La ciudad de Barcelona, abierta y mediterránea, es uno de los destinos españoles más cosmopolitas y abiertos a las nuevas tendencias. Si dedicas dos días completos a recorrer la ciudad podrás visitar sus barrios históricos, como el de Gracia y el Gótico, y conocer alguno de sus museos. Entre las actividades más recomendables se encuentra realizar un itinerario por el modernismo catalán. Se deben incluir exponentes tan destacados como la Sagrada Familia, la Pedrera, la casa Batlló y el Park Güell. La ciudad condal también ha estado siempre a la cabeza de las tendencias gastronómicas, aunque nunca hayan olvidado la tradición. Al caminar entre los puestos del Mercado de la Boquería notarás que, a pesar de ser un espacio gourmet, no ha dejado de lado la tradición y sigue recibiendo a los vecinos a diario.
Por supuesto, Barcelona también es una gran elección para ir de compras, tanto por la calidad de las marcas que se dan cita allí como por sus diseñadores locales.
Sin duda, dos días en Barcelona saben a poco, pero son un estupendo comienzo.
137 años después de se pusiera la primera piedra, el proyecto al que Gaudí dedicó la mitad de su vida está a punto de concluirse.
El parque, enteramente diseñado por el artista, es un referente del modernismo catalán donde naturaleza y arquitectura se funden en un universo onírico.
La Boquería, que nació como el mercado popular del Centro de Barcelona, se ha convertido en uno de los grandes referentes de la gastronomía mundial.
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