Bahréin, un diminuto archipiélago en el Golfo Pérsico, es un destino aún desconocido que fusiona a la perfección su alucinante modernidad con una rica historia antigua. Conocido por sus impresionantes rascacielos y su pujante economía, también es hogar de tesoros históricos que datan de la civilización Dilmún, una de las más antiguas del mundo.
Desde los bulliciosos zocos de Manama y las majestuosas mezquitas, hasta los misteriosos túmulos funerarios y las tranquilas playas, Bahréin ofrece una diversidad de experiencias que capturan la esencia del Medio Oriente. ¡Acompáñanos en este recorrido por el país!
Isla de Muharraq
La Isla de Muharraq, una de las zonas más antiguas y tradicionales de Bahrein, ofrece un fascinante vistazo a la cultura y la historia del país. Pasea por sus callejuelas empedradas y descubre la arquitectura tradicional bahreiní, caracterizada por las casas de coral local. La casa del Sheikh Isa bin Ali Al Khalifa, gobernante de Bahréin entre 1869 y 1932, es uno de los principales atractivos, un ejemplo impresionante de la arquitectura islámica con sus intrincados diseños y patios interiores que reflejan la vida familiar de la época. Además, explora el zoco de pescado de Muharraq, donde puedes observar la animada actividad de los pescadores locales y disfrutar de mariscos frescos.
Además, no te puedes ir de la isla de Muharraq sin hacer la Ruta de las Perlas, un recorrido histórico que conmemora la próspera industria perlera que fue fundamental para la economía de Bahréin durante siglos. Este itinerario cultural, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, guía a los visitantes a través de diversos sitios relacionados con la recolección, procesamiento y comercio de perlas. A lo largo de la ruta, se pueden visitar casas tradicionales de comerciantes de perlas, almacenes, y antiguas torres de vigilancia que protegían esta valiosa industria. Entre los puntos destacados se encuentran la Casa Bin Matar, una residencia restaurada que ilustra la vida de un prominente comerciante de perlas, y el Fuerte Bu Mahir, una estructura defensiva en el extremo sur de la isla que servía como punto de partida para los buceadores de perlas.
Gran Mezquita Al-Fateh
La Gran Mezquita Al-Fateh, también conocida como Al-Fateh Islamic Center, es uno de los lugares más emblemáticos de Bahréin. Inaugurada en 1988, la mezquita fue construida por el difunto Emir de Bahréin, Sheikh Isa bin Salman Al Khalifa, y es una de las mezquitas más grandes del mundo, con capacidad para albergar a más de 7,000 fieles. Su impresionante cúpula es una de las más grandes del mundo y está hecha completamente de fibra de vidrio.
Arquitectónicamente, la mezquita es una maravilla, con mármol italiano, cristal austríaco y madera de teca de la India. El interior está adornado con elaborados diseños islámicos y caligrafía árabe, lo que la convierte en un lugar de gran belleza y serenidad. Además de su función como lugar de culto, la Gran Mezquita Al-Fateh alberga una biblioteca y un centro cultural islámico que ofrece a los visitantes información sobre el Islam y la cultura de Bahréin. Las visitas guiadas están disponibles, proporcionando una oportunidad educativa y cultural para los turistas. Los visitantes deben respetar ciertas normas y protocolos al visitar la mezquita, como vestir de manera adecuada y abstenerse de entrar durante las horas de oración.

Árbol de la Vida
En medio del desierto de Bahréin se alza el enigmático Árbol de la Vida, un icono natural que ha desconcertado a científicos y visitantes durante siglos. Este árbol solitario, un Prosopis cineraria de 400 años de edad y 9.75 metros de altura, se encuentra en una zona desértica donde no hay fuentes de agua cercanas, lo que ha generado teorías sobre su supervivencia. Según la leyenda local, el Árbol de la Vida está ubicado en el sitio del Jardín del Edén, lo que añade un misterio adicional a su existencia.
Visitar el Árbol de la Vida es una experiencia fascinante para los viajeros en Bahréin. Además de contemplar este milagro natural, puedes disfrutar de las impresionantes vistas del desierto que lo rodea y reflexionar sobre su significado cultural e histórico en la región.

Manama
Manama, la capital de Bahréin, es una ciudad vibrante que ofrece una mezcla cautivadora de tradición y modernidad. Sumérgete en la historia de Bahréin visitando el Museo Nacional, que alberga objetos y cámaras funerarias que datan de la civilización Dilmun y exhibiciones sobre la rica herencia del país. Explora el zoco de Manama para disfrutar de una experiencia auténtica de compras, donde puedes encontrar productos locales, especias y artesanías.
Para una visión más contemporánea de Manama, dirígete a Bahrain Bay, un futurista desarrollo urbano que alberga rascacielos modernos, centros comerciales de alta gama y una variedad de opciones gastronómicas y de entretenimiento. O ve a disfrutar de un espectáculo de danza tradicional en el moderno Teatro Nacional de Bahréin, el tercer edificio de ópera más grande del mundo árabe, que también merece la pena por su diseño contemporáneo. Y por supuesto, no te pierdas la impresionante Gran Mezquita Al-Fateh, que ya hemos mencionado más arriba.

Circuito Internacional de Bahréin
El Circuito Internacional de Bahréin es mucho más que una pista de carreras; es un destino de clase mundial para los amantes del automovilismo. Construido en 2004, el circuito ha sido sede de varias competiciones destacadas, incluido el Gran Premio de Fórmula 1 de Bahréin. La pista de carreras de 5.4 kilómetros es conocida por su diseño desafiante y su iluminación espectacular que permite emocionantes carreras nocturnas en el desierto.
Además de las carreras de Fórmula 1, el circuito alberga otras competiciones automovilísticas, como la Fórmula E y campeonatos de resistencia como las ‘8 Horas de Bahréin’. Los visitantes tienen la oportunidad única de disfrutar de experiencias especiales, como recorridos por los boxes y la conducción de superdeportivos por el circuito. El Circuito Internacional de Bahréin es una parada imprescindible para los aficionados al automovilismo que visitan el país.

Puente Rey Fahd
El Puente Rey Fahd es una impresionante estructura que conecta Bahréin con Arabia Saudita sobre el Golfo Pérsico. Inaugurado en 1986, este puente de 25 kilómetros de longitud es uno de los puentes más largos del mundo sobre el agua. Bautizado con el nombre del ya difunto Rey Fahd de Arabia Saudita, el puente costó 1200 millones de dólares (aportados íntegramente por los saudíes), es un símbolo de la cooperación entre los dos países y facilita el transporte terrestre entre Bahréin y Arabia Saudita.
Cruzar el Puente Rey Fahd ofrece espectaculares vistas panorámicas del golfo y es una experiencia única para los viajeros que desean explorar ambos países. El puente ha mejorado significativamente la conectividad regional y el comercio entre Bahréin y Arabia Saudita, contribuyendo al desarrollo económico de la región.

Puerto de Sitra
El Puerto de Sitra es un importante centro de comercio marítimo en Bahréin. Estratégicamente ubicado, facilita la importación y exportación de mercancías, contribuyendo al comercio internacional del país. Es un lugar interesante para pasear por los muelles mientras se observa su bulliciosa actividad con los barcos cargando y descargando mercancías diversas. Al atardecer, los famosos dhows, barcos de vela árabes tradicionales, salen a pescar de noche ofreciendo todo un espectáculo a los visitantes que desean ver cómo zarpan hacia el horizonte.
Además de ser una instalación logística crucial, el Puerto de Sitra también ofrece vistas pintorescas del Golfo Pérsico y es un lugar ideal para observar la actividad portuaria en acción.

Arad Fort
El Arad Fort es un símbolo de la herencia histórica de Bahréin y su importancia estratégica en el pasado. Construido en el siglo XV, este fuerte se encuentra en una colina con vistas al mar Arábigo y desempeñó un papel fundamental en la defensa de la isla contra invasiones externas. Aunque no se sabe con certeza quienes lo levantaron, se reconoce el estilo típico de la arquitectura militar islámica de los siglos XV–XVI, y es seguro que antecede a la ocupación portuguesa de Bahréin en el siglo XVI.
Explora las antiguas murallas y torres del fuerte mientras aprendes sobre su larga historia de asedios y resistencias heroicas. Y es que visitar el Arad Fort te transporta a tiempos pasados, cuando Bahréin fue un centro comercial crucial en las rutas marítimas entre Asia y Europa.

Barbar Temple
El Templo Barbar es un sitio arqueológico fascinante que data de la civilización Dilmun, que floreció en Bahréin hace más de 4000 años. Este templo, dedicado al dios Enki, divinidad de la sabiduría y el agua dulce, y su esposa Ninhursag, es uno de los sitios más antiguos de la isla y ofrece una visión única de la cultura y las creencias religiosas de la antigua Bahréin. Explora las ruinas del templo y descubre los restos de los altares y cámaras de sacrificio.
Se recomienda realizar la visita al Templo Barbar en un tour que también incluya el Museo Nacional, que alberga herramientas, armas, cerámica, pequeñas piezas de oro y una cabeza de toro de bronce encontradas en el templo, y alguno de los yacimientos arqueológicos con túmulos funerarios de la antigua civilización Dilmun.

Riffa Fort
El Fuerte Riffa es otro ejemplo impresionante de la arquitectura defensiva en Bahréin. Construido en el siglo XVIII durante el reinado de la dinastía Al Khalifa, este fuerte fue una residencia real y una fortaleza estratégica para proteger la zona de Riffa, en el centro del país.
Explora las estructuras defensivas del fuerte y disfruta de las vistas panorámicas desde sus torres. El fuerte también alberga el Saffron Café, con vistas al pintoresco valle de Al-Haniniya, que ofrece a los visitantes el ambiente perfecto creado por la historia y el entorno del lugar.
Túmulos de A’ali
Los Túmulos de A’ali, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, son uno de los sitios arqueológicos más impresionantes y enigmáticos de Bahréin. Estos túmulos funerarios datan de la civilización Dilmún, que prosperó en la región entre el 3000 y el 2000 a.C. Los túmulos se encuentran en la localidad de A’ali y forman parte de uno de los cementerios más grandes y antiguos del mundo. Se estima que hay más de 170.000 túmulos en Bahréin, con los más grandes y monumentales situados en A’ali. Cada túmulo está construido con piedras y tierra, y algunos alcanzan tamaños considerables, lo que sugiere que fueron utilizados para entierros de personas de alto rango social.

Explorar los Túmulos de A’ali ofrece una visión fascinante de las prácticas funerarias y las creencias espirituales de la antigua civilización Dilmún. Los arqueólogos han descubierto numerosos artefactos en los túmulos, incluyendo cerámica, herramientas y joyas, que indican un nivel significativo de sofisticación y una rica cultura material. Además, algunos túmulos contienen múltiples cámaras funerarias, lo que sugiere que estas estructuras fueron utilizadas durante varias generaciones.