La Plaza Colón articula algunas de las principales vías de la capital, fundamentalmente los paseos de Recoletos y de La Castellana. Alberga una importante institución cultural, el teatro Fernán Gómez Centro Cultural de la Villa, que también acoge salas de exposiciones. Aquí se sitúa, además, uno de los espacios gastronómicos más escenográficos de la ciudad, Platea, en lo que antiguamente era el cine Carlos III. Desde el punto de vista arquitectónico, la plaza es especialmente significativa por las gemelas torres de Colón, construidas en los años 70 y diseñadas por el arquitecto Antonio Lamela. También por los Jardines del Descubrimiento y, por el monumento a Cristóbal Colón, de estilo Neogótico, diseñado por Arturo Mélida a finales del siglo XIX.
- La estatua de Colón preside la plaza
- Las Torres de Colón son una referencia del skyline madrileño
- El Teatro Fernán Gómez y su apuesta por la cultura actual
- Platea, un espacio gastronómico de primer orden
- La biblioteca más importante del país
- El próximo gran proyecto de la Plaza de Colón
- La bandera más grande de España
La estatua de Colón preside la plaza
El monumento a Colón, que alcanza los 17 metros de altura, se encuentra en medio de una fuente redonda, a modo de rotonda, en plena calzada de la Plaza de Colón. Fue traslado allí desde su ubicación original (en un extremo de los Jardines del Descubrimiento) en el año 2009. Así, podría decirse que la estatua del descubridor de América se ha convertido en una auténtica reguladora del tráfico entre el norte y sur de la ciudad, y viceversa. Eso es así porque está situada en medio de uno de los ejes viarios más importantes de Madrid: la unión entre los paseos de Recoletos y de La Castellana. El monumento fue erigido inicialmente entre los años 1881 y 1885, aunque su inauguración oficial, sin grandes celebraciones por parte del Ayuntamiento se aplazó hasta el 12 de octubre de 1892, coincidiendo con el IV Centenario del Descubrimiento de América.
Las Torres de Colón son una referencia del skyline madrileño
Las Torres de Colón, visibles desde numerosos puntos de la ciudad, llevan dibujando el skyline de Madrid desde finales de los años 70. Esta obra de Antonio Lamela ha sufrido varias modificaciones hasta llegar a su aspecto actual. La principal, la de la cubierta de color verde en forma de enorme enchufe y estilo Art Déco que las remata y de la que cuelga una escalera antiincendios que ha unido ambas torres, en principio concebidas como dos edificios independientes. Durante muchos años este conjunto arquitectónico fue conocido como las Torres de Jerez, siendo propiedad, en aquel momento, del grupo empresarial Rumasa, presidido por el mediático José María Ruiz Mateos. Junto a las torres resulta todo un espectáculo ver las habilidades de los muchos skaters y breakdancers que se dan cita aquí, sobre todo a la caída de la tarde.
El Teatro Fernán Gómez y su apuesta por la cultura actual
El Centro Cultural de la Villa, más conocido como Teatro Fernán Gómez, ocupa buena parte del subsuelo de la Plaza de Colón. El centro adoptó su nombre actual en 2007 tras el fallecimiento del genial actor, autor y cineasta Fernando Fernán Gómez. Esta institución realiza una importante apuesta por la cultura de vanguardia y por manifestaciones escénicas innovadoras a partir de textos clásicos y actuales. Al tiempo, promueve actividades de lectura, educativas, exposiciones de fotografía y de otro tipo de artes y espectáculos musicales. Como curiosidad, en la sala principal de este teatro, con capacidad para 682 personas, se ubicaron en su momento las capillas ardientes de los artistas Lola Flores, Rocío Jurado y Tony Leblanc.
Sobre este mismo teatro y dando vida y ternura a uno de los extremos de la plaza, durante el año 2019 permanecerá Julia, enorme escultura que representa el rostro de una niña con los ojos cerrados. Es una obra de Jaume Plensa, con el mecenazgo de la Fundación Maria Cristina Masaveu Paterson (FMCMP).
Platea, un espacio gastronómico de primer orden
En el lateral opuesto de la Plaza de Colón se sitúa Platea, una especie de “centro comercial” de la gastronomía con un buen puñado de locales distribuidos en torno a lo que antiguamente fue el patio de butacas y el escenario del cine Carlos III. Hoy en ese espacio escénico se programan actuaciones que amenizan la experiencia culinaria, ya de por sí suficientemente interesante.
Las propuestas son de lo más variadas. Como la barra de La Vermutería, donde se pueden degustar decenas de variedades de esa bebida acompañados de aperitivos clásicos o creativos. O el restaurante Canalla Bistró, atrevida apuesta del chef valenciano Ricard Camarena, donde se fusionan sabores, ingredientes y técnicas culinarias de los más variados rincones del planeta. Tras la cena está la opción de las copas y cócteles con mucho estilo, amenizados con la buena música de El Palco, que ocupa, precisamente, la parte superior de este enorme local.
La biblioteca más importante del país
En la confluencia de la plaza de Colón con el paseo de Recoletos se sitúa el edificio de la Biblioteca Nacional, con una imponente escalinata flanqueada por las estatuas en mármol de algunos de nuestros más importantes literatos clásicos. Pese a que el acceso está restringido a profesionales e investigadores, la biblioteca organiza visitas guiadas de lunes a viernes, previa inscripción. También se puede visitar el museo y periódicamente se organizan exposiciones relacionadas con autores y el mundo del libro, en general.
Este lugar, sin duda el centro bibliográfico más importante del país, comparte edificio con el Museo Arqueológico Nacional, cuya fachada se sitúa en la calle de Serrano. Este museo alberga las que probablemente sean las más importantes joyas prerromanas del país (las damas de Elche y de Baza) y numerosas esculturas de la época clásica, aparte de diversos tesoros de la época visigoda, entre otros muchos destacados vestigios del pasado.
El próximo gran proyecto de la Plaza de Colón
Sin fecha aún para su inauguración, el próximo hito arquitectónico de la plaza ya está en marcha. Se trata de la reforma del edificio de Barclays, para transformarse en Axis. Una construcción transparente, a base de vidrio y acero, que firma nada menos que el arquitecto británico Norman Foster, premiado con el Príncipe de Asturias de las Artes y el Pritzker de Arquitectura. Un innovador diseño con una apuesta importante por la sostenibilidad, potenciando el aprovechamiento de la energía solar. Las plantas inferiores del edificio las ocupará un centro comercial y, desde luego, la fisonomía de este edificio no va a dejar indiferente a nadie.
La bandera más grande de España
En la Plaza de Colón, junto a los Jardines del Descubrimiento en cuyos enormes bloques de granito se narra el descubrimiento y conquista de América, se instaló en el año 2001 una enorme bandera de España. Mide nada menos que 14×21 metros, es decir 294 m2, y ondea sobre un mástil blanco que alcanza los 50 metros de altura. La bandera como tal tiene 35 kilogramos de peso y el mástil unas 20 toneladas. Como curiosidad, éste gira sobre sí mismo en función de la dirección del viento, lo que evita que la bandera pueda enrollarse. Es, sin duda, no solo la bandera de España más grande de la ciudad, sino de todo el país.