Uno de los primeros lugares que visitamos cuando viajamos a una nueva ciudad es su Plaza Mayor o espacio histórico de mayor renombre. Intuimos que esos lugares recogen la historia y las vidas de los vecinos a lo largo del tiempo, y rara vez nos equivocamos. La Plaza Mayor de Ourense ha sido desde siempre el epicentro del casco antiguo de esta capital gallega, ese lugar donde los ourensanos se reunían para celebrar, comerciar o para dejarse ver. Sin embargo, esta plaza es más peculiar de lo que puedas imaginar ya que no es habitual que un espacio público tan importante esté situado en un “incómodo” plano inclinado que obliga a las construcciones circundantes a adaptar sus paredes según esta particularidad. Aunque caminar no llega a ser tan molesto… una vez que te acostumbras.
De un primer vistazo llaman la atención los edificios circundantes, que muestran diferentes tipos de arquitectura, y los soportales situados en tres de sus cuatro laterales. Esos tres laterales formaban parte de El Espolón, que era ese paseo donde los nobles caminaban y se exhibían ante sus iguales. De estas historias os hablaremos en los apartados siguientes porque las plazas mayores, a poco que nos fijemos, están dispuestas a contarnos decenas de anécdotas.
- Historia de la Plaza Mayor
- Edificios y lugares emblemáticos
- Dónde comer cerca de la Plaza Mayor
- Dónde dormir en Ourense
Historia de la Plaza Mayor
Conocida anteriormente como la Plaza del Campo, la Plaza Mayor de Ourense guarda una larga historia oculta entre las paredes que la custodian. Los primeros datos de la misma se remontan al siglo XV y siempre ha ejercido un papel importante en la vida de la ciudad. Su leve inclinación se debe a su emplazamiento sobre una terraza del río que antaño denominaban Barbaña. Reseñable a lo largo del tiempo es su carácter comercial, debido a que acogía mercados; su apego al poder municipal, ya que siempre ha acogido edificios oficiales; y su cercanía a la Catedral, desde cuyas torres se observa la plaza. Incluso la justicia pillaba a mano, ya que al final de la calle Pelouriño (actual Colón) se sitúa la picota donde se ajusticiaba a los reos.
Edificios y lugares emblemáticos
Alrededor de la Plaza Mayor se sitúan edificios tan icónicos como la Casa Consistorial. Está situada en el único lateral que no tiene soportales y su fachada de corte clasicista fue obra de Queralt. La fachada muestra un reloj y un blasón de los Reyes Católicos. En su interior merece la pena visitar el Salón Noble de Sesiones, con interesantes relieves, al que se accede por una escalera monumental. Junto a esta edificación se sitúa el Antiguo Palacio Episcopal (siglo XII), de estilo románico y declarado Monumento Histórico-Artístico. En su interior está hoy día el Museo Arqueológico Provincial.
Los tres lados con soportales de la Plaza Mayor, por donde antaño paseaban los nobles, hoy día se han convertido en el lugar de disfrute de vecinos y visitantes que pasan buenos ratos en las numerosas terrazas que miran a la plaza. Los edificios que jalonan el antiguo paseo, de los siglos XVIII y XIX, exhiben unas bonitas fachadas cargadas de detalles. Entre ellas, llama la atención la casa de Fermín García, que fue diseñada por Vázquez Gulías y ha sido reconvertida en una sala de exposición. Este es uno de los ejemplos de arquitectura modernista más significativo de la ciudad.
Dónde comer cerca de la Plaza Mayor
Alrededor de la Plaza Mayor de Ourense se sitúan numerosos bares, restaurantes y terrazas. No te costará encontrar alguno que satisfaga tus gustos e intereses. En la misma plaza se sitúa Tamarindo, que se define como “Patio bar y casa cocina”, un establecimiento que partiendo del producto local presenta una carta que incluye también otros sabores del mundo. Un lugar muy completo, para desayunar, tapear, comer o para tomar una copa. Muy cerca de la Plaza Mayor, en la plazuela de la Magdalena se sitúa Tapanegra Gastrobar, un local en el que se come fenomenal y tiene tapas, raciones o lo que necesites. Idóneo también para recargar energía es el restaurante Ataraxia, donde tomar buenas raciones a precios aceptables. Prueba sus chipirones a la plancha, los tacos de ternera rubia gallega o los callos de la abuela Raquel. Y si quieres menú del día, también lo puedes escoger.
Dónde dormir en Ourense
Uno de los hoteles más recomendables para disfrutar de unas vacaciones en esta capital provincial gallega es el Barceló Ourense, un cuatro estrellas situado cerca del Parque de San Lázaro, en pleno centro de la ciudad. Por su impronta vanguardista y la calidad de sus instalaciones es una opción perfecta para recorrer el casco antiguo de Ourense a pie. Si los espacios comunes ya enamoran espera a ver sus B-room ultra cómodas con carta de almohadas, duchas efecto lluvia, kit de café y té y un colchón increíble. Los desayunos son para recordar y también ofrece algunos snacks en el lobby-bar. Y si te gusta cuidarte en tus viajes, no olvides que el hotel tiene sala de fitness y sauna.