma, apto para todo tipo de paladares y bolsillos; La Despensa, un local de aire rústico con un amplia barra para tapas y pinchos; Warynessy, situado junto al Teatro Chapí y con un amplia carta; el Salón de la Cerveza, donde podrás degustar una excelente cerveza artesana; Di Trevi, especializado en arroces, o Imperial, célebre por sus propuestas de bacalao.
Qué ver en los alrededores de Villena
En las proximidades de Villena existen numerosos atractivos turísticos para disfrutar. Sin ir más lejos, hay tres pueblos muy recomendables a un paso de esta bonita localidad del interior de Alicante. Se trata de Bihar (a 11 kilómetros), Sax (a 10 kilómetros) y Castalla (17 kilómetros).
Bihar está considerado uno de los pueblos de montaña más bonitos de Alicante. También tiene un castillo muy bien conservado en cuyo interior hay unos arcos almohades que merece la pena contemplar. La plaza del ayuntamiento es el centro social de la localidad y aquí se encuentra la Iglesia de la Asunción, del siglo XV, desde donde puedes callejear libremente. Otra joya de este pueblo es el Santuario de la Virgen de Gracia.
Sax, con un increíble castillo alargado en lo alto de una gran roca, es un pueblo muy interesante para descubrir. El río Vinalopó cruza el casco histórico de esta bonita localidad que tiene un museo dedicado a Alberto Sols, premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica 1997.
Castalla, por último, también está dominado por un curioso castillo que puede visitarse. Merece la pena contemplar la fachada del ayuntamiento, de estilo renacentista, y la ermita de la Sangre, un edificio de estilo gótico primitivo. Si viajas con niños, debes de saber que aquí está el parque de Playmobil y que este pueblo forma parte, junto con Onil e Ibi, del Valle del Juguete, una comarca con numerosas fábricas de muñecas y juguetería.