La capital eslovena ha conseguido convertir viejos barracones del ejército en una nueva zona llamada el barrio de los museos. Se trata de Metelkova Mestos, las calles donde el regio Museo Nacional de Eslovenia se mezcla a pocos metros con galerías de cultura alternativas, grafitis y cafeterías con un estilo diferente al centro de la ciudad. De entre toda la oferta cultural, no podemos perdernos estos siete lugares.

  1. Museo Nacional de Eslovenia, el más antiguo del país
  2. House of Illusions, la ciencia hecha magia
  3. Museo Etnográfico de Eslovenia, donde la historia sigue viva
  4. Museo de Arte Moderno, un tesoro por dentro y por fuera
  5. Museo de Arte Contemporáneo Metelkova, la vanguardia más alternativa
  6. Museo de la Ciudad y la rueda más antigua del mundo
  7. Galería Nacional y la famosa fuente de Robba

Museo Nacional de Eslovenia, el más antiguo del país

Situado en un increíble edificio renacentista de finales del siglo XIX, entre sus regias escaleras podemos ver algunos de los objetos más antiguos que hablan de la historia de una Eslovenia culta y llena de mitos y leyendas. 

Solo el edificio ya merece la pena, pero además podemos ver en este museo el instrumento musical más antiguo del mundo, una flauta del Neandertal de 60.000 años. Y también la famosa vasija de Vače del siglo V a.C., una de las mejor conservadas, o, ya más espiritual, el talismán Breverl con los rezos mágicos que han marcado parte de la mitología del país. 

House of Illusions, la ciencia hecha magia

Esta atracción de Liubliana es una de las más populares, sobre todo entre las familias, porque es una forma divertida de entender cómo funcionan la ciencia y las ilusiones ópticas. Una de las atracciones más interesantes es la Cámara de Inclinación, en la que puedes ver cómo serías más bajo, más alto, más delgado en función de dónde te coloques. También es muy llamativa la ilusión de la cabeza flotante, gracias al uso de la luz y las sombras, y el túnel de vórtice, que parece girar mientras caminas por él. 

Museo Etnográfico de Eslovenia, donde la historia sigue viva

Situado en un antiguo cuartel, en el complejo de Metelkova, es uno de los museos más interesantes de Liubliana ya que sigue la pista a objetos, palabras o tradiciones que ya se han perdido pero que han marcado el carácter de los eslovenos.

En dos exposiciones permanentes y algunas temporales, esta institución muestra objetos de cómo era la cultura de los primeros pobladores de estas tierras del este de Europa. 

Además, hay que sumar que este museo organiza interesantes talleres donde aprender a tejer, a hacer alfarería y a pintar cerámica siguiendo las tradiciones más arraigadas en Eslovenia. No puedes marcharte de ahí sin conocer su famosa cafetería SEM, también muy popular entre los vecinos de Liubliana.

Museo de Arte Moderno, un tesoro por dentro y por fuera

Esta galería está ubicada en un edificio de los años 30 diseñado por uno de los discípulos del famoso Jože Plečnik, el arquitecto Edvard Ravnikar, que también trabajó con Le Corbusier. 

El museo nació en 1947 y recoge la más importante colección de arte esloveno e internacional del siglo XIX y principios del XX, ya que las obras más contemporáneas se cambiaron a otra galería.

Entre sus colecciones se encuentran además de pinturas también fotografías, esculturas, dibujos y hasta representaciones de arte gráfico que le dan un aire muy actual a este museo.

Museo de Arte Contemporáneo Metelkova, la vanguardia más alternativa

En el año 2011 se abrió el famoso Museo de Arte Contemporáneo Metelkova +MSUM que acoge las obras contemporáneas más importantes de artistas eslovenos e internacionales. Entre los muros de este complejo situado en el famoso barrio alternativo de Metelkova se puede ver la Colección Internacional Arteast 2000+, protagonizada por los autores neovanguardistas de Europa del Este como Marina Abramović o Kazimir Malevič.

También hay obras de artistas destacados como Černigoj, Balka, Pedro Cabrita Reis, Anish Kapoor, Debenjak, Irwin o Stupica.

Museo de la Ciudad y la rueda más antigua del mundo

Lo mejor de este museo no es sólo lo que se ve en sus salas de exposiciones sino lo que van pisando nuestro pies en el camino: los restos de la antigua ciudad romana, Emona, que dio origen a Liubliana. 

Este interesante espacio cuenta la historia de la ciudad ligada al pantano, las leyendas y la antigua cultura palafítica. Pero también es muy interesante por los vestigios con los que cuenta, como la rueda de madera con eje más antigua del mundo, con más de 5.200 años, que fue encontrada precisamente en una laguna próxima a la ciudad.

Galería Nacional y la famosa fuente de Robba

Es uno de los museos más elegantes de Eslovenia tanto por el palacio neorrenacentista en el que se ubica como por las obras de arte que conserva en su interior ya que acoge a los más grandes autores de Eslovenia desde el siglo XIII hasta principios del siglo XX, como Ivan Grohar o Richard Jakopič.

Pero también podemos visitar una parte de la exposición dedicada a la pintura europea, con obras de grandes autores italianos y cuadros que van desde el Renacimiento hasta los más modernistas. 

Uno de los aspectos más curiosos de la Galería es que acoge la fuente de los tres ríos del famoso escultor Francesco Robba, que fue trasladada en 2006 hasta este lugar desde la Plaza Cívica para su conservación. Desde el café de la Galería Nacional, las vistas sobre este importante monumento barroco son impresionantes.