Ojén se encuentra a 10 kilómetros al norte de Marbella, en la comarca de la Sierra de las Nieves. Pese a su pequeño tamaño, esta localidad ya aparece referenciada en crónicas sobre la rebelión mozárabe frente al Emirato de Córdoba, a principios del siglo X y cobró cierto protagonismo siglos después durante la Reconquista.
La actividad minera en el siglo XIX provocó el despegue del pueblo, que llegó a tener una línea de ferrocarril para el transporte del mineral hasta el muelle de Marbella.
En las siguientes líneas descubrirás qué ver en Ojén y qué puedes hacer en esta encantadora localidad malagueña.
Qué ver en tu visita a Ojén
El blanco de la cal invade las paredes de las casas de Ojén, uno de los innumerables pueblos blancos de Andalucía. Como una mancha, se precipitan ladera abajo del escarpado y verde territorio de la costa malagueña, situada a escasos kilómetros de distancia.
Es esa posición privilegiada, en la entrada de la Sierra de las Nieves, la que eleva a Ojén como un destino que merece la pena visitar en cualquier viaje por la Costa del Sol.
El tiempo en Ojén no se detiene tanto. Aquí se celebra el Ojeando Festival, un evento de música indie referente en Andalucía, al que acude lo más granado de la escena del rock independiente español. Diferentes escenarios se reparten en el centro del pueblo para dar vida y personalidad propia a esta pequeña localidad con decenas de artistas de prestigio.
Otro evento que tiene lugar en Ojén es su Festival Flamenco Castillo del Cante, una de las grandes citas del flamenco en España.
Pero, más allá de estos importantes festivales, en Ojén puedes visitar otros monumentos y lugares de interés. ¡Toma nota!
Iglesia de Nuestra Señora de la Encarnación
La Iglesia de Nuestra Señora de la Encarnación es uno de los principales monumentos de Ojén. Este templo del siglo XVI y una única nave, se caracteriza por su color blanco y por su torre, que aprovecha el alminar de la antigua mezquita.
Esta iglesia está situada en una de las plazas principales del pueblo. Su reloj es de los mismos artesanos que crearon el de la Puerta del Sol de Madrid.
Fuente de los Chorros
Junto a la iglesia encontrarás la Fuente de los Chorros, construida en ladrillo en 1905 y con cinco caños de agua.
Cuevas de Ojén
Las cuevas son uno de los principales y más singulares atractivos de Ojén. El característico terreno kárstico ha modelado el paisaje, creando recovecos como estas grutas situadas en la parte alta del pueblo. Utilizadas como refugio para animales, hoy se han rehabilitado para usos culturales donde se celebran pequeños actos y conciertos.
Además, las cuevas de Ojén constituyen un bonito mirador sobre el pueblo, la sierra y la costa marbellí.
Museo del Molino de Aceite
El aceite tiene en Ojén un pequeño e interesante museo. El Museo del Molino de Aceite nos muestra un molino de 1800 restaurado con su maquinaria original, para entender cómo es el proceso de elaboración del llamado oro líquido. El molino funciona a la perfección y se pone en marcha para la demostración.
Museo del Aguardiente
En la planta superior del Museo del Molino encontrarás el Museo del Aguardiente, el producto más famoso de la localidad. Y es que en este edificio se ubicaba la que fue la última fábrica de aguardiente de Ojén. En la exposición se puede observar una de las pocas botellas que quedan del auténtico aguardiente de Ojén. Tras dejar de fabricarse en 1974, la producción se ha recuperado intentando imitar la receta original de Pedro Morales, su creador.
Este licor, llamado directamente como ojén, llegó a ser exportado a América y aparece en referencias culturales de grandes artistas como Cela, Rosalía de Castro o Picasso. Muy popular es el soniquete “una copia… de ojén”, de siete sonidos que se emplean para llamar a la puerta.
El Mirador
Si quieres contemplar la belleza de este pueblo blanco desde las afueras, vete al Mirador de Ojén, situado a la salida del casco urbano en la carretera que baja a Marbella.
Mercadillos en Ojén
Es muy popular entre la población de la zona acudir el segundo fin de semana de cada mes a Merkadinfo. Un mercadillo de segunda mano en principio de objetos de informática y electrónica, pero que también tiene (muchos) puestos dedicados a otro tipo de objetos. Así, aquí se pueden adquirir desde prendas de moda a mobiliario, complementos, perfumes, bisuterías y pequeñas joyas, artesanías e, incluso, productos de alimentación.
Conviene saber que este mercadillo se celebra en horario y día diferente en función de la época del año. Así, durante los meses de verano tiene lugar el segundo sábado de mes por la tarde-noche (entre 18:30 y 23:30 horas aproximadamente). Mientras que el resto del año se celebra el segundo domingo del mes y en horario de 10 a 18 horas. Se monta en torno a la plaza de la Iglesia.
Senderismo y naturaleza en la zona
Una consideración previa: Ojén es un pueblo serrano y, como tal, el propio paseo por su casco histórico ya requiere un cierto ejercicio físico que muchos podrían considerar como “senderismo”. Su entorno natural no conlleva menos esfuerzo. Eso sí, menudo entorno: los paisajes que rodean a este pueblo blanco son un auténtico regalo para senderistas y amante de los deportes al aire libre, en general, por su belleza y los retos que plantea.
Entre las rutas más populares están la circular a El Cerezal, que requiere de unas dos horas de caminata y que permite llegar a ese bonito parque botánico. En el camino se pasa por las cuevas y el mirador de Ojén, con algunas de las mejores panorámicas de la zona.
Algo más complicada es la bajada desde Ojén a la playa de Marbella. Se realiza en paralelo al río que baña el pueblo, que se debe cruzar en varias ocasiones, lo que añade emoción a la aventura. En total unas tres horas de duración, sin apenas contacto con la civilización. Y luego, el premio de tomarse algo en un chiringuito antes de regresar en taxi u otro transporte público.
Para expertos senderistas está la subida a La Concha, que con sus 1.215 metros es una de las montañas más elevadas de Sierra Blanca. Un recorrido exigente, de unas cinco horas y media (ida y vuelta), que permite observar desde su punto más alto, siempre que las condiciones meteorológicas lo permitan, la belleza del Mediterráneo, con la no tan lejana costa de Marruecos e, incluso, el Peñón de Gibraltar.
Dónde comer en Ojén
Las legumbres, la caza o los quesos de cabra forman parte de la gastronomía tradicional de Ojén, con platos como la sopa Jervia, la sopa de caldo, el conejo, el puchero de perdiz, las castañas asadas o el famoso salmorejo. Puedes probarlos en algunos de los bares y restaurantes que encontrarás en Ojén.
Te damos algunas recomendaciones para comer en Ojén:
- Restaurante El Túnel: especialidad en carnes y pescados en uno de los mejores restaurantes de Ojén.
- Vikingo: esta taberna destaca por su variedad de platos y raciones a buen precio. Un buen lugar donde tapear en Ojén.
- Mesón La Casa Nueva: en la carretera de Marbella, este restaurante goza de una agradable zona exterior con vistas donde poder degustar platos de parrilla de carne o una amplia variedad de pescados
Qué ver en los alrededores de Ojén
La cercanía de la Sierra de las Nieves convierte a Ojén en un destino de naturaleza donde practicar actividades como el senderismo, la escalada, la espeleología o el descenso de cañones.
En los alrededores de Ojén encontrarás diferentes rutas que te introducen en esta sierra que es Reserva de la Biosfera así como con miradores sobre la localidad. También puedes visitar la Eco Reserva, un antiguo coto de caza reconvertido en reserva ecológica donde los más pequeños podrán aprender a respetar el entorno, la flora y la fauna.
Además, muy cerca de Ojén encontrarás localidades como Marbella, Coín, Monda o Guaro. Te recomendamos consultar información referente a la Sierra de las Nieves y los diferentes municipios que la integran para descubrir más lugares de interés.