Situado en el corazón de los Pirineos de Huesca, Benasque es un municipio de alta montaña de apenas 2.000 habitantes y también es el centro neurálgico del valle al que da nombre, donde se encuentra el Parque Natural de Posets-Maladeta y el pico Aneto. Un destino muy atractivo en tu escapada turística por Huesca y provincia porque se halla en un enclave natural de especial belleza.

Benasque, una larga historia

Benasque está a 143 kilómetros de Huesca y, dentro de su término municipal, están los bellos pueblos de Cerler, famoso por sus pistas de esquí, y Anciles. Su historia es larga y, aunque se sabe que fue fundado por los romanos porque ellos construyeron los primeros baños de agua sulfurosa (baños de Benasque), la referencia documental más antigua data del año 1006: el Rótulo de Benasque.

Desde el siglo XI, Benasque perteneció al condado de Ribagorza, que formaba parte a su vez del Reino de Aragón. Algunos de los sucesos más sobresalientes de Benasque han sido un fuerte terremoto acaecido en 1660 y un incendio que, durante la Guerra Civil, destruyó parte de la villa y provocó la muerte de muchos vecinos.

 

 

En la actualidad, el turismo en Benasque se ha convertido en la principal actividad económica, debido sobre todo a la cercanía de la estación de esquí de Cerler. Y, por tanto, hay muchas actividades en Benasque para disfrutar.

Qué hacer en Benasque

Son muchos los atractivos turísticos del pueblo de Benasque y de su valle, también llamado “Valle escondido”.  Hay muchas cosas que hacer en Benasque, y también que ver. Se pueden hacer rutas por Benasque de senderismo, dar paseos en bicicleta, practicar la pesca, disfrutar de una deliciosa gastronomía… También puedes admirar su grandes edificios monumentales y recorrer los alrededores. Te guiamos con lo esencial si decides ir a Benasque. No te arrepentirás.

Un paseo por las calles de Benasque
Un paseo por las calles de Benasque

Palacio de los Condes de Ribagorza

Situado en la calle Mayor de Benasque, es un edificio renacentista de piedra con elegantes ventanales. En su fachada destacan los bustos de los condes que mandaron construir el palacio y la portada con arco de medio punto. En el siglo XVII fue sede de la Aduana y durante la Guerra Civil fue utilizado como acuartelamiento del Batallón de Montaña del Ejército Popular de la República, conocido como el Batallón Alpino. Hoy es la sede del Centro Cultural Palacio de los Condes de Ribagorza.

Casa Juste

La Casa Juste de Benasque, edificada en el año 1567, está dentro de la relación de castillos considerados Bienes de Interés Cultural (BIC). Es una torre rectangular y almenada situada en el casco urbano y que es visible desde muchos puntos de la localidad. Mide 18 metros de altura y se encuentra en muy buen estado de conservación. En su día, formó parte de una de las casas fortificadas de carácter palaciego que construyeron algunas familias infanzonas del valle de Benasque durante los siglos XV al XVII.

Decoración en las calles de Benasque
Decoración en las calles de Benasque

Iglesia de Santa María la Mayor

Situada en la plaza del Ayuntamiento, es la iglesia emblemática de Benasque (Huesca). El edificio original data del siglo XI, si bien fue reformada posteriormente en varias ocasiones. En 1925 sufrió un incendio fortuito y, durante la guerra civil española, fue arrasada. Está dedicada  a la Asunción de la Virgen María y en su interior se venera al patrón de la villa, San Marcial. En su patio interior estuvo el cementerio de la villa hasta el siglo XIX.

Rutas por el Parque Natural Posets-Maladeta

Este parque tiene la mayor concentración de cumbres de más de 3.000 metros de altitud de todo el Pirineo: Aneto (3.404 metros), Posets (3.375 metros) y Maladeta (3.308 metros). La mayor parte de la superficie de este parque natural está por encima de los 1.800 metros de altitud. Aquí se pueden contemplar 95 lagos, un sinfín de cascadas, entre las que sobresale la cascada de Aigualluts, y 13 glaciares que aún perduran en el Pirineo, como el del Aneto, en el macizo de Maladeta, o el de Llardana, en el macizo de Posets. Hay rutas guiadas, de las que debes informarte por teléfono en la oficina del parque natural. Son un plan ideal para una escapada a Benasque con niños.

Posets Maladeta
Rutas por el Parque Natural Posets-Maladeta

Centro de Visitantes de Benasque

El Centro de Visitantes de Benasque está concebido para informar, acoger y orientar a los viajeros en su visita al Parque Posets-Maladeta. En su interior, se puede contemplar una exposición sobre los atractivos más importantes de este espacio natural, consultar publicaciones informativas y charlar con personal especializado que te ayudará a enriquecer tu visita al parque. Se accede al mismo por la carretera de Benasque a Anciles y el teléfono de contacto es el 974 552 066.

Visitar Cerler

Situado a 1.540 metros de altitud, Cerler es el pueblo más alto del Pirineo aragonés. Tiene un casco antiguo pequeño muy bien conservado que cuenta con una bonita iglesia y varias casas nobles del siglo XVI. Conserva el sabor típico de los pueblos del valle. Sin embargo, es mucho más conocido por sus modernas pistas de esquí. En la carretera hay un bonito mirador desde donde se puede observar el valle de Benasque y las localidades de Eriste y Benasque.

Cerler
Cerler

Visitar Anciles

Este pequeño pueblo medieval de calles empedradas es como de cuento. Pertenece al municipio de Benasque y es conocido también como Ansils. Tiene una arquitectura propia de la comarca de la Ribagorza y cuenta con numerosas casas solariegas que fueron construidas en piedra durante los siglos XVI y XVIII. También merece una visita la iglesia de origen románico, que se conserva en perfecto estado. Todo ello hace que sea uno de los pueblos más bonitos de Huesca.

Comer en Benasque

Los pueblos de alta montaña suelen abrir el apetito. Así que prepárate para disfrutar de la mejor gastronomía del Pirineo aragonés en el valle de Benasque. Tienes mucho para elegir. En Benasque, te recomendamos La Parrilla y el asador El Fogaril, ambos con menú. Otra buena opción es El Veedor de Viandas, donde debes probar el carpaccio de ternera. En Cerler, puedes ir a La Borda del Mastín, un antiguo establo de piedra, donde sirven una carne de buey de primera calidad. También el Paralelo, un local más desenfadado, o la brasería El Rincón, donde se asa la carne a la vista y donde puedes disfrutar de un buen solomillo de vaca vieja. Y en Anciles, puedes optar por el Ansils, porque no te defraudará si quieres degustar la comida típica de Huesca.