La Feria comienza con los fuegos artificiales a media noche en la Playa de la Malagueta tras el pregón. El paseo del parque se inunda con una explosión de luz y sonido y el encendido de su iluminación. A partir de ese momento, los malagueños tienen por delante varios días en los que disfrutar de dos Ferias en una. Porque la de Málaga se divide en Feria de Día y Feria de Noche.
El primer sábado de la Feria de Málaga se celebra la romería de Santa María de la Victoria y se entrega la bandera de la ciudad. Caballistas, carruajes y malagueños, junto con el abanderado van en procesión hasta el Santuario para realizar la ofrenda floral.
Ya el último domingo de Feria es cuando se celebra el desfile histórico que recrea la entrada de los Reyes Católicos a Málaga. Comienza en la playa de la Aduana y termina en la calle Alcazabilla, donde entregan las llaves de la ciudad al abanderado. Más de 200 figurantes representan los personajes medievales y musulmanes de la reconquista de Málaga. La comitiva se abre con dos jinetes. A lo largo del desfile podrás ver caballeros del rey, monjes trinitarios, caballeros de las órdenes militares, arqueros, lanceros, escuderos, bailarinas y por supuesto a los Reyes Católicos, Isabel y Fernando saludando al público.
Feria de Día
El centro histórico de Málaga es donde se celebra la llamada Feria de Día. El punto neurálgico es la calle Marqués de Larios donde se instala la portada de la Feria. Aquí, la bebida típica es el cartojal, un vino dulce fresquito que todo el mundo lleva en unos vasos colgados al cuello. Es habitual ver paseantes vestidos de flamencos y charangas animando en cada esquina. A lo largo de toda la calle podrás ver las casetas, que incluso se instalan en patios de edificios como es el caso de la caseta Centro Histórico de Málaga situada en la plaza de la Constitución. Este es el paraíso para la gente joven que baila al ritmo de la música.
El público más mayor acude al Real. En los últimos años también se instala la Feria de Día en el Cortijo de las Torres con más de 200 casetas abiertas para todos los públicos, más conocido por los malagueños como El Real. Se trata de un recinto de más de 800.000 m2. Los malagueños se ponen sus mejores galas para pasear de caseta en caseta y bailar unas malagueñas. Verás a las mujeres con sus trajes de flamenca y los hombres a caballo con su traje cordobés.
Las casetas son de peñas, cofradías, empresas o asociaciones, pero el Real también tiene cuatro espacios municipales en los que se programan actividades culturales y musicales. Estos son el Auditorio Municipal, la Caseta de la Juventud, la Caseta Infantil y la Caseta de Verdiales.
Feria de Noche
Aquellos que prefieren salir de fiesta cuando cae el sol y bajan un poco las temperaturas tienen su fiesta en el Cortijo de Torres donde se instalan atracciones de feria como la noria, los coches de choque o la casa del terror. Se encienden las luces de colores de las calles del Real y se disfruta hasta el amanecer de la fiesta, el vino y el pescaito frito. Los amantes del flamenco tienen cita obligada en la Caseta de la Copla y el flamenco. Cada noche se programan conciertos en el Auditorio Municipal y actividades, y en las casetas se ofrece gastronomía local y típica de feria como los churros con chocolate o el algodón de azúcar.
Feria Taurina
La plaza de la Malagueta acoge la feria taurina por la que pasan los primeros espadas del momento. La plaza de toros de la Malagueta se levantó en estilo neomudéjar con un diámetro en el ruedo de 52 metros. Su planta no es redonda sino que está formada por un polígono regular de 16 lados y es obra de los arquitectos Joaquín de Rucoba y Octavio de Toledo. Fue inaugurada en junio de 1876. En los años 40 del siglo XX se enlució la fachada y se pintó de blanco tal y como está ahora. En 1981 fue declarada Bien de Interés Cultural.
La Malagueta celebra un festejo muy peculiar uniendo la tauromaquia y el arte del malagueño más universal, Picasso. La Picassiana se organiza una vez al año con el ruedo y las tablas engalanadas con obras de arte y los trajes de luces de los toreros de inspiración picassiana. Esta original corrida se celebra desde 2003.
Festejar la entrada de los Reyes Católicos
La Feria de Málaga conmemora la entrada de los Reyes Católicos a la ciudad de Málaga el 19 de agosto de 1487. Esto supuso la anexión de la ciudad a la Corona de Castilla tras siglos de dominación musulmana. Unos años más tarde, en 1491, se decidió celebrar unas fiestas populares por esta efeméride. Pero no fue hasta 1887, cuando se celebró el IV centenario, cuando se recuperaron y lograron todo su esplendor.
