Son muchas las excursiones que se pueden emprender desde Bilbao pero una que no se debe rechazar es la que lleva hasta el cabo Ogoño, donde también está integrado el monte homónimo, y que es un buen lugar para practicar senderismo y escalada. Prepara tu mochila porque dejaremos atrás la efervescente vida cultura de la capital vizcaína para introducirnos en rincones llenos de naturaleza, pueblos bonitos y magia. ¿Estás preparado?
- El cabo Ogoño, más que un accidente geográfico
- Ruta al monte Ogoño, entre bosques y acantilados
- Qué puedes ver en tu visita a Ogoño
- Consejos para tu visita a Ogoño
El cabo Ogoño, más que un accidente geográfico
El macizo que forma el cabo de Ogoño, con un bello pueblo, una espectacular playa a sus pies, dos cimas y acantilados que escalar, es imposible que pase desapercibido. Pero si te decimos que, además, forma parte de la Reserva de la Biosfera de Urdaibai seguro que se coloca entre tu lista de excursiones prioritarias cuando viajes a Bilbao. El espacio natural de Urdaibai, protegido por la Unesco desde 1984, ofrece una increíble variedad de paisajes y ecosistemas. Tan pronto puedes estar recorriendo sus 600 hectáreas de marismas, como decenas de playas, islas, bosques de encinas, rasas intermareales o un litoral con grandes hitos como San Juan de Gaztelugatxe, o los cabos de Matxitxako y Ogoño. Los acantilados verticales de Ogoño y la playa de Laga son, de hecho, una de las estampas habituales de promoción turística vasca.
Ruta al monte Ogoño, entre bosques y acantilados
Para visitar el cabo Ogoño hay que poner rumbo a Elantxobe (Elanchove), un pueblo que está a unos 47 kilómetros de Bilbao y que bien merece una excursión. Ese puede ser el punto de partida de la ruta por el cabo Ogoño. El plan es salir desde la población mencionada, donde dejaremos el coche, y caminar hasta la primera elevación, Talaia (276 metros), y luego seguir hasta el monte Ogoño (305 metros). Si haces la ruta circular serán algo más de 5 kilómetros.
¿Comenzamos la ruta de Ogoistas los aficionados a este deporte.ño? Si has aparcado en la entrada de Elantxobe o en el muelle te tocará subir primero las empinadas calles del pueblo antes de comenzar este itinerario. Luego bastará seguir un camino asfaltado señalado con la PR BI-65, y no dejar las indicaciones con líneas blancas y rojas. Aunque al comienzo se atraviesa un bosque de encinas que no deja ver mucho, pronto surgen las primeras panorámicas con el Cantábrico de fondo. La primera sorpresa es la imagen que te espera cuando llegues al mirador de Talaia. Desde ese punto se puede admirar la playa de Laga, la isla de Izaro, Mundaka, Bermeo, etc. De hecho, desde ahí se vigilaba antaño la presencia de ballenas en el golfo de Vizcaya. Recuerda el interés que existía por pescar estos grandes cetáceos.
Puedes descansar un momento en el mirador antes de continuar con el segundo tramo que te queda. Tendrás que volver un poco sobre tus pasos antes de seguir las líneas blancas y amarillas que te conducirán hasta la cima del monte Ogoño, también llamado Atxarkulu. Para llegar desde el pueblo hasta este punto se suelen emplear unas dos horas, aunque en función de tu ritmo de caminata podría ser más o menos. Calcula si te interesa llevar un pícnic o esperar para comer una vez que regreses a la localidad.
La escalada en los acantilados del cabo Ogoño es otro de los atractivos de esta excursión. Desde 1977 hay vías de escalada para los aficionados a este deporte. Actualmente se cuenta, a lo largo de 200 metros, con más de treinta rutas de distintas longitudes y niveles de dificultad. Los muy expertos suelen retar su habilidad técnica en la vía Heriotzaren Semea, calificada como una 7b+. Como ha habido varios percances y rescates, es mejor no arriesgarse e ir acompañados en la actividad.
Ruta a Lagaburu
Esta es una de esas rutas que tanto nos gustan a los urbanitas, corta y con un banco al final de la misma. Aunque es una afirmación jocosa y un poco exagerada, sí que cumple estas máximas, es un itinerario corto (unos 4 km ida y vuelta), agradable, y al final del mismo te puedes sentar en un banco para admirar el paisaje marino. Sin duda, es un enclave mágico para meditar o descansar un rato. Si vas en coche, puedes dejar el vehículo en el aparcamiento situado junto al cementerio de Elantxobe y comenzar a caminar desde ahí mismo. En primer lugar, debes tomar el camino que sale a la izquierda del camposanto. Continúa por la senda asfaltada hasta llegar a un cruce de caminos, sigue recto por el camino de tierra hasta llegar al final de un acantilado. Ese es el punto donde sentarse y gozar del silencio rodeado de naturaleza.
Qué puedes ver en tu visita a Ogoño
La excursión al macizo que forma el cabo Ogoño consta de tres visitas fundamentales. La primera de ellas es la ruta senderista, que ya os hemos relatado y que depara unas vistas impresionantes de todo el entorno. Otro de los puntos fuertes de la excursión a Ogoño es la playa de Laga, que yace a los pies de los acantilados y es uno de los arenales más atractivos de la costa vizcaína. En sus 574 metros de arena dorada y fina son muchos los bañistas que disfrutan de sus aguas frías, de las vistas de los acantilados y, también, de sus famosas olas que son cortas pero intensas, con picos de derechas y de izquierdas. Es, sin duda, uno de los lugares favoritos de los surfistas, que incluso cuentan allí con un club y una escuela.
La tercera visita recomendada es al pueblo de Elantxobe, un caserío cuyas estrechas calles y escalinatas se adaptan a la ladera empinada del macizo de Ogoño. Las vistas de la costa son increíbles desde cualquier punto del mismo. Una curiosidad es que, debido a la estrechez de sus calles, han debido colocar una plataforma giratoria en la calzada para que el autobús pueda dar la vuelta y regresar por el mismo camino.
Paddle surf en la Reserva de Urdaibai
Como te hemos señalado anteriormente, el cabo Ogoño forma parte de la Reserva de la Biosfera de Urdaibai, y dicho espacio natural se caracteriza por la multitud de ecosistemas que alberga. En Urdaibai podrás pasear por marismas, bosques, montañas, zonas fluviales y costeras. Una de las actividades que se pueden hacer en las dos últimas zonas es el paddle surf. ¿Lo has probado alguna vez? Consiste en subir a una tabla de una dimensión mayor que la de surf, mantener el equilibrio sobre la misma de pie o de rodillas e impulsarte con un remo. Requiere menos habilidad que el surf y está indicado para todas las edades. Existen varios recorridos posibles (uno de ellos va por la playa de Laida y el estuario de Mundaka) tanto en la ría de Urdabai como en su desembocadura. Lo idóneo es contactar con alguna empresa de la zona para unirse a un grupo ya organizado o solicitar una excursión a medida.
Consejos para tu visita a Ogoño
La ruta senderistas por Ogoño es adecuada para todo tipo de público, aunque si viajas con niños es mejor que tengan al menos 6 años. Durante el camino se debe tener mucha precaución con ellos para que no se acerquen a los acantilados. Para la caminata es conveniente llevar un calzado que no se deslice, ya que hay zonas rocosas y si llueve es bastante resbaladiza.
Si no se conoce bien el terreno es aconsejable no salirse de los senderos marcados con las indicaciones de gran o pequeño recorrido. Y, por supuesto, llevar agua suficiente para el camino y algún snack nunca están de más.