Probar la comida tradicional de Baréin supone sumergirse en un mundo de sabores y aromas diferentes. De hecho, la cocina de este país tiene una gran influencia del resto de países árabes. En los platos más populares y sabrosos, el arroz comparte protagonismo con las carnes de cordero y pollo, con los pescados más variados, con todo tipo de verduras y también con el toque que le aportan las numerosas especias que forman parte de la tradición culinaria de este pequeño país insular.
Pero la comida tradicional de Baréin no solo está marcada por la proximidad a los vecinos y ribereños países de Medio Oriente. En ella también tiene mucho que ver su historia, al haber sido escala habitual de las expediciones que, desde tiempos inmemoriales, han comunicado los pueblos de Asia, África y Europa. Esto se nota no solo en el consabido y generoso uso de especias e ingredientes de procedencia lejana, también en recetas que se preparan de una forma similar a la de lugares que pueden parecer exóticos para un punto de vista occidental.
A continuación detallamos algunos de esos platos, sus principales ingredientes y también algunos consejos para disfrutar de ellos.
Ghouzi
Este plato, una de las estrellas de la comida tradicional de Baréin, se suele consumir en días de fiesta o en celebraciones especiales. Aunque lo cierto es que cada vez son más los restaurantes que lo ofrecen de forma habitual en sus cartas. Se trata de un cordero entero relleno con pollo, huevos, arroz, cebolla, alguna que otra verdura y una mezcla pecisa de verduras. Todo ello se asa a las brasas de leña o en el horno y se sirve en raciones compartidas por cuantos más comensales, mejor.
Shawarma
No se trata de un plato específico del recetario de comida tradicional de Baréin, sino que este país lo comparte con el resto de naciones árabes y otras del Norte de África que fueron conquistadas en algún momento.
Se trata de una especie de bocadillo fino a base de pan de pita y relleno de carne deshilachada de cordero, pollo o, incluso, pescado. Es, más bien, una comida informal, pero que conviene probarla en algún momento de la visita a este pequeño país.
Machboos
De esta preparación de la comida tradicional de Baréin se podría decir que es el plato nacional. Desde luego, en algún momento u otro de la semana (incluso del día) se prepara en todos los hogares del país. Y, por supuesto, detrás de él hay una gran historia: la del encuentro entre los comerciantes persas y los de la Península de la India, milenios atrás. Hoy, como en el pasado, ofrecer a un visitante un plato de machboos es una de las máximas expresiones de hospitalidad por parte de las familias bareiníes.
En esencia consiste en una combinación de arroz basmati con carne de pollo o cordero (o pescado), cebollas, tomates, ajo y especias como la cúrcuma, la lima negra, las semillas de cilantro, la canela en rama y las pipas de cardamomo.
Sambosa
Dentro de la comida tradicional de Baréin, las sambosas son el equivalente a las conocidas samosas fritas (o empanadillas de forma triangular) típicas de la cocina India y de otros países asiáticos.
En Baréin los rellenos más populares son a base de carne de pollo, cordero, vacuno y atún, complementados con verduras y especias como la cúrcuma y el azafrán. También hay versiones de samosas a base de queso y exclusivamente vegetarianas.
Muhammar
Como el resto de los países árabes, el arroz cocinado con los ingredientes más diversos tiene en Baréin tienen su propia versión. En este caso, comparten protagonismo con el cereal el pescado asado o frito o el cordero asado (por lo general pierna o paletilla). La más llamativo y sugerente de este plato es el contraste de sabores, pues el arroz tiene un toque dulce y se complementa con los aromas que aportan azafrán, cardamomo, clavos, agua de rosas y otras especias.
Dulces típicos de Baréin
Entre los dulces típicos de Baréin quizás el más goloso de todos sea el halwa bahnraní, una receta de textura gelatinosa que se elabora con fécula de maíz, azafrán, agua de rosas, ghee (un tipo de mantequilla clarificada), azúcar y trozos de frutos secos. Es un complemento perfecto a una taza de café y, en las casas del país, ambos suponen un gran gesto de hospitalidad hacia los visitantes.
También muy populares son los ma’amoul, es decir los típicos pastelitos de masa filo rellenos de dátiles y frutos secos y bañados en abundante miel.
Y, por supuesto, uno de los dulces más habituales en Baréin, muy fácile de encontrar sobre todo en los zocos y puestos callejeros, son los dátiles, que aquí se suelen rellenar con queso y/o frutos secos.