Monte Toro es uno de esos rincones que no te puedes perder. Frente a las paradisíacas playas de la isla, la montaña más alta de Menorca es un lugar que destila su propio encanto. No en vano representa el punto más elevado de la coqueta isla balear. Aunque no está incluida entre los catorce ochomiles por los que muchos alpinistas suspiran, sus 358 metros de altura son un plan perfecto para un viaje en familia, una actividad diferente en tus vacaciones con amigos o un rincón en el que perderte si viajas en pareja.
La silueta del monte Toro se alza impasible en medio de un entorno de suaves desniveles. De hecho, el pico menorquín puede presumir de no tener competencia. Tanto es así que, una vez coronada su cima, las vistas son todo un regalo, incluso, para aquellos que no son demasiado amigos de las rutas de senderismo.
Cultura, historia, naturaleza y leyendas conviven en esta elevación creando una atmósfera especial a la que cuesta resistirse. Su fácil acceso, servicios próximos y entorno son, sin duda, otros reclamos de este paraje natural en el corazón de la isla que, por otro lado, encierra interesantes secretos.
Monte Toro: un origen de leyenda
Antes, incluso, de poner un pie en las inmediaciones de monte Toro el visitante se siente cautivado por la leyenda que esconde esta montaña menorquina. Y no es para menos. Los isleños más longevos y hasta los infantes conocen bien la historia del nombre de esta coqueta elevación del terreno. Según la leyenda, su origen tiene que ver con la creencia de que, años atrás, un toro salvaguardaba la cima impidiendo el paso a todo aquel que pretendiera acercarse.
Atraídos por unas intrigantes luces, cierta noche unos monjes cometieron el atrevimiento de ascender los 358 metros del monte Toro y, para su sorpresa, encontraron allí al osado animal. Lejos de amedrentarse, el toro salió a su encuentro. Al llegar hasta ellos y contemplar las cruces que portaban los religiosos, decidió cambiar su intención y, en lugar de ahuyentarlos, los condujo hasta una cueva. Allí, en la cavidad de la montaña, los monjes descubrieron la imagen de la virgen del Toro, actual patrona de la isla.
Mito o realidad, lo cierto es que la historia sobre el origen del monte Toro continúa envolviendo el lugar en magia. No obstante, los más escépticos apuntan a que, en realidad, su origen tiene que ver con la palabra con la que lo árabes se refieren a algo elevado: ‘tor’.
Subir a la montaña más alta de Menorca
Si pensabas que llegar a la cima de la montaña más alta de Menorca iba a tirar por tierra tu idea de vacaciones de relax, abandona la idea. El ascenso al monte Toro no entraña ninguna dificultad y puede hacerse en coche, en bicicleta o caminando. En función del medio elegido, eso sí, tardarás más o menos en completar la tarea aunque incluso en el caso de que te decidas por dar un bonito paseo, no te llevará más de una hora.
Qué hacer en monte Toro
Disfruta de las vistas: El monte Toro es uno de los mejores puntos para contemplar una panorámica de lujo. Si has elegido esta isla balear para las vacaciones, es posible que sus paisajes hayan tenido mucho que ver. Esta montaña te brinda la oportunidad de visualizar buena parte del litoral: desde la bahía de Fornells a San Bou, pasando por Mahón y hasta Ciutadella. Además, si el tiempo acompaña, puede que llegues incluso a atisbar Mallorca.
¿Buscando un plan romántico? Imagina esto: tú y tu pareja sentados en la monte Toro mientras os acurrucáis para contemplar una bonita puesta de sol. ¿Son campanas de boda eso que suena a lo lejos?
Visita cultural: Pero no solo el paisaje viste de encanto el monte Toro de Menorca. En el punto más elevado sobre el nivel del mar de la isla también hay espacio para una visita cultural. En la cima se alza el santuario de la Virgen de Monte Toro, construido en el siglo XVII sobre las ruinas de una antigua iglesia gótica y de acceso gratuito. En una de sus tres capillas hay una talla de madera de la virgen y, en otra, se muestra la cueva de la mítica leyenda sobre el origen del nombre de monte Toro.
También tendrás ocasión de admirar una imponente torre defensiva anexa al santuario y declarada Bien de Interés Cultural, así como una gran estatua del Sagrado Corazón de Jesús.
Recupera energías: Antes de emprender el camino de vuelta desde monte Toro también podrás disfrutar de un refrigerio o reponer energías si te decides a subir caminando. Sa Posada del Toro abre todos los días entre el uno de mayo y el 31 de octubre. Si viajas en otras fechas (del 1 de noviembre al 31 de marzo) y tienes intención de pasar por allí, solo podrás disfrutar de su comida tradicional de inspiración mediterránea durante los fines de semana.
Visita Es Mercadal: Por si este monte no fuera suficiente reclamo, la visita también te regala la oportunidad de conocer uno de los pueblos más bonitos del interior. La localidad de Es Mercadal, ubicada a los pies de la montaña, es parada obligada si te decides a visitar el techo de la isla. Además, si tu visita coincide con las fiestas tradicionales de San Martín (el tercer fin de semana de julio), no dejes de disfrutar del baile de sus caballos en sus míticos ‘jaleos’.
Incluye una visita al mejor escaparate de la isla pero eso sí, no olvides meter en la maleta ¡la cámara de fotos!