¡Qué mejor incentivo para los más pequeños que disfrutar de las maravillas que ofrece la naturaleza! Fuerteventura, isla de vientos, playas de ensueño y paisajes volcánicos, sorprende a los niños con sus singularidades. Realizar excursiones a pie o en barco por las distintas rutas que ofrece la isla es un plan perfecto para toda la familia.
La isla majorera cuenta con atracciones diversas para conocer su fauna, parques acuáticos para divertirse y una amplia gama de cursos para iniciarse en algún deporte con las olas como protagonistas. Encontrarás actividades para todas las edades, ya que Fuerteventura es un espacio abierto en el que todo llama la atención e invita al descubrimiento. Recorrerla ya es una aventura. Si se buscan actividades estimulantes, las hay para todos los gustos, empezando por el típico viaje en camello o la visita en barco, cual piratas, al islote de Lobos y otros entornos.
Qué ver y hacer en Fuerteventura con niños
No hay plan más entretenido para los niños que un día de playa. Nada puede hacerles más felices que sentirse libres, correr alegremente por la orilla y jugar con las olas. En Fuerteventura hay muchas playas en las que los padres pueden estar relajados mientras sus hijos disfrutan a sus anchas. Entre ellas, la playa de la Concha y otras calas cercanas. Sus aguas transparentes y calmadas, en el entorno del pueblo marinero de El Cotillo, son una magnífica elección para ir con niños. En la localidad de Caleta de Fuste, no defrauda su tranquila playa, abrigada por una bahía en forma de herradura. Y muy cerca, la playa de La Guirra, que cuenta con el aliciente de un parque infantil.
En Morro Jable, un destacado centro turístico, se encuentra la playa del Risco del Paso, donde el vaivén de las mareas forma piscinas naturales que hacen las delicias de los pequeños. Otra opción es la playa de Gran Tarajal, muy frecuentada por las familias majoreras. Se encuentra en la localidad del mismo nombre, en el municipio de Tuineje, y cuenta con una gran variedad de servicios.
Las Dunas de Corralejo y la isla de Lobos, excursiones en familia
Hay lugares que resultan inolvidables para los más jóvenes de la familia. Uno de ellos es Corralejo, donde se encuentran unas impresionantes dunas. En esta sucesión de ondulaciones de arena blanca, los más pequeños pueden deslizarse como si se tratase de un tobogán natural. Imposible que no se diviertan en ese entorno espectacular.
Para completar el plan en esta zona de Fuerteventura, resulta muy recomendable dirigirse al muelle de Corralejo y subir a un ferry rumbo a la isla de Lobos. Un paseo en barco hará que los niños se sientan piratas en busca de la isla del tesoro. El islote de Lobos, un entorno protegido con mucha riqueza ecológica, se puede recorrer enteramente a pie. El trayecto lleva poco más de una hora, y resulta altamente inspirador. Una vez finalizado, disfruta de un plato de pescado fresco en el restaurante Isla de Lobos, el único del lugar. Conviene reservar con antelación.
Visita al Oasis Wildlife Fuerteventura
Subir a un dromedario –aunque se les llame camellos, no lo son– es una de las experiencias habituales en Fuerteventura. Nunca falla cuando se viaja con niños. En el Oasis Wildlife Fuerteventura (antiguo Oasis Park) encontrarás un plan completo que empieza con un paseo por los sorprendentes paisajes majoreros montado en este animal. Esta actividad permite conocer las costumbres de estos animales y descubrir las propiedades de la leche de camella, muy beneficiosa para el control del nivel de azúcar en la sangre.
El Oasis Wildlife Fuerteventura es un gran parque temático que incluye zoológico, jardín botánico y centro de jardinería. Más de 3.000 animales, de 250 especies diferentes, y una grandísima cantidad de plantas, aguardan a los visitantes. En este impresionante espacio, ubicado en el sur de Fuerteventura, en La Lajita (municipio de Pájara), los más pequeños pueden disfrutar de divertidos espectáculos de papagayos, alimentar a los graciosos lémures, nadar con los leones marinos y acercarse a reptiles y aves rapaces.
Los niños que muestren interés por las plantas pueden apuntarse a una visita guiada por el Jardín Botánico. En los meses de julio y agosto, además, se realizan campamentos de verano de una semana. Una manera única de gozar del contacto con la naturaleza dentro del zoológico.
Acua Water Park, ideal para unas vacaciones con niños en Fuerteventura
Fuerteventura cuenta en Corralejo con un parque acuático excepcional: el Acua Water Park. Un espacio de disfrute para toda la familia, pero especialmente para los niños. Toboganes de vértigo, jacuzzis, ríos rápidos y piscinas con olas convierten la visita en una experiencia muy estimulante. Hay atracciones para todas las edades.
Los más pequeños cuentan con la zona infantil Laguna Splash, con chorros de agua y piscina infantil con toboganes de menor altura. Por último, el Kid’s Club, donde pueden participar de entretenidos juegos mientras sus padres se relajan.
Más cosas que visitar en Fuerteventura con niños: el Oceanarium Explorer
Entre los muchos planes interesantes que se pueden hacer en Fuerteventura con niños está una visita al Oceanarium Explorer, en el muelle deportivo de Caleta de Fuste. En sus instalaciones se pueden conocer las especies marinas que habitan en las aguas de Fuerteventura, nadar con leones marinos, disfrutar de una travesía en catamarán y practicar la pesca, entre otras muchas actividades.
Emocionante travesía pirata por la costa de Jandía
Otra actividad llena de emociones consiste en embarcarse en la goleta Pedra Sartaña, donde toda la familia podrá vivir una aventura de piratas en el entorno de la espectacular costa de Jandía. Este es uno de los últimos veleros que transportaba mercancías en el norte de la península. Actualmente se ha transformado en una embarcación donde los jóvenes grumetes pueden aprender a hacer nudos marineros y distintas maniobras con el barco, incluyendo el izado de las velas. También se realizan juegos y se puede practicar el buceo y la pesca. La excursión dura unas cinco horas y, si hay suerte, se puede llegar a ver delfines, ballenas e incluso tiburones y peces voladores.
