Situada a poco más de 20 minutos en coche de Palma de Mallorca, la Cartuja de Valldemossa es un conjunto monumental cargado de historia que es obligado visitar en una escapada turística por las Islas Baleares. Este espacio, que en principio fue residencia real y después monasterio de la orden religiosa de los cartujos, encierra en su interior grandes atractivos. El monasterio existía desde 1399, hasta que en 1835 se secularizó con las desamortizaciones eclesiásticas de Mendizábal. En la actualidad, el público tiene la oportunidad de visitar el antiguo palacio de un rey que data de 1309, una impresionante iglesia con frescos de Bayeu, el cuñado de Goya; un largo corredor con arcos blancos que conduce a las celdas de los monjes, hermosos jardines y terrazas que miran al valle de Valldemossa, una antigua botica, una imprenta del siglo XVI y una importan colección de arte.
- Historia de la Cartuja de Valldemosa
- Cartuja de Valldemosa – Horarios y cómo llegar
- Qué podrás ver en la Cartuja
- Museo y colecciones
Historia de la Cartuja de Valldemosa
Fue Jaime II, primer monarca del reino de Mallorca, quien mandó construir en 1309 lo que, en principio, fue el Palacio del Rey Sancho y que más tarde se transformó en la Cortoixa (cartuja) de Valldemossa. Se levantó en su origen con el objetivo de ser la residencia de su hijo Sancho, quien encontró aquí alivio a su enfermedad de asma. Al parecer, se edificó sobre un viejo alcázar de un valí moro de nombre Mussa, del que posiblemente puede provenir el nombre de Valldemossa.
En el año 1399, el rey Martín I de Aragón, “el Humano”, cedió todas sus posesiones a los monjes cartujos, que transformaron la plaza de armas en claustro y cementerio, los salones en celdas, la prisión en refectorio, la despensa en sacristía y la cocina, en iglesia. Hasta que en 1835, las celdas de la cartuja se vendieron a particulares por la desamortización de Mendizábal. Y las antiguas y austeras celdas de los monjes cartujos se convirtieron en confortables espacios.
A partir de entonces, fueron muchos los artistas y escritores que se sintieron atraídos por la belleza de este lugar y pasaron temporadas en este bonito lugar. Es el caso de George Sand y Chopin, Rubén Darío, Azorín, Santiago Rusiñol o Eugenio d’Ors.
Cartuja de Valldemosa – Horarios y cómo llegar
La Cartuja de Valldemossa se encuentra abierta al público, en la localidad de Valldemossa (Mallorca), de lunes a sábado de 10 de la mañana hasta las 17 horas, salvo los sábados, que cierra sus puertas a las 16 horas.
Desde Palma de Mallorca a la Cartuja de Valldemossa, hay una distancia de unos 20 kilómetros, que se recorren en poco menos de media hora. La carretera es cómoda, aunque se recomienda ir con prudencia por la afluencia de ciclistas. Valldemosa está conectada por autobús con Palma de Mallorca a través de la línea 203 de la empresa TIB (Transport de les Illes Balears), que parte de la plaza de España de Palma de Mallorca. El trayecto tiene una duración de 40 minutos y hace paradas en Deia, Sóller y Puerto de Sóller. La tarifa es de unos 5 euros aproximadamente. También existe la opción de contratar una excursión organizada a Valldemossa.
Qué podrás ver en la Cartuja
Además del Palacio del Rey Sancho, en la Real Cartuja de Vallemossa podrás visitar la Torre del Homenaje, edificada en 1563 por los cartujos para defenderse de los ataques de los piratas berberiscos. La torre sigue los modelos de la época en su configuración exterior, con matacanes, una ventana renacentista y una escalera de caracol. Esta torre también sirvió de prisión a Gaspar Melchor de Jovellanos, quien decidió sumarse a la rutina de los cartujos antes de ser trasladado al Castillo de Bellver.
Es conveniente visitar la Iglesia, de estilo neoclásico, en tonos blancos y dorados. Su decoración estuvo a cargo de artistas como el escultor catalán Adriá Ferran, autor del grupo del Descendimiento de la Cruz del retablo mayor y de la imagen de Santa Catalina Thomás, nacida en Valldemossa. Otro de sus atractivos turísticos en la Farmacia monástica, una de las mejor conservadas de Europa. Fue fundada por lo cartujos en 1723 y estuvo activa hasta 1895.
Desde hace varios años, la Cartuja obsequia a sus visitantes con un concierto de piano de unos 15 minutos durante la visita al monasterio. Normalmente, se interpretan piezas de Chopin en el interior del Palacio del Rey Sancho.
Museo y colecciones
En las dependencias de la Cartuja, también se halla el Museo Municipal de Valldemossa, donde se encuentran los fondos procedentes de la antigua imprenta Guasp con su prensa del siglo XVII y una colección de 1.590 matrices xilográficas de los siglos XVI al XIX. También hay una sala dedicada al Archiduque Luis Salvador de Austria y la pinacoteca de la Serra de Tramuntana en la que se muestran obras de pintores que se inspiraron en esta parte de la isla.