Emplazado en un espacio privilegiado, rodeado por las imponentes montañas del Pirineo oscense, se encuentra un lugar mágico, un espacio en el que conocer de primera mano a los osos, lobos, linces y muchas otras especies que pueblan o en su día poblaron las montañas del Pirineo. Se trata del Parque Faunístico de Lacuniacha, un ‘bioparque’ de más de 30 hectáreas de extensión ubicado en pleno bosque de La Pinosa, en el valle de Tena, en el término municipal de Piedrafita de Jaca.
Su visita se hace imprescindible para familias amantes de la naturaleza que llegan a la zona. En Lacuniacha conviven especies que de otra forma resultaría muy difícil de contemplar en estado salvaje. Un recorrido a todas luces lúdico y divulgativo que hace las delicias de grandes y pequeños. Visitamos el lugar, destacando lo que no te puedes perder. ¿Nos acompañas?
Qué es Lacuniacha y en qué contexto se ubica
Contra una opinión bastante extendida, Lacuniacha no es el zoo de Huesca. El Parque Faunístico de Lacuniacha es un bioparque. La principal diferencia entre un zoo y un bioparque se encuentra en que en los zoos los animales están confinados en espacios reducidos cuya finalidad exclusiva es la exhibición al público. En cambio, en un bioparque como Lacuniacha, las especies que la habitan se encuentran en estado de semilibertad en un parque natural. Este tipo de espacios pretenden ser santuarios para animales que o bien han nacido en cautividad, o provienen de centro de recuperación o han sido rescatados, precisamente, de lugares en los que no recibían los cuidados apropiados. Además de encontrarse en su propio hábitat, estas especies conviven y se interrelacionan en un bioparque como este con otros animales autóctonos que sí viven en libertad y que pueden entrar y salir del perímetro del parque sin problemas.
Hecha esta distinción, se hace imprescindible conocer la ubicación en la que se halla Lacuniacha. El Parque Natural tiene una extensión de 30 hectáreas situado en el bosque conocido como La Pinosa, a 1380 metros de altitud. Desde este lugar se puede disfrutar de increíbles panorámicas del Valle de Tena así como de las imponentes cumbres de la sierra de La Partacua, con la Peña Telera destacando entre todas ellas. El espacio del Parque Faunistico forma parte de la Reserva de la Biosfera Ordesa-Viñamala, la única reserva de estas características que hay en territorio aragonés.
El parque se inauguró en 2001. El curioso nombre de Lacuniacha alude a la laguna natural que en su día cubría el espacio en el que ahora está el parque. Un proceso natural de colmatación dejó sin agua la zona y fue entonces cuando la vegetación colonizó el lugar.
Recorrido y especies que podrás ver
Lacuniacha alberga alrededor de 120 animales de 15 especies diferentes. De la familia de los cérvidos se pueden contemplar ciervos, corzos y gamos. También bellos renos procedentes del norte de Europa. En cuanto a caprinos, se encuentra el sarrio o rebeco y la cabra montesa, ambos animales propios de las cumbres y crestas como las existen en los Pirineos.
Respecto a los bóvidos, en Lacuniacha se hallan dos bellas especies: el bovino de Heck y el bisonte europeo. El primero es una raza artificial creada en la década de 1920 con el fin de recrear al extinto uro europeo. Respecto a los bisontes europeos, el Parque Faunístico participa en el programa de recuperación de esta especie que en su día sirvieron de inspiración para pintar la cueva de Altamira y que, sin embargo, llegaron a estar en peligro de extinción crítica. Hoy existen en Europa 2.700 ejemplares en libertad de este majestuoso animal. Las crías que nacen en Lacuniacha son soltadas en libertad en pequeñas poblaciones de bisontes que viven en el norte de Europa.
Otras especies que habitan el Parque son el jabalí, el muflón (una bella y curiosa oveja salvaje) y el zorro común. Destacan también los caballos de Przewalski o mongoles, la única subespecie salvaje de caballo que existe, de las que se cree que sólo existen 1.000 ejemplares en todo el mundo. También se hallan ejemplares de osos y lobos ibéricos.
Es difícil elegir la estrella del parque ante tantas, tan bellas y tan variadas especies, pero de haber alguna esa sería sin duda el ejemplar de lince boreal. Se trata del pariente europeo del lince ibérico. Se diferencia de éste por su mayor tamaño y por su denso pelaje. El lince es un animal magnético, tener la posibilidad de que nos devuelva una de sus miradas desafiantes es algo que deja un recuerdo perenne.
En el parque también se pueden divisar otros vecinos autóctonos que lo visitan como topos, marmotas, ardillas y aves.
En paralelo con el recorrido faunístico, el Parque cuenta con un itinerario botánico con las 21 especies vegetales más destacadas de la zona, en las que se encuentran paneles informativos de cada una de las plantas. Destacan especies protegidas como bojes, pinos silvestres, abedules, robles o acebos.
El Parque ofrece al visitante un recorrido de 4,5 kilómetros por un sendero trazado que permite visitar todos los recintos donde habita la fauna. El itinerario lleva entre 2 y 3 horas recorrerlo. A través de la ruta podemos ser testigos de cómo se alimentan, descansas, se relacionan o cuidan de sus crías las distintas especies. Se trata de un recorrido circular que si se realiza en sentido inverso a las manillas del reloj, es decir, comenzando por la derecha según se accede al Parque, comenzamos visitando los recintos del zorro y del lobo ibérico. Se pasa después por la zona donde están los caballos de Przewalski, los osos pardos, bisontes y los bobinos de Heck. En esta zona se encuentran un observatorio para divisar de primera mano la actividad de aves necrófagas como los buitres.
Tras pasar la zona de los sarrios, un desvío nos permite subir a un mirador donde contemplar el valle y la bella sierra de Partacua. Volviendo al recorrido y tras dejar atrás el recinto de las cabras montesas, encontramos un bar en el que poder descansar y tomar un refrigerio. El bar se encuentra en el lado opuesto de la puerta de entrada al Parque. Tras este descanso, el itinerario pasa por el área de los gamos, ciervos, muflones y corzos hasta pasar por la zona de los jabalíes, volver a la entrada del parque y poner fin a la visita.
Recomendaciones para tu visita
El Parque Faunístico Lacuniacha enumera una serie de recomendaciones para visitarlo. Los clasificamos:
- Lleva calzado apropiado, botas de montaña o zapatillas deportivas, en función de la climatología, pues hay que tener en cuenta que los senderos son naturales de montaña, no asfaltados.
- El parque está abierto todo el año. En invierno, son imprescindibles la ropa de abrigo, las botas de montañas y muy recomendables el uso de bastones, sobre todo si hay nieve en los senderos.
- Hay que tener en cuenta que está terminantemente prohibido fumar en todo el Parque.
- No se permite la entrada de animales.
- Al encontrarse en un entorno de alta montaña, es muy recomendable informarse previamente a la visita de la meteorología de la zona y tener en cuenta que puede cambiar bruscamente el tiempo. Así que se recomienda llevar siempre algo de abrigo, chubasquero o crema solar.
- Salvo las sillas 4×4 de bebés, el resto de sillas no pueden circular por el sendero, por lo que se recomienda utilizar mochila porta bebés. El centro tiene en alquiler este tipo de equipamiento en recepción.
- Sólo se puede seguir el trazado del sendero, no está permitido salir de él. Es fundamental respetar la tranquilidad de los animales.
- Está totalmente prohibido arrancar ninguna especie vegetal, muchas de ellas están protegidas.