El Parque de la Devesa, en Girona, con cerca de 40 hectáreas de superficie, es uno de los más grandes de Cataluña. Está ubicado al oeste del casco histórico de Girona y delimita al norte por el río Ter, al oeste por el río Güell y, al este, por el Onyar y el barrio Güell-Devesa sur.
Cuenta con algunos de los árboles más altos de Cataluña (hasta más de 50 metros) y destaca por albergar más de 2.000 plataneros centenarios. Se erige como el principal pulmón verde de la ciudad y el lugar al que llegan muchos ciudadanos y turistas para pasear, hacer deporte o para disfrutar de un pic-nic en días soleados, entre otras actividades.
Historia
Es a principios del siglo XVI cuando Fernando el Católico transfirió definitivamente los terrenos que pertenecían a la corona -años antes lo hicieron los monarcas Alfonso IV “El magnánimo” y, antes, la reina Maria Victoria-. El objetivo de estas donaciones fue para que la urbe pudiese “defenderse” de las crecidas de los ríos Ter, Onyar y Güell ya que en el terreno que hoy es parque y que en su momento estaba formado por sedimentos transportados por las aguas fluviales, crecía una vegetación que servía de barrera contra las riadas.
Durante años, la principal actividad económica en la dehesa era la plantación de árboles como chopos y álamos para su posterior tala y venta de madera o para defensa militar. También hubo huertos y pastoreo. Es a partir de mediados del XIX cuando los terrenos se empezaron a utilizar como espacio de paseo y se plantaron los primeros plataneros.
Ya en el siglo XX el parque alcanza su máximo uso social para pasear, albergar competiciones deportivas -en 1934, una piscina fue la primera construcción deportiva-, desfiles militares, etcétera.
En el XXI el Parque de la Devesa se ha integrado totalmente en la ciudad, hay un mayor cuidado de los árboles y se ha desarrollado un amplio abanico de actividades: entre otras, las de las Ferias y Fiestas de San Narcis (patrón de la ciudad catalana), la Fira de Girona que se desarrolla en el Palacio de Firas -situado en pleno parque- o el mercado ambulante que se celebra todos los martes y sábados.
El parque
Los árboles del Parque de la Devesa son híbridos entre especies americanas y orientales y muchos de ellos fueron plantados a mediados del siglo XIX. Al tener poca distancia entre uno y otro ha provocado que alcancen entre 50 y 60 metros de altura. Destacan los plataneros, que se distribuyen en forma de largas hileras por todo el parque formando una especie de avenidas o paseos naturales y configurando un paisaje muy colorido.
El paseo central se llama Passeig de la Sardana y un itinerario típico para conocer el parque es el que comienza en la entrada, que data de 1898 y que conserva dos casetas gemelas, y que discurre por una fuente y una jaula con pavos reales.
Es frecuente ver diferentes especies de patos, sobre todo en la balsa de los jardines de la Devesa, que se creó al estilo francés del siglo XIX y que estaba destinado para la gente más pudiente de la época.
Además del Palacio de Firas, el Parque de la Devesa alberga también campos de tiro y aeromodelismo, las instalaciones de la Sociedad Hípica de Girona, el Auditorio-Palacio de Congresos, así como el campo municipal de fútbol Fèlix Farró.
Actividades
Tiro, aeromodelismo, fútbol, hípica…, son algunos de los deportes que se pueden practicar en las instalaciones que se ubican dentro del Parque de la Devesa de Girona.
En cuanto a actividades culturales, la principal es la Fira de Girona, que acoge el Palacio de Firas, pero también la programación que presenta el Auditorio-Palacio de Congresos.
Los martes y los sábados son los días en los que es posible recorrer el mercadillo ambulante para comprar todo tipo de artículos y, en el mes de octubre, se instalan las atracciones de las Ferias y Fiestas de San Narcis que se celebran entre finales del mes de octubre y principios de noviembre.