Tal vez conocer una sidrería en San Sebastián no sea lo primero en lo que pienses si estás planeando unas vacaciones en el País Vasco. Sin embargo, este tipo de establecimientos tiene una larga tradición y es, sin duda, una parada obligada para todo aquel que quiera embriagarse del auténtico sabor donostiarra.

Más allá de los pintxos y la cocina de autor, la sidra es una seña de identidad de la ciudad y los alrededores, no en vano se elabora desde hace siglos. No obstante, la historia ha pasado factura al sector que, si bien antes de la Guerra Civil estaba formado por cerca de 800 sidrerías, hoy mantiene viva la tradición gracias a apenas un centenar.

Son famosas las sidrerías de Astigarraga, al igual que las ubicadas en Hernani, Urnieta y Usurbil. Y es que, la mayor parte de estos templos de la fermentación del zumo de manzana se concentra en el noroeste de Guipuzkoa. ¿Estás dispuesto a encontrar las mejores sidrerías de Donostia? Saca papel y lápiz porque tenemos la ruta definitiva con aquellas que no te puedes perder.

Las mejores sidrerías de San Sebastián y de Astigarraga

Aunque la idea de visitar una sidrería en San Sebastián es hoy una de las propuestas turísticas más populares, no siempre fue así. Siglos atrás, los productores ofrecían catas privadas a sus compradores para cautivar a los paladares más exigentes, degustando los caldos celosamente almacenados en las tradicionales ‘kupelas’.

Con el tiempo, la práctica original de abrir los recipientes con un palillo (txotx) evolucionó hasta lo que ofrecen hoy las sidrerías más afamadas: visita guiada, tour y degustación del menú típico de sidrería. Aquí va nuestra selección.

 

 

  • Barkaiztegi

A escasos cinco minutos del centro de San Sebastián y envuelto en la magia de un imponente entorno natural se alza Barkaiztegi. Lo que comenzó como una sidrería en Donostia a finales del siglo XVII es hoy un complejo que incluye, además, un restaurante de referencia para los amantes de la cocina tradicional vasca.

Su sidra puede degustarse durante todo el año en botella, aunque también en las propias cubas al estilo tradicional, en la época de las sidrerías (desde mediados de enero hasta finales de abril).

Dirección: Barkaiztegi Bidea, 42

  • Lizeaga

Dar con la mejor sidrería de San Sebastián no resulta sencillo y es que muchas de las que aún se conservan atesoran siglos de historia y buen hacer. Ese es el caso de Lizeaga, una sidrería donostiarra a orillas del río Urumea con más de 400 años de antigüedad.

Sus instalaciones en el caserío lagar Gartziategi abren durante todo el año, aunque resultan especialmente atractivas durante la temporada de txotx. Garante de las tradiciones y la gastronomía vasca puede visitarse a pie desde Astigarraga.  Martutene Pasealekua, 139.

  • Petritegi

A escasos cinco kilómetros de San Sebastián encontramos Petritegi, la que para muchos es, la mejor sidrería de Astigarraga. Y razones no les faltan: en este caserío lagar de principios del siglo XVI no solo se elabora y sirve una de las sidras más famosas de la comarca, sino que ofrece al visitante un sinfín de experiencias.

Además de contar con tres comedores (Sagar, Baserri y Arrantzale) ambientados con motivos relacionados con la sidra, también ofrece: degustaciones y visitas guiadas a la bodega, talleres infantiles y actividades con niños, elaboración de sidra o asistencia a un concierto. Petritegi Bidea, 8. Astigarraga.

  • Zapiain

Otro de los referentes entre las sidrerías de Astigarraga es Zapiain cuyos orígenes se remontan también al siglo XVI. Con el devenir de los años, esta sidrería guipuzcoana ha ido adaptándose a los nuevos tiempos, ampliando sus instalaciones, incorporando nuevas tecnologías y profesionales capaces de mimar cada fase del proceso de elaboración de sus sidras.

Además de visitar las bodegas y degustar la sidra tradicional, su catálogo incluye otros productos de sidra. El Bizi Gotxo o sidra de postre; las variedades Sagardoz (Le Blanc, Liqueur y Haritza Oak Aged) y hasta un delicado vinagre de manzana. Nagusia, 96. Astigarraga.

  • Bereziartua

La última parada que proponemos por las sidrerías de Astigarraga nos lleva hasta Bereziartua. Su historia arranca en 1870, aunque el carácter familiar del negocio sigue intacto en manos de la cuarta generación de sus productores. En sus instalaciones elaboran y comercializan diferentes variedades de sidras que pueden degustarse en visitas guiadas durante todo el año.

Interesante resulta el hecho de que, en Bereziartua, la temporada de txotx se alarga hasta finales de mayo. De este modo, los tours por las instalaciones pueden ir acompañados de un menú típico. Distribuidas las kupelas alrededor del comedor, los comensales pueden catar las diferentes variedades de la sidrería como marca la tradición. Al grito de ‘txotx!’, llenando el vaso unos dos dedos y bebiendo la sidra sin prisa pero sin pausa para que no pierda propiedades. La experiencia promete. Iparralde Bidea, 16. Astigarraga

Menú de sidrería en San Sebastián

Tan interesante como tener claro qué sidrería visitar en San Sebastián, resulta saber que, junto a la degustación de la bebida local, es típico deleitar al paladar con una propuesta gastronómica a la altura. Aunque las versiones del particular ágape han ido reinterpretándose con el tiempo, lo cierto es que muchos establecimientos ofrecen lo que se conoce como el menú de sidrería.

La oferta más popular ofrece al visitante la posibilidad de abonar un precio fijo que, más allá de incluir toda la sidra que uno pueda ingerir, consta de varios platos propios de la gastronomía donostiarra. Para ir abriendo boca: tortilla de bacalao, bacalao frito con pimientos y, como no podía ser de otra manera, txuleta a la brasa. El broche de oro lo pone, en este caso, un postre que suele constar de queso de Idiazabal, membrillo y nueces.

Porque Donostia es mucho más que pintxos, no dejes de vivir la experiencia de conocer una auténtica sidrería en San Sebastián.