Cerca de Milán se encuentran algunas ciudades muy interesantes y lagos de ensueño que diseñan paisajes increíbles. Los lagos del norte de Italia son una auténtica maravilla enclavados en medio de la naturaleza. Y muchas poblaciones cerca de Milán conservan aún la auténtica magia medieval con sus construcciones y palacios. Así que prepárate porque hay muchas cosas que ver en Milán y alrededores. Además, el turismo en Lombardía es una gran baza porque la región cuenta con muchos atractivos para el viajero.
Ciudades cerca de Milán
A menos de 50 kilómetros de Milán, se encuentra la preciosa ciudad medieval de Bérgamo. Su parte más alta, la más antigua y la que alberga el casco histórico, está plagada de maravillas como la Piazza Vecchia o Piazza del Duomo, la basílica de Santa María la Mayor, la torre Cívica o el palacio de la Raggione. Es una delicia caminar por sus antiguas callejuelas o sentarse en una de sus numerosas terrazas a disfrutar del entorno.
Un poco más alejada, a unos 90 kilómetros de Milán, nos encontramos con Brescia, una ciudad rodeada de increíbles paisajes que conserva vestigios celtas, romanos, medievales, renacentistas… Y, entre todos ellos, sobresale el monasterio de San Salvatore y Santa Giulia, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Brescia, centro del poder lombardo
Brescia es una de las ciudades más ricas de Italia y fue uno de los grandes centros del poder lombardo en el siglo VI. Y aunque no es un destino propiamente turístico, cuenta con espacios muy interesantes para visitar. Y es que hay mucho que ver en Brescia, como la plaza del Foro, el espacio más antiguo de la ciudad. Tampoco dejes de visitar la plaza de la Loggia, la catedral Nueva y la catedral Antigua o el castillo de Brescia.
La ciudad cultural de Pavia
A orillas del río Ticino –y a tan sólo 20 kilómetros de Milán– se encuentra Pavia, una ciudad histórica y cultural en la que se pueden visitar lugares tan interesantes como la iglesia de San Pietro in Ciel d’Or, en la plaza Dante, donde se encuentra enterrado San Agustín. También, el castillo Visconteo, la piazza de la Vittoria, la piazza de Leonardo da Vinci, el palacio Comunal, la catedral o la iglesia de San Michelle, donde se coronaba a los emperadores. Su universidad también merece una visita por ser una de las más antiguas y prestigiosas de Italia.
Monza, mucho más que Fórmula 1
Monza es mucho más que Fórmula 1, aunque posiblemente el circuito de Monza es uno de los motivos que la hacen célebre, puesto que en ella se realiza el Gran Premio de Italia de este deporte. Pero, además de ser un lugar de culto para los amantes de la velocidad, también tiene curiosos espacios para visitar y disfrutar del entorno. Entre ellos, el puente de los Leones sobre el río Lambro, que es una visita obligada por la estampa romántica que se disfruta. También cuenta con una magnífica catedral gótica con una fachada policromada en verde y blanco y vidrieras magníficas, además de un palacio neoclásico, Villa Real, de la época de los Habsburgo custodiado por hermosos jardines. Está a sólo 10 km de Milán.
La señorial Varese
A unos 60 km de Milán se encuentra Varese, una ciudad repleta de bellos edificios señoriales en el Corso Matteotti, el centro neurálgico de la villa. Si te acercas a Varese, no puedes dejar de visitar el santuario del Sacro Monte, incluido en la lista del Patrimonio Mundial de la Unesco, o la basílica de San Vittore con su campanario y el baptisterio de San Juan. Además, es una ciudad llena de vegetación y zonas verdes, entre las que se encuentran preciosas villas que datan del siglo XVIII, como la villa Ponti o el palacio Estense.
Lagos del norte de Milán
Lago de Como
El Lago di Como Se ha hecho muy popular ya que el actor George Clooney, uno de sus visitantes más ilustres, posee allí una villa. Pero lo cierto es que es un lago que no necesita de padrinos para reconocer su espectacularidad. Es uno de los lagos más profundos de Europa y sus aguas bañan pueblos que enamoran por su encanto y belleza como Brienno, Tremezzo, Menaggio, Varenna o Bellagio. Alrededor del lago existe una magnífica vegetación y el paisaje y los hermosos valles que lo custodian lo convierten en un lugar único.
El lago Maggiore
En la frontera de Italia con Suiza, el Lago Maggiore está circundado por pequeños pueblos encantadores cargados de cultura e historia como Arona; castillos como el de Anguera, que perteneció a la familia Rocca Borromeo, o islas de ensueño llenas de paisajes espectaculares como la Isla Madre, Isla de los Pescadores e Isla Bella. Un lugar con una singular belleza que no puedes dejar de visitar.
A unos 140 kilómetros de Milán se sitúa el emblemático lago de Garda, uno de los más importantes de Italia. Tiene un color azul profundo, debido a su origen glaciar, que se mezcla con el verde brillante de toda la naturaleza que le rodea. Es un lugar ideal para relajarse, respirar y disfrutar de la naturaleza en estado puro. Está abrazado por pueblos preciosos como Sirmione, donde podrás visitar sus baños termales, o islas como la Isola de Garda, la más grande de las seis que contiene el lago, en la que hay hermosos jardines y sitios históricos que datan de la época de los romanos.