La Reserva Natural Especial de los Tilos de Moya es un lugar mágico situado dentro del Parque Rural de Doramas, en el municipio de Moya. Sean cuales sean los gustos al viajar, incluso si uno se considera profundamente urbanitas, es una visita que se deber realizar porque no es un bosque cualquiera. Si buscas un plan para cambiar la playa durante medio día, los Tilos de Moya son una muy buena opción para recorrerlo disfrutando de la naturaleza Canaria.
A continuación te daremos las claves y explicaciones pertinentes para poder disfrutar de Los Tilos de Moya pero, haznos caso, reserva una mañana para disfrutar de este precioso entorno sin prisas.
- Los Tilos de Moya, una reserva única en Canarias
- Cómo visitar la Reserva Natural de los Tilos de Moya
- Qué tienes que ver en Los Tilos de Moya
- Qué ver en el pueblo de Moya
- Dónde comer cerca de Los Tilos
- Dónde se encuentra y cómo llegar a los Tilos de Moya
- Zona recreativa de Santa Cristina
- Dónde dormir en Gran Canaria
Los Tilos de Moya, una reserva única en Canarias
Con el nombre de Los Tilos de Moya se conoce una reserva natural que tiene una superficie de 91,5 hectáreas. Para situarla os diremos que ocupa unos dos kilómetros del barranco del Laurel, que es un cauce al que miran unas laderas empinadas que alcanzan en algunos lugares los 800 metros de altitud.
Es muy característico de este lugar el mar de nubes, que al tropezar con la vegetación de las laderas se convierte en una curiosa lluvia horizontal que permite que todo el entorno se mantenga verde y bien hidratado. Si bien, poco queda del antiguo arroyo (ahora entubado) que corría por el barranco.
Cómo visitar la Reserva Natural de los Tilos de Moya
La mejor manera de conocer y sentir este bonito bosque de los Tilos de Moya es poniéndose una botas de montaña y lanzándose a conocerlo. En primer lugar, lo más recomendable es visitar el Centro de Interpretación donde conocer la historia del bosque y también los distintos usos que se daba a este espacio. A continuación, pide un plano y lánzate a realizar el Camino de la Laurisilva, un sendero circular de 1.800 metros que lleva a disfrutar tanto de zonas naturales como de restos de construcciones que nos hablan del pasado y de las actividades que se realizaban en esta reserva protegida. En la caminata, que permite apreciar la biodiversidad de este rincón de Gran Canaria, hay tres merenderos por lo que te puedes parar a disfrutar de la naturaleza.
Qué tienes que ver en Los Tilos de Moya
La ruta principal de los Tilos de Moya es el mencionado Camino de la Laurisilva. Es un paseo de poca dificultad, que incluso se puede hacer en familia. En dicho itinerario, que no llega a 2 kilómetros, saldrán a tu encuentro acequias, con las que se llevaba el agua desde los pozos y los estanques hasta las tierras de cultivo. La principal de Los Tilos se realizó con mampostería y atraviesa la reserva de sur a norte, también hay otras más pequeñas.
También aparecerán en el sendero unas construcciones rectangulares y con peldaños, estas son cantoneras. Con este nombre se conocen los depósitos donde se guardaba el agua que llegaba de los pozos cercanos antes de distribuirlos a los agricultores. Cuando el caudal de agua era muy grande se usaba otra edificación, el quebradero, para aliviar la acequia y que no se rompiera.
Sin embargo, la vida natural es la que más llamará tu atención. En los Tilos de Moya se encuentra el mayor reducto de laurisilva de Gran Canaria, que según se cree formaba parte de la Selva de Doramas, que hace cinco siglos ocupaba la cara norte de la isla.
Para apreciar este tipo de vegetación, basta seguir el Camino de la Laurisilva, un sendero bien señalizado, con barandales en muchos lugares, y algún que otro desnivel (no olvidemos que es un barranco) aparecerán especies tan exuberantes como la que le da nombre a la reserva: el til o tilo (Ocotea foetens) surge a ambos lados del cauce del barranco. Son plantas con un diámetro de entre 30 y 50 centímetros, que pueden llegar a medir hasta 20 metros de altura. También muy frecuentes son el laurel (Laurus novocanariensis), el paloblanco, el brezo, el follao, la faya y el acebiño.
No olvides llevar prismáticos para observar algunas de las aves que habitan en Los Tilos de Moya, entre ellas el pinzón vulgar, el mosquitero, el canario, el petirrojo, el mirlo o la alpispa.
Una vez que termines la ruta, puedes ir a comer muy cerca o bien dar una vuelta por el pueblo de Moya, a 2,6 kilómetros por la GC700. En esta localidad es recomendable visitar la iglesia de la Candelaria, la Casa Museo Tomás Morales, y llevarse unos bizcochos caseros de Casa Juana.
Qué ver en el pueblo de Moya
La población de Moya es muy pequeñita pero sorprende por su patrimonio natural y cultural. En el entorno urbano destacan la iglesia de Nuestra Señora de la Candelaria, de 1957, donde llaman la atención sus dos torres adosadas y el enorme rosetón de la fachada principal. También de interés es la Casa-Museo del poeta Tomás Morales, que nació en esta vivienda en 1884. En esta casa se puede admirar la colección pictórica y documental del literato. Tampoco pasa desapercibida la construcción en piedra basáltica de la Heredad de Aguas, con sus dos plantas y su fachada de corte simétrico. Antes de marcharte pasa también por la ermita de Fontanales edificada en 1872 en honor a San Bartolomé (aunque ya no acoge la imagen del patrón). Otra de las visitas fundamentales es a los yacimientos arqueológicos de Cueva de Doramas o de la Montañeta.
Si te gusta la artesanía, el pueblo de Moya es ideal para llevarte algún recuerdo, ya que aquí se elabora cestería de caña y pírgano, instrumentos de cuerda como el tiemple, jabones y perfumes naturales, además de muchos otros objetos elaborados con hierro, piel y madera. En el mercadillo de los domingos se puede comprar artesanía y repostería local, como los bizcochos ilustrados y los suspiros.
Dónde comer cerca de Los Tilos
Si tras la caminata se te abre el apetito, no habrá que ir muy lejos para encontrar algunos restaurantes donde sirven comida tradicional y casera. Por su nombre y cercanía (300 metros), uno de los establecimientos que más triunfa es el Restaurante-Grill Los Tilos (Camino los Tiles 7, Moya), donde además de platos de gofio, papas arrugás con mojo y otras exquisiteces canarias, también ofrecen sabores mediterráneos y asiáticos. Será difícil no encontrar algo de tu agrado en la carta. Además, tiene una terraza muy agradable.
Igual de recomendable –y con una cocina tradicional apetitosa– es el Restaurante Grill Casa Pedro (Practicante M. González, 96. Moya). Sus asados son deliciosos y tiene una buena relación calidad/precio. Otra opción es La Trastienda Quesos y Vinos (Paseo Doramas, 25. Moya), una tasca regentada por un simpático matrimonio que prepara ricos entrantes ibéricos (un queso espectacular) y platos contundentes que hacen las delicias del comensal (carne de cochino en su jugo, judiones, etc.). Si prefieres algo rápido para seguir camino, puedes optar por las hamburguesas (prueba la de cochino negro) y bocatas de La Droguería (Miguel Hernández, 10. Moya).
Dónde se encuentra y cómo llegar a los Tilos de Moya
La Reserva Natural Especial de los Tilos de Moya se encuentra situada en el norte de Gran Canaria. Si se va en coche desde la capital, Las Palmas de Gran Canaria, la distancia es de unos 33 km (una media hora de trayecto). Habría que seguir la carretera GC-75 en dirección Moya, por el camino saldrá la indicación de Los Tilos. El vehículo se puede dejar cerca del Centro de Interpretación para hacer la ruta.
Otra opción para llegar a Moya, la población más cercana, desde la capital de Gran Canaria es emplear el transporte público. Para ello se deberán tomar tres líneas: 11, 103 y 124, y se tarda en torno a una hora y media de camino.
Zona recreativa de Santa Cristina
La zona recreativa de Santa Cristina se encuentra situada en la Reserva Natural Especial del Brezal. Es un área muy demandado por grupos escolares y familias durante todo el año, pero para poder utilizar sus instalaciones es necesario solicitar un permiso al Cabildo. Desde este espacio de recreo se pueden seguir algunos senderos que comunican con el camino entre Santa María de Guía y Moya, los dos pueblos más cercanos, además de los circuitos del barranco de los Tilos.
En general se trata de un lugar muy agradable con vigilancia, aparcamiento, mesas, barbacoas, baños y cafetería. Habitualmente está disponible todos los días excepto los lunes. Tiene un horario de 9 a 17 horas, aunque los festivos de invierno abre de 8 a 19 horas, y en los de verano de 8 a 20 horas. Se debe tener en cuenta que tiene una capacidad máxima de 400 personas.
Dónde dormir en Gran Canaria
Una buena opción de alojamiento en Gran Canaria es el hotel Occidental Las Palmas, un cuatro estrellas de carácter urbano situado junto al céntrico parque Doramas, en Las Palmas de Gran Canaria. Es un establecimiento de impronta vanguardista con 70 habitaciones, que satisface a todo tipo de viajeros. Si te alojas allí no te pierdas su Stage Roof Top, una gran terraza con vistas de 360 grados, donde se puede tomar el sol o relajarse. Es un hotel muy cómodo, ya que por su ubicación el huésped tiene a mano varias calles comerciales, o las playas de Las Alcaravaneras y Las Canteras a unos 5 o 10 minutos a pie.