“Estos paisajes parecen de película”, comenta un jovencísimo viajero contemplando el atardecer en una playa de Tenerife. La luz, el viento, las olas, los barrancos, los acantilados y los entornos de plataneras se fusionan de tal manera que, en efecto, podemos tener la impresión de vivir una ficción, lejos de las urbes y de sus prisas. Paradisíacas, volcánicas, de aguas tranquilas o agitadas, las playas de Tenerife acogen tanto a quienes buscan desconectar como a los que prefieren la diversión o la aventura.
Conocer la isla a través de sus playas, sumergiéndonos en un Atlántico que cambia de color y de temperatura a medida que avanzamos por la costa de Norte a Sur, es toda una experiencia. Disfrutar de las playas de Tenerife más populares y dejarse sorprender por las más escondidas, se convierte en un plan idóneo para cualquier momento del año.
- Playa de Las Teresitas
- Playa de Benijo
- Playa de las Américas y otras playas del sur de Tenerife
- Playa El Duque
- Playa de La Tejita
- Playa de Los Gigantes
- Playa de Masca
- Playa del Bollullo
- Playas del Norte de Tenerife
Playa de Las Teresitas
A siete kilómetros de Santa Cruz de Tenerife, capital de la isla, se encuentra la playa de Las Teresitas, uno de los lugares de encuentro favoritos de los santacruceros. Bañarse en sus aguas tranquilas, tras una jornada de compras o después de visitar los centros de interés de la ciudad, es una buena opción para un día de vacaciones. Ubicada en la localidad pesquera de San Andrés, rodeada por la imponente cordillera de Anaga, esta playa artificial, que tiene su origen en 1973, con el volcado de arena blanca traída del desierto del Sahara, cuenta con rompeolas que la protegen y un arrecife artificial. Muy cerca, en Las Gaviotas, la paleta cambia de color. El negro de los volcanes impregna esta cala que atrae a los amantes de los entornos más naturales y la práctica del nudismo.
Playa de Benijo
No se puede abandonar la zona del macizo de Anaga sin conocer una de las playas de Tenerife más espectaculares e inolvidables, la de Benijo, a la que se llega desde Santa Cruz, a través de una carretera llena de ondulaciones y espléndidas vistas. Ubicada en el encantador pueblo de Taganana, en el caserío que le da nombre, entre dos roques, se accede a ella bajando un sendero con escaleras. Una vez allí, en ese espacio poco domesticado, próximo a las playas vecinas de Almáciga y el roque de las Bodegas, es posible guardar el reloj, olvidarse del tiempo y sentirse en armonía con la naturaleza.
Playa de las Américas y otras playas del sur de Tenerife
La temperatura sube a medida que avanzamos hacia el Sur, en dirección al centro turístico Playa de Las Américas, en el municipio de Arona. Quienes busquen diversión, deportes y entretenimiento para todos los miembros de la familia, han encontrado su sitio en este enclave, uno de los de mayor oferta turística de la isla, destino de muchos europeos que buscan el sol durante los fríos meses del invierno.
Aquí la fiesta ocupa las noches, pero durante el día el centro de atracción son las playas de arena dorada y aguas transparentes. Se puede elegir entre la playa de Troya, la más concurrida; la de La Honda o la de El Camisón, entre verdes y palmeras, muy cerca de Los Cristianos, otro de los lugares más populares del Sur, que da nombre a una pequeña playa, de gran colorido por los barcos fondeados en su cercanía, muy apreciada por las familias isleñas, al igual que la playa de Las Vistas, mucho más larga, de casi un kilómetro, y aguas poco profundas.
Playa El Duque
Entre las playas de Tenerife más atractivas del Sur de la isla, destaca la playa del Duque, situada en Costa Adeje, muy cercana al pueblo pesquero de La Caleta. Un sofisticado espacio de tranquilidad, para huir del bullicio, tomar un baño en aguas cristalinas y disfrutar de los atardeceres mientras se recorre el paseo litoral, con bellas vistas desde todos sus miradores, al lado de otras playas como Fañabé, Las Torviscas y La Pinta.
Playa de La Tejita
No puede faltar entre los objetivos de todo viajero interesado en las playas de Tenerife conocer La Tejita, un rincón oceánico donde sentirse plenamente conectado con la naturaleza. Con un kilómetro de longitud, se sitúa junto al cono volcánico Montaña Roja, un espacio protegido en el núcleo del Médano, territorio ideal para los amantes del surf y del windsurf, donde también es posible hacer nudismo.
Playa de Los Gigantes
Ya en dirección oeste, llegamos a Santiago del Teide. A los pies de los impresionantes acantilados de los Gigantes nos encontramos con la playa del mismo nombre. Pasear por su orilla oscura y bañarse en sus aguas tranquilas, con vistas hacia esas paredes verticales rocosas, que llegan a alcanzar hasta los 600 metros, es una de esas experiencias que se guardan en la memoria como un tesoro. Muy cerca, el puerto pesquero y deportivo, lugar desde el que coger un barco para emprender la aventura en busca de ballenas piloto y delfines, rumbo al Norte.
Playa de Masca
En el barco llegaremos a una de esas playas de Tenerife en las que no es difícil imaginarse en el papel de piratas o náufragos. Aislada y salvaje, la playa de Masca, en Buenavista del Norte, parece un lugar virgen cuando las embarcaciones se van y los viajeros se quedan solos. Los senderistas avezados pueden llegar hasta la playa descendiendo por el barranco de Masca desde el encantador caserío del mismo nombre, en medio de bellísimos paisajes. Por mar se puede seguir navegando hasta la Punta de Teno, donde el Sur se une con el Norte, donde cambian vientos y oleajes.
Son espectaculares las vistas a los acantilados de los Gigantes desde una pequeña playa-embarcadero en la que darnos un refrescante chapuzón antes de acercarnos al viejo faro. Este parque rural protegido, al que también se puede llegar desde Buenavista, cumpliendo con la regulación de horarios establecida desde 2018, es uno de los espacios naturales más hermosos de la isla. En el mismo municipio está la misteriosa playa de Las Arenas, cuyas finas arenas negras emergen al acercarse el verano.
Playa del Bollullo
Quien quiera descubrir playas en Tenerife vírgenes y poco masificadas, debe acercarse a La Orotava. En la zona agrícola de El Rincón, casi oculta, encontrará la espectacular playa del Bollullo, junto a las de Los Patos y el Ancón, todas entre formaciones volcánicas que se adentran en el mar. Tras dejar el coche a cierta distancia y emprender el camino a pie, el regalo es el silencio, la desconexión, la plena naturaleza. Los adictos al surf encontrarán aquí motivos para enamorarse de las playas de Tenerife. Igual de vírgenes, en Los Realejos aguardan La Fajana y Rambla de Castro, auténticos vergeles, mezcla de azul y verde.
Playas del Norte de Tenerife
La lava, las formaciones rocosas, la arena negra, son motivos que se repiten en las playas de Tenerife del litoral Norte. En el coqueto e histórico pueblo de Garachico nos sorprende El Caletón, un conjunto de piscinas naturales entre rocas. En Icod de los Vinos, su recogida playa de arenas oscuras, y ya en Puerto de la Cruz, el centro turístico más destacado de la zona, su bonita Playa Jardín rodeada de vegetación y con la grandiosa vista del Teide de fondo.