Lo que realmente caracteriza a la isla de Ibiza no son sus discotecas ni su fiesta, sino un entorno único, en el que la actividad humana ha tratado de encontrar un equilibrio envidiable con la naturaleza. Gracias a esta simbiosis respetuosa, los turistas pueden disfrutar de lugares increíbles, de experiencias inigualables como contemplar las excepcionales puestas de sol en Ibiza, en especial en su costa de poniente. Esta es una vivencia que queda grabada en la memoria de los viajeros que algún día recorrieron la isla.
El manso abrazo del mar Mediterráneo en Ibiza permite el prodigio de regalar una estampa de atardecer calmo y pintoresco. Recorremos la costa de poniente de Ibiza en busca de los mejores ocasos marinos, en los que es más que posible, sobre todo los días especialmente despejados, ver cómo se hunde el disco solar detrás de los cerros de la costa del Levante peninsular. Pues, al fin y al cabo, recordemos que las Pitiusas se encuentran a menos de 90 kilómetros de las costas de Jávea y Denia.
- Puesta de sol en San Antonio, Ibiza
- Cala Comte al anochecer
- Atardecer en Cala Tarida
- Atardecer en Cala Molí y en Cala Vadella
- Cala d’Hort, uno de las puestas de sol más espectaculares de Ibiza
- Es Vedrà, una puesta de sol desde un kayak o barco
- El atardecer desde la torre del Pirata
- Benirràs, la puesta de sol más hippie
- Punta Galera, una despedida del sol mágica
Puesta de sol en San Antonio, Ibiza
La puesta de sol en San Antonio (o Sant Antoni de Portmany) tiene incluso su propia calle. El paseo Ses Variades, un tramo de costa rocosa donde se concentran los lounges y cafés más animados de la ciudad, se conoce oficiosamente como el paseo de la puesta de sol.
Al atardecer, la juventud internacional, los famosos de temporada y los crápulas irredentos que visitan la isla se concentran en las terrazas de locales míticos de la isla como los célebres Café del Mar, Golden Buddha o el Café Mambo para disfrutar de una de las puestas de sol más célebres del mundo a ritmo de chill out, ambient y otros estilos actuales de la mano de reputados DJ’s.
Lo más recomendable en verano es llegar con bastante tiempo para poder encontrar un lugar estratégico donde disfrutar de una espectacular panorámica junto con un buen cóctel, pues la zona se masifica rápidamente a medida que va cayendo el sol detrás de la isla Conejera. Al anochecer, en cualquier caso, la fiesta no acaba, pues comienzan espectáculos de malabaristas, performance y otros shows que hacen las delicias de los presentes.
En invierno, cuando las puestas de sol se adelantan a alrededor de las 17:30 horas, además de que muchos de estos cafés de Ses Variades se encuentran cerrados, el ambiente es más calmado, ideal para disfrutar del acontecimiento sin agobios.
A pesar de que el municipio de San Antonio cuenta con arenales increíbles como Cala Bassa o Cala des Torrent, todas ellas están orientadas mirando al norte, lo que impide divisar correctamente el atardeder.
Cala Comte al anochecer
Para poder disfrutar de una auténtica puesta de sol en el mar, continuando por las playas de poniente, deberemos desplazarnos a la Cala Comte (o Cala Conta, en castellano), hacia el oeste de San Antonio. La playa pertenece al municipio de San José.
Cala Comte es una de las playas preferidas para contemplar el atardecer, pues sus aguas cristalinas y su arena clara y fina, junto con los islotes dispersos que se divisan desde la cala, convierten el lugar en un escenario perfecto para disfrutar de la bajada del astro.
Atardecer en Cala Tarida
Para poder disfrutar de una auténtica puesta de sol en la playa, continuando con nuestro itinerario, es necesario cruzar la punta de San José hacia el sur hasta alcanzar la línea costera de poniente propiamente dicha. Uno de los primeros lugares imprescindibles es Cala Tarida.
Rodeada de hoteles, restaurantes y urbanizaciones, Cala Tarida se considera prácticamente una playa urbana. A pesar de todo, su encanto sigue intocable, siendo considerada como una de las playas más hermosas del poniente de Ibiza. Se trata de una coqueta cala que cuenta con uno de los atardeceres más increíbles, entre arena fina y aguas de color turquesa. Cala Tarida ofrece una puesta de sol ideal para familias con niños que han pasado toda la tarde disfrutando de la oferta lúdica de la zona y no se quieren perder el fenómeno crepuscular.
Atardecer en Cala Molí y en Cala Vadella
Continuando por la carretera que contornea la línea de la costa de Poniente, dirección sur, nos encontramos con dos lugares ideales para disfrutar del atardecer. El primero que sale a nuestro encuentro es Cala Molí, una tranquila playa cuyo principal atractivo es precisamente contemplar cómo el disco solar se pone tras la silueta del islote de s’Espartar.
Más adelante nos topamos con Cala Vadella, otra playa urbanizada, si bien de forma algo más racional que su pariente de Cala Tarida. En este lugar, podemos encontrar un bello atardecer enmarcado entre las paredes del acantilado de esta bahía también rodeada de arbustos y sabinas.
Cala d’Hort, uno de las puestas de sol más espectaculares de Ibiza
Además de los increíbles baños que podemos darnos en el Paraje Natural de Cala d’Hort, debemos disfrutar de la inolvidable panorámica de los islotes de Es Vedrà y Es Vedranell, una de las estampas más hermosas del litoral ibicenco.
Esta panorámica se convierte en hipnótica durante la caída de la tarde. Sin lugar a dudas, uno de los momentos imborrables de quienes han tenido el privilegio de contemplarlo en su visita a la isla de Ibiza.
Una vez llegada la noche, no es extraño divisar en esta cala, en días claros, la llamada luz zodiacal, una especie de haz de luz que se proyecta hacia el firmamento en lugares con poca contaminación lumínica. El fenómeno lo produce el sol oculto en el horizonte iluminando el polvo estelar entre los planetas.
Es Vedrà, una puesta de sol desde un kayak o barco
Tanto si se dispone de barco como si no, también podemos disfrutar del crepúsculo ibicenco desde la cercanía del islote de Es Vedrà –está prohibido desembarcar debido a su valor ecológico–, integrado en la Reserva Natural de Cala d’Hort. Se puede fondear cerca del peñasco con nuestra embarcación, alquilar una lancha en la propia Cala d’Hort o acercarnos con un kayak.
Una vez allí, delante del islote Es Vedrà, es fácil divisar la línea costera de la península al atardecer, siempre que el día haya sido claro y sin calima.
El atardecer desde la torre del Pirata
Continuando por la carretera local desde Cala d’Hort hasta Es Cubels, atravesarás una zona de acantilados. Una señal indica donde se puede aparcar el coche para tomar un sendero de unos 15 minutos a pie que lleva a la torre de Es Savinar, conocida popularmente como la torre del Pirata. Situada a unos 200 metros sobre el nivel del mar, este mirador regala una puesta de sol de gran belleza con las islas de Es Vedrà y Es Vedranell al fondo.
Benirràs, la puesta de sol más hippie
Más allá de la costa de Poniente, existen calas que, por su orientación, permiten disfrutar de puestas de sol increíbles. Una de ellas es la cala de Benirràs. Ubicada al norte de la isla, cerca del bello Puerto de San Miguel, Benirràs lleva décadas siendo el lugar de peregrinación de los hippies de todo el mundo.
El entorno de la playa, apartado y rodeado de bosques de sabinas, invita por sí mismo al ritual de despedir el día dejándonos arrastrar por el estado de contemplación “mística” de los hippies, amplificado, sobre todo los domingos, con los ritmos de tambores que inundan la zona.
Punta Galera, una despedida del sol mágica
En la zona residencial y hotelera de Portinatx, en la parte más al norte de la isla, se encuentra una pequeña península conocida como Punta Galera, que determina el punto más septentrional de Ibiza. En esta plataforma de roca se encuentran desconocidas e inaccesibles calas poco frecuentadas por turistas.
Pero lo más destacado de este lugar es, sin duda, el atardecer que se contempla desde la zona alta de este acantilado, donde por arte de magia el sol tiñe sus rocas de tonalidades rosáceas y anaranjadas. Es un espectáculo difícil de olvidar.