Asturias es un pequeño paraíso con mucho que ofrecer. El encanto de la ciudad de Oviedo, el ambiente único de Gijón, los singulares pueblos de Cudillero o Llanes, y las playas rodeadas por un increíble entorno verde convierten a Asturias en un destino excepcional. Para los amantes de la naturaleza, además, podría ser un auténtico lugar de peregrinaje, ya que aquí se ubican algunos de los paisajes más maravillosos de toda la geografía española. La ruta del Cares, el Parque Natural de Somiedo o la cueva de Tito Bustillo son algunos de los recorridos imprescindibles.
La lista de estas joyas naturales estaría encabezada probablemente por los Lagos de Covadonga, situados en la parte asturiana del Parque Nacional de los Picos de Europa. Vamos a desvelar más a fondo lo que te espera en este singular paraje.
- Una visita los lagos de Covadonga
- Subir a los lagos de Covadonga. Itinerarios y rutas
- Qué ver cerca de los Lagos de Covadonga
Una visita los lagos de Covadonga
Las formaciones principales de este bello entorno son dos lagos glaciares: Enol y Ercina. Cuando se produce el deshielo aparece un tercer lago, el Bricial, que solo tiene agua en esa época del año. Los lagos de Covadonga cada vez son más frecuentados, sobre todo en temporada alta. Esto ha obligado a contar con una serie de infraestructuras adecuadas al turismo.
Al llegar, el primer lago que contemplarás es el lago Enol, el de mayor tamaño. En las profundidades de sus aguas se halla una imagen de la virgen de Covadonga, que se saca cada ocho de septiembre para pasearla en procesión. El reflejo de las montañas en las aguas cristalinas es, sin duda, algo digno de admirar.
Algo más arriba, a unos 1.100 metros de altitud, se sitúa el lago de Ercina, de menores dimensiones. Es habitual que se cree una imagen idílica con los rebaños de animales pastando en los alrededores. Aunque el gran interés de los lagos de Covadonga radica en observar la impresionante panorámica, los posibilidades que ofrece este paraje son muy numerosas y para todos los gustos.
Subir a los lagos de Covadonga. Itinerarios y rutas
Los lagos se ubican en el concejo de Cangas de Onís y hay diversas maneras de acceder a ellos: en coche, a pie o en autobús. Una vez arriba, sería una lástima no aprovechar la oportunidad para visitar el santuario de Covadonga, realizar alguna caminata y conocer el paisaje en todo su esplendor. Existen numerosas sendas para que puedas contemplar la riqueza del lugar, dependiendo del grado de dificultad que estés buscando. Es bastante habitual no llegar mucho más allá del lago Ercina, pero te perderías algunas de las mejores vistas del parque.
Una de las rutas más sencillas, para realizar incluso con niños, es un itinerario circular de unos 6 kilómetros, que se completa en 2 horas. En este camino se pasa por el hayedo Palomberu, las minas de la Buferrera y el mirador del Príncipe, desde el que obtendrás una inmejorable panorámica, que te brinda una maravillosa perspectiva de los lagos de Covadonga. Otro mirador que no te puedes perder, por el que pasarás en muchos de los senderos, es el mirador de Entrelagos. Como su propio nombre indica, hallarás aquí una postal imperdible de los lagos Ercina y Enol.
Si buscas una excursión un poco más intensa, puedes ponerte en marcha y llegar hasta el mirador de Ordiales. Este trayecto de 11 kilómetros se hace en unas 6-7 horas. Se inicia en el refugio del lago Enol, pasando por el pozo del Alemán, la hermosa majada de la vega de la Piedra, el refugio de Vegarredonda y el mirador de Ordiales, el punto final de esta ruta. Se trata de una terraza natural, a casi 1.700 metros de altitud, con unas vistas que cortan la respiración. Aquí se encuentra enterrado Pedro Pidal y Bernaldo de Quirós, el primero que escaló el Naranjo de Bulnes junto al pastor Gregorio Pérez y el principal impulsor del actual Parque Nacional de los Picos de Europa.
Al encontrarnos dentro de este parque, las posibilidades para el senderismo son infinitas. Al igual que para los aficionados al ciclismo, pues no en vano los lagos de Covadonga es uno de los puntos míticos de la Vuelta a España. Se trata de un lugar donde se respira serenidad, tradición, es una puerta a todo un portento de la naturaleza. No te vayas sin hacer una visita al santuario de Covadonga, en mitad del monte Auseva. En la Santa Cueva podrás presentar tus respetos a la patrona de Asturias. Vive la espiritualidad del entorno, respira el aire puro de los lagos y guarda para siempre en tu memoria el reflejo del paisaje en sus aguas.
Qué ver cerca de los Lagos de Covadonga
Visitar los lagos de Covadonga es una experiencia inolvidable y casi mística, pero el entorno natural donde se encuentran tiene también otros increíbles atractivos. Además del Santuario de Covadonga y la Santa Cueva, merece la pena detenerse en la bonita localidad de Cangas de Onís, primera capital del antiguo Reino de Asturias; y de camino a los lagos, hacer sendas paradas en los miradores de los Canónigos y de la Reina. El último mirador, inaugurado en septiembre de 2018, está dedicado a la princesa Leonor. Si tienes tiempo, merecería la pena visitar también las minas de Buferrera y la cueva del Buxu. Te contamos lo que puedes encontrar en estos destinos:
Cangas de Onís
Esta deliciosa localidad asturiana tiene uno de los símbolos más importantes de la comarca: su magnífico puente romano del que cuelga una reproducción de la Cruz de la Victoria. El original se encuentra en la ermita de la Santa Cruz, edificada sobre un dolmen de más de 5.000 años, que también se puede visitar. Frente a la iglesia parroquial, podrás contemplar la estatua de Don Pelayo, obra de Félix Alonso, y muy cerca, el Aula del Reino de Asturias, ubicada en un edificio del siglo XVI. Otros atractivos son la capilla de San Antonio, el Palacio Pintu, la plaza del Mercado o la Casa Dago, que alberga las oficinas del Parque Nacional de los Picos de Europa.
Mirador de los Canónigos
Por la carretera que conduce a los lagos de Covadonga, encontrarás a la izquierda este magnífico e histórico mirador. Tiene este nombre porque fue una de las atalayas desde la que los canónigos de Covadonga contemplaban el Santuario y se daban a la meditación en medio de este verde y hermoso paisaje. Si vas en coche, no te preocupes, porque hay aparcamiento.
Mirador de la Reina
Este mirador también lo encontrarás de camino a los lagos de Covadonga. Si hace buen día, podrás disfrutar de una magnífica vista de los Picos de Europa e incluso adivinar al fondo el mar Cantábrico. El mejor momento del día para visitarlo es a primera hora de la mañana o a última de la tarde.
Mirador de la Princesa
Situado en las inmediaciones del lago Enol y junto al monolito en homenaje al montañero Ramón Lueje, desde este mirador podrás divisar un espectacular panorama del lago y la vega de Enol y de los Picos de Europa. Es el mirador más reciente de la zona, ya que fue inaugurado por la Familia Real en septiembre de 2018, con motivo del centenario del parque nacional.
Minas de Buferrera
En estas minas, inactivas desde 1979, se extraía manualmente, desde finales del siglo XIX, manganeso, mercurio, hierro y cinabrio. Hoy las minas se han rehabilitado para uso turístico y es posible visitar sus galerías subterráneas, las vías y los utensilios utilizados para la extracción del mineral. Descubrirás con tus propios ojos lo duro que tuvo que ser este trabajo para los más de 500 mineros que trabajaron aquí en un tiempo. Están a 22 kilómetros de Cangas de Onís.
Cueva del Buxu
A poco más de 4 kilómetros de Cangas de Onís, en dirección a Panes, se encuentra esta cueva que fue descubierta en 1916 y en la que se pueden contemplar grabados de caballos, cabras, ciervos y bisontes, además de figuras geométricas y zoomórficas. Hay quien piensa que esta cueva sirvió en su tiempo como asentamiento estacional (verano y otoño) para la caza de ciervos, rebecos y cabras.