Muchas veces no pensamos que países como Bahrein puedan ser destinos increíbles para los más pequeños, pero este reino del Golfo es una aventura total que puede transformar en una experiencia única un viaje familiar. El desierto, mezquitas gigantes y lujosas, fuertes, parques acuáticos y hasta el circuito de Fórmula 1 más impresionante de la zona pueden ser planes divertidísimos para cualquier niño.
Selección de planes adaptados a niños
La Gran Mezquita de Al Fateh
Manama es una ciudad que impacta a todos los que la pisan por primera vez, independientemente de la edad. Pero para los más pequeños, conocer la Gran Mezquita de Al Fateh puede ser una experiencia muy divertida.
Se trata del centro religioso más grande del país, e incluso del mundo, ya que cuenta con 6.500 metros cuadrados y una capacidad para 7.000 asistentes. Un lugar donde perderse en un ambiente de espiritualidad y silencio que impresiona a cualquiera que se adentre en ella.
El edificio fue terminado en 1987 y en su construcción se utilizaron materiales ricos como mármoles, cristales y detalles en dorado. Uno de sus grandes secretos es que conserva una biblioteca con más de 7.000 ejemplares, posiblemente la más grande que hayan visto nuestros hijos hasta ese momento.
The Lost Paradise of Dilmun Water Park
Una de las mayores aventuras en Bahrein si viajamos en familia es visitar uno de los parques acuáticos y temáticos que tiene el país. El Lost Paradise of Dilmun es el parque acuático más grande de Bahrein.
Ubicado en mitad del desierto, en un oasis de 77.000 metros cuadrados, evoca a Dilmun, el reino antiguo que ocupó esta isla, y crea un escape a la civilización perdida.
Lost Paradise of Dilmun cuenta con más de 20 toboganes y atracciones que se combinan para conseguir un Oasis en el Desierto y un Jardín del Paraíso especialmente diseñados para toda la familia.
Granja de camellos
Hay algunas granjas de este tipo cerca de Manama donde se puede ver a los camellos y pasar un rato con ellos. Aunque puede resultar un poco artificial porque los animales están encerrados en un redil, a los más pequeños les encanta encontrarse con estos increíbles animales, darles de comer y tomarse fotos con ellos.
Además, en algunas de estas excursiones podemos también montarlos y sentir cómo es el movimiento de estos increíbles mamíferos que pueden estar días y días sin probar el agua.

Snorkel en Al Muharraq
Las zonas de playas de Bahrein, como por ejemplo Al Muharraq, están preparadas para que los más pequeños puedan disfrutar del mar y sus secretos. Es fácil poder hacer snorkel con ellos y que puedan ver las especies que acuden a estas zonas a alimentarse y a disfrutar de unas corrientes cálidas.
En este área hay algunos puntos habilitados para hacer buceo y que no suelen ser peligrosos, por lo que puede ser una buena idea para los aficionados más inexpertos que quieran probar en otro tipo de aguas.
El Árbol de la Vida
Una de las mejores experiencias para los más pequeños es visitar el Árbol de la Vida, un ejemplar que lleva casi 500 años sobreviviendo solo, en mitad del desierto y las dunas, y con apenas el agua que absorbe de un riachuelo alejado que recorre parte del subsuelo.
Sólo llegar hasta allí es una aventura que impresiona por el paisaje desértico, pero además, al atardecer, el espectáculo es todavía mayor por los matices de la luz del sol mientras se pone. Hay muchos campamentos alrededor en los que tomar un café mientras esperamos al ocaso.
Tumbas de Dilmun
Bahrein cuenta con una rica historia gracias al famoso reino de Dilmun, que ocupó la isla principal y algunos de los puntos del archipiélago. De hecho, el país cuenta con 21 yacimientos arqueológicos reconocidos como Patrimonio de la Humanidad por su riqueza y, sobre todo, por sus curiosas tumbas con miles de años que forman un cementerio muy particular. Los más pequeños también pueden descubrir algunos de los enterramientos de miembros de la familia real entre los restos.
Fortaleza de Qal’al al-Bahrain
Se sitúa justo en la capital del reino de Dilmun y muchos hablan de que el edificio actual se levanta sobre otro enclave defensivo que contaría con más de 4.000 años de antigüedad. Este fuerte, que es ahora Patrimonio de la Humanidad, preserva uno de los puertos históricos que colocaron a Bahrein dentro de las rutas comerciales entre Europa y Asia desde la época mesopotámica.
Además, cuenta con un museo en su interior que resulta muy esclarecedor de su historia y su importancia sobre todo para los más pequeños.
Circuito de Fórmula 1
Los aficionados a este deporte peregrinan hasta este lugar para ver uno de los circuitos más modernos del mundo y para los que no están tan informados, la instalación impacta por dentro y por fuera.
Se pueden visitar algunas de sus instalaciones, como la zona de las gradas, la tienda y algunas salas como la de prensa. También se puede recorrer por los alrededores y buscar un restaurante donde comer a los pies de este increíble circuito mientras se imagina cómo deben rugir en él los motores de los monoplazas.
Recomendaciones y consejos
Bahrein es uno de los países más seguros de la zona y donde la hospitalidad es una norma que nadie osa romper, por lo que es un lugar donde se puede viajar con niños pequeños sin problema. Además, cuenta con todos los servicios que podamos necesitar y que los turistas más bajitos exigen.
La comida en este reino del Golfo es muy buena y además cuenta con muchos restaurantes de estilo internacional por lo que seguro que las familias encuentran lugares que satisfagan los gustos de todos.
El único problema en Bahrein es el calor, por lo que se recomienda viajar de noviembre a marzo, que son los meses en los que las temperaturas se mantienen más suaves.
Los niños y las niñas pueden ir vestidas como quieran y sólo en el caso de las adolescentes, igual que las mujeres, se les pide cubrir hombros y rodillas y andar con ropa ancha.