Para los más mayores de Barcelona mencionar El Raval supone pensar en una zona degradada y poco recomendable. Nada más lejos de la realidad. Lo cierto es que la acertada idea de traer aquí las sedes del Museo de Arte Contemporáneo (MACBA) y del Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona (CCCB) supuso el germen de una revolución. La que supuso la transformación del antiguo barrio chino, el de la prostitución y los tugurios de mala reputación, en uno de los barrios más interesantes, desde el punto de vista cultural y de ocio, de la Barcelona actual. 

Hoy El Raval es un barrio multicultural, multiétnico (se considera que más de la mitad de la población del barrio procede de otros lugares del planeta) y muy abierto al arte y las vanguardias de todo tipo. 

  1. Que ver en El Raval
  2. Rambla El Raval
  3. El Gato de Botero
  4. Palau Güell
  5. Fuente de Santa Eulalia
  6. Compras en las calles Talleres y Riera
  7. Museo de Arte Contemporáneo
  8. Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona
  9. Un hotel emblema; Barceló Raval
  10. El Mercado de Sant Antoni
  11. Restaurantes y bares en El Raval
  12. Dónde alojarse en Barcelona

Qué ver en El Raval 

Ante todo, merece la pena pasear por El Raval. Tomar cualquiera de las calles que salen de La Rambla y empezar a callejear entre las fachadas de sus viviendas humildes, aunque cada vez más demandadas por jóvenes profesionales y amantes del arte en general. Después, conviene visitar algunas de sus principales referencias: 

Rambla del Raval

Se trata de la principal vía del barrio y uno de los mejores puntos de encuentro entre sus vecinos y la gente que visita la zona. Este bulevar es fruto de una remodelación urbana acometida en 1955 con el objetivo de dotar al barrio de un espacio abierto, entre las calles Sant Pau y Hospital.

Su edificación la convirtió en la más “joven” de las ramblas que cruzan Barcelona. Un auténtico pulmón verde en la vida de este barrio que, no obstante, ya figuraba en la remodelación que había ideado Ildefonso Cerdá a principios del siglo XX.

Por otro lado, la construcción e inauguración en 2008 del Hotel Barceló Raval supuso para este bulevar una evidente revalorización, atrayendo a tiendas, restaurantes y otros negocios con mucho estilo y diseño.

El Gato de Botero

Es, con seguridad, el elemento más fotografiado de la Rambla del Raval y también uno de los más instagrameados de toda Barcelona. Esta escultura en bronce, realizada por el colombiano Fernando Botero, lleva en el bulevar desde el año 2003. Pero mucho antes “vagabundeó” por otros lugares de la ciudad durante 16 años, cuando fue adquirido por el Ayuntamiento de la ciudad.

La escultura en bronce tiene 7 metros de largo y 2 de ancho y alto y más de 1.000 kilogramos de peso. Aparte de su evidente función ornamental, supone uno de los principales puntos de encuentro para los habitantes del barrio.

Palau Güell

En el paseo casual por el Raval llama mucho la atención la fachada de este palacio. Se trata de una de las obras menos evidentes de Antonio Gaudí. El edificio, encargado al genial arquitecto por el empresario e industrial Eugeni Güell, se inauguró en 1890 y fue destinado a residencia familiar.

Aunque se trate de uno de los primeros proyectos de Gaudí, lo cierto es que en su estructura y ornamentación ya se reconocen buena parte de los motivos y técnicas característicos de otras obras del genial arquitecto.

En 1945 Mercè Güell, hija pequeña del promotor, lo cedió a la Diputación de Barcelona para convertirlo en un centro de cultura, a cambio de preservar el rico legado artístico que encierra este monumento. Un objetivo logrado con creces, sin duda, y reconocido por la Unesco, que lo incluyó dentro de la lista del Patrimonio Mundial bajo el paraguas de “Obras de Antoni Gaudí”.

Fuente de Santa Eulalia

Se encuentra en la Plaza del Padró y está considerada como uno de los monumentos más antiguos de la ciudad (1670). Aunque lo cierto es que la estatua que corona el conjunto, dedicada a esa santa, fue destruida en 1936, en plena Guerra Civil Española. Lo único que sobrevivió de la contienda fue la cabeza de la escultura, que hoy se puede observar en el Museo de Historia de la Ciudad.

La imagen actual data de 1951 y la realizó Frederic Marès. El monumento formaba parte del conjunto de una antigua leprosería, a la que también pertenecía la vecina capilla de San Lázaro.

Compras en las calles Tallers y Riera

Estas dos vías conforman el principal eje comercial de El Raval. Son ideales para un shopping alternativo, con tiendas vintage y otras en las que se visten las tribus urbanas más diversas.

En total, son más de 2.000 negocios, que van desde los tradicionales y familiares colmados en los que adquirir todo tipo de ingredientes culinarios, hasta productos de segunda mano (como los vinilos que se venden en alguna de ellas), pasando por moda y complementos, decoración y tiendas especializadas en los artículos más peregrinos. También muchos artículos para coleccionistas.

Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona (MACBA)

Este museo es la principal referencia de la ciudad en arte del siglo XX. Como tal, aquí se pueden admirar obras realizadas desde principios del siglo pasado, firmadas tanto por artistas nacionales como internacionales de gran prestigio.

Entre ellos, se puede citar a Jean-Michel Basquiat, Eduardo Chillida, el Grup de Treball, Jorge Oteiza o Marcel Broodthaers. De especial importancia son las colecciones de Pop Art y de la Abstracción. También resulta muy significativa la donación realizada en 2020 de la Colección Rafael Tous, que supone el conjunto de otras de arte plástico conceptual más extenso y completo de Cataluña.

Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona (CCCB)

El objetivo fundamental de esta institución es fomentar la creatividad en sus más diversas expresiones. Por eso su agenda está repleta de exposiciones, conferencias, proyecciones de cine, debates, actuaciones musicales y otro tipo de manifestaciones artísticas. Fruto de las nuevas tendencias en materias de arte, el CCCB está realizando una apuesta muy importante por los formatos tecnológicos y multimedia.

La creación del Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona, en 1989, impulsado por la Diputación de Barcelona y el Ayuntamiento de la ciudad, supuso el germen de regeneración del barrio de El Raval. Para ello, se eligió el antiguo edificio de principios del siglo XIX que ocupó la Casa Provincial de Caridad.

el raval
Vista de los tejados de El Raval

Un hotel emblema: Barceló Raval 

Junto a esas referencias, uno de los edificios más representativos de la nueva vida en este barrio es el Hotel Barceló RavalSu estructura, un gran cilindro metálico, destaca en altura sobre el resto de edificios de El Raval. El proyecto fue realizado por el estudio balear CMV Architects. 

Inaugurado en 2008, desde el principio se convirtió en un faro para El Raval. Y no solo por la arquitectura, también por la preparación de su personal, que orienta a los clientes sobre las mejores opciones de ocio en el barrio y en el resto de Barcelona. 

Además, la terraza situada en la azotea del hotel, supone un magnífico mirador de 360° a toda la ciudad, que también puede contemplarse desde la piscina situada en ella. Por la tarde-noche es uno de los lugares más recomendables para tomar un cóctel. También programan sessions con reconocidos dj’s. 

Tan interesante como la terraza es la planta baja del hotel, donde se encuentran la recepción, el restaurante y el bar B lounge. Éste muy frecuentado tanto por los huéspedes del propio hotel como por los nuevos vecinos del barrio. 

El mercado de Sant Antoni

Se puede decir que El Raval tiene dos mercados. Por un lado La Boquería, aunque la puerta principal se encuentre en La Rambla, y el mercado de Sant Antoni. Éste, incluido en el proyecto urbanístico de Ildefons CerdàSunyer de mediados del siglo XIX, es uno de los mercados más importantes de la ciudad.  

No se trata en realidad de un solo mercado, sino de tres. 

  • De alimentación fresca: muchos de los puestos tradicionales siguen estando aquí, pero cada vez surgen más propuestas de productos gourmet junto a barras y pequeños locales donde degustarlos. 
  • El de Los Encantos de Sant Antoniuna especie de centro comercial ad hoc, en donde se pueden adquirir desde moda y complementos a menaje de hogar, joyería y relojes, telas, mercería y perfumes. 
  • De libros: tiene lugar todos los domingos y no solo se venden libros viejos y nuevos, sino también postales, sellos, revistas, cromos, videojuegos, películas… 

Restaurantes y bares en El Raval 

En una visita al barrio de El Raval no habría que perderse la posibilidad de tomar una tapa o, incluso de comer o cenar, en alguno de los bares y restaurantes de la zona. Algunos de los más recomendables son: 

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Vista de balcones típicos del barrio de El Raval
  • Dos Palillos (Elisabets, 9): Albert Raurich, cocinero de la escuela de El Bulli, realiza aquí una arriesgada apuesta por la cocina oriental en un barra continua para solo 12 comensales.  
  • La Monroe (Plaza Salvador Seguí, 1): es el bar de la Filmoteca de Catalunya. Como era de prever, en su decoración hay numerosos guiños al mundo del cine y es muy frecuentado a mediodía (por su asequible menú). Pero también a la hora del vermuteo y del aperitivo con tapas. 
  • Gats (Xuclà, 7): con la llegada del buen tiempo, instala una de las terrazas más agradables del barrio. Ideal para cualquier momento del día, desde el desayuno a la cena, pasando (cómo no) por el tapeo. 
  • Casa Leopoldo (Sant Rafael, 24): es el revival de uno de los restaurantes clásicos y casi míticos de Barcelona. Aquí se viene a degustar comida típica de Barcelona, con una mención especial a su guiso de rabo de toro. 

Dónde alojarse en el Raval

La principal referencia en materia de alojamiento en esta zona es el Hotel Barceló Raval. Un establecimiento rompedor en cuanto al diseño y muy recomendable por la calidad de servicios y las magníficas vistas que se disfrutan desde sus 182 habitaciones y 4 suites. Es toda una referencia en el Raval, sobre todo por su oferta gastronómica, entre la que destaca su B-Lounge, especializado en tapas de diseño, cócteles y su brunch de los domingos. También es muy popular la terraza que hay sobre su azotea, dotada con una piscina y solarium, que es un lugar ideal para tomar una cerveza, una copa o un cóctel a la caída de la tarde.