Como otras muchas, la ruta del Cares no fue trazada para el disfrute de senderistas. La realidad es que nació como una forma de dar servicio a los trabajadores que construyeron y mantienen la central hidroeléctrica de Camarmeña.
Pero el hecho de que la ruta del Cares sea un sendero “artificial” no le resta ni un ápice de belleza ni de espectacularidad. Los caminantes pueden disfrutar, a lo largo de los más de 12 kilómetros de ruta (casi 25 en caso de hacer el camino ida y vuelta), de algunos de los paisajes más espectaculares de los Picos de Europa.
Por eso, la ruta del Cares atrae hasta este rincón de la montaña asturiana a cientos de miles de personas, muchas llegadas de lugares lejanos del planeta. Y por esto también, si se puede, es recomendable realizarla en los meses de menor afluencia de visitantes. Es decir, fuera de la temporada de verano o Semana Santa.
- La ruta del Cares. Recorrido, cómo hacerla y consejos prácticos
- Ruta del Cares desde Caín
- Ruta del Cares desde Poncebos
- La garganta del Cares
Es, sin duda, la manera ideal de disfrutar del apabullante entorno natural en que se encuentra inmersa la ruta del Cares.
La ruta del Cares. Recorrido, cómo hacerla y consejos prácticos
Aunque el sendero de la ruta del Cares sea único, hay varias opciones para realizarlo. La mayor parte de los caminantes comienzan en Poncebos, en la comarca de Cabrales, para llegar hasta Caín (León), o bien al revés.
Para ello, es necesario concertar un transporte que permita regresar al punto de partida. Por ejemplo, grupos de amigos y familiares se dividen para empezar en uno y otro punto y se intercambian las llaves del coche al encontrarse a mitad de recorrido.
También es posible reservar taxis o coches privados. O, por supuesto, contratar los servicios de alguna empresa especializada en actividades al aire libre que, no solo proporcione el transporte, sino también guías de alta montaña y naturaleza.
Esta última opción es, sin duda, la más cómoda y también la más interesante desde el punto de vista educativo, sobre todo si se quiere realizar la ruta del Cares con niños.
Los caminantes más animosos y preparados físicamente pueden realizar la ruta ida y vuelta en el mismo día. Aunque, si se decide realizar los 25 kilómetros, es aconsejable pernoctar en alguno de los dos extremos de la ruta y, al día siguiente, hacer el camino de vuelta.
Respecto a la ruta del Cares como tal, conviene tener en cuenta que, pese a su indudable popularidad, no es un sendero exento de riesgos. Durante buena parte de los kilómetros de ruta el camino es estrecho y uno de los lados está enmarcado por una caída en vertical (la del río) de muchos metros de altura.
Por eso, es recomendable circular en fila de a uno y siempre atentos al camino. También conviene estar alerta ante los no tan raros derrumbes de las rocas situadas sobre la senda.
Recomendaciones para realizar la Ruta del Cares
- Aunque el recorrido resulte relativamente sencillo y prácticamente llano, conviene tener una cierta preparación física.
- No es recomendable realizar la ruta del Cares si hay avisos de tormenta o cualquier otro tipo de circunstancias meteorológicas desfavorables.
- El recorrido se abre paso por el interior del Parque Nacional de los Picos de Europa, lugar de especial protección medioambiental. Por eso es importante ser muy respetuoso con la naturaleza (plantas, animales, agua y formaciones geológicas), evitando al máximo su posible deterioro.
- Muy importante: la ruta del Cares tiene sus riesgos (posibles caídas, derrumbes de rocas, grandes desniveles…), así que los niños deben caminar acompañados por adultos en todo momento.
- Es importante tener preparada ropa cómoda para realizar el recorrido y estar atentos de la previsión metereológica, dado que gran parte del año podemos encontrarnos con lluvias en la zona, para preparar calzado adecuado y ropa impermeable.
- Llevar agua y alimentos es también fundamental dada la duración de la travesía.
Ruta del Cares desde Caín
La ruta del Cares comienza, desde el lado leonés, en el pequeño pueblo de Caín. Enmarcada por las altas montañas de los Picos de Europa, es una de las más escenográficas del país, sin duda.
Para dar respuesta al creciente turismo de senderismo en Asturias, Caín ofrece numerosos bares, restaurantes y tiendas en los que proveerse de todo lo necesario para el avituallamiento durante el recorrido por la ruta del Cares.
Desde este punto la ruta es un cómodo sendero que, a lo largo de varios kilómetros, transcurre por un suave descenso. Así, hasta llegar a la zona de Los Collaos (kilómetro 9,5), cuando el camino se inclina hacia arriba, hasta llegar a los 500 metros de altitud.
A partir de ahí, la ruta desciende de forma más pronunciada, hasta llegar a los aproximadamente 200 metros de altitud que tiene el pueblo de Poncebos, ya en Asturias.
Ruta del Cares desde Poncebos
Un buen consejo para los que se animen a realizar la ruta del Cares desde Poncebos es que, en caso de ir con vehículo propio, lo dejen en cualquiera de los dos aparcamientos situados antes de llegar al pueblo. Esto, sobre todo en verano y Semana Santa, pues la zona de aparcamiento del propio pueblo se satura con facilidad.
Desde Poncebos la ruta de Cares es algo más exigente que cuando se realiza desde el lado leonés. La razón es que en los primeros tres kilómetros se salva un desnivel de cerca de 300 metros, hacia Los Collaos.
A partir de ahí, el camino sigue ascendiendo, pero con desniveles mucho menos pronunciados, hasta llegar a Caín. Siempre con la referencia del río Cares, que queda a un lado del camino.
La garganta del Cares
La mayor parte del recorrido de la ruta del Cares discurre en paralelo a la garganta del río que le da nombre: el Cares. De forma bastante significativa, muchos la llaman la garganta Divina, pues es evidente la belleza (casi mágica) de este lugar.
El camino, entre impresionantes murallones de roca que alcanzan los 2.000 metros de altura, se realizó a mediados de los años 40 del siglo XX. Antes, la única forma de dar servicio a los trabajadores de la presa de Camarmeña era un estrecho sendero bastante peligroso.
Para la construcción de la actual ruta del Cares se practicaron varios túneles en la propia roca, abiertos en el lado del río, lo que les aporta una gran espectacularidad. También tres puentes (de los Rebecos, del Bolín y el de la propia presa de Camarmeña), que suponen los mejores puntos panorámicos de la ruta.