Una doble cadena de 26 atolones en pleno corazón del Océano Índico, con 1192 islas, aunque solo unas 200 están habitadas; Maldivas es un lugar mágico. Una minúscula colección de puntos verdes salpicados en el azul infinito.
En los últimos años, este maravilloso paraíso insular se ha convertido en un destino muy solicitado por todo tipo de viajeros, desde aquellos que intentan escapar de los circuitos más habituales hasta quienes buscan entrar en contacto con una naturaleza, sobre todo submarina –las aguas de las Maldivas albergan más de 2.000 especies diferentes de vida marina–, realmente fuera de serie. En todo caso, merece la pena tener en cuenta esta serie de consejos prácticos a la hora de organizar un viaje a Maldivas.
Saltando de isla en isla: traslados desde el aeropuerto
Para cuando llegues a Maldivas, lo más habitual es que el alojamiento que hayas elegido con antelación ya tenga dispuesto que alguien te reciba en el Aeropuerto Internacional de Velana (principal puerta de entrada al país, ubicado en Malé, capital del archipiélago) y te acompañe en el tramo final del viaje. En todo caso, no dejes de consultar este tema a la hora de hacer la reserva de alojamiento.
Prácticamente, hay dos opciones principales para saltar de isla en isla: un divertido paseo en lancha rápida en el que podrás disfrutar de la fresca brisa marina, o un viaje en hidroavión sobrevolando el fantástico archipiélago maldivo. Además, una tercera posibilidad, menos habitual, es coger un vuelo interno a cualquiera de los 18 aeropuertos nacionales ubicados en las distintas islas, y desde allí tomar, obviamente, una lancha rápida hasta el destino final. O aprovechar la red nacional de ferris. En todo caso, siempre es conveniente dejar solucionado este tema a la hora de hacer las reservas del viaje.

Bajo el sol tropical: siempre bien protegido
Aquello de “un maravilloso destino de sol y playa” es una expresión totalmente válida en el caso de Maldivas: hay muchas playas y, sobre todo, mucho sol. Un inclemente sol tropical que obliga a tomar ciertas precauciones. Por supuesto, no se trata de física cuántica, solo hay que llevar un buen protector solar (de preferencia ecológico/biodegradable, para no afectar a la delicada vida marina), un gorro o sombrero, gafas oscuras… y, bueno, algo de sentido común.
Incluso puede ser una buena idea llevar ropa ligera (algodón, lino…) de manga larga para proteger la piel en casos de exposición más prolongada (aun con algo de nubosidad se puede terminar con una insolación importante). Así como camisetas con filtro UV para realizar actividades acuáticas, en las que también se suele estar totalmente expuesto al inclemente sol maldivo. Y, eso sí, hay que mantenerse siempre bien hidratado. La deshidratación es uno de los problemas más frecuentes en climas tropicales y subtropicales.
Cultura local: un archipiélago de muchos colores
Maldivas es un destino fascinante, y junto con sus maravillosas playas y su efervescente vida marina, la cultura local es, desde luego, un atractivo irresistible. Desde la bulliciosa ciudad de Malé, capital del país, hasta el resto de los atolones, Maldivas ofrece todo tipo de experiencias.
Se pueden visitar hermosas mezquitas e interesantes museos que albergan el legado de civilizaciones milenarias. O lugares emblemáticos, como la Plaza de la República y el Palacio Presidencial. También la artesanía (objetos de fibra de coco, madera lacada, mimbre, alfombras tejidas, conchas…) es un buen reflejo de la riqueza cultural de estas islas, así como las fiestas populares, la música, las danzas más tradicionales (acompañadas por los grandes tambores Bodu Beru), los coloridos trajes típicos… A lo largo y ancho del archipiélago se puede disfrutar de las múltiples posibilidades que se deprenden de la cultura y la historia del país.

Por supuesto, la gastronomía merece especial atención. Tanto en los mercados más típicos como en los restaurantes de clase mundial, el archipiélago ofrece un auténtico desfile de sabores en el que confluyen ingredientes y recetas de todas las costas del Índico y más allá. Toques picantes de la India y Sri Lanka, algunos ahumados, arroz de Asia, tubérculos africanos, mucho coco (aceite de coco, leche de coco, coco rallado…) y, por supuesto, pescados y mariscos de todo tipo.
Alojamientos en Maldivas: una estancia en el paraíso
Maldivas es un destino turístico perfectamente “engrasado” y, por lo tanto, cuenta con opciones para todos los gustos y presupuestos (aunque no deja de ser un sitio relativamente caro). Así, en las principales islas y ciudades más pobladas se pueden encontrar desde pequeños hoteles boutique hasta posadas y casas de huéspedes rodeadas de la rica cultura local.
Por supuesto, el atractivo principal a la hora de pasar unos días en el archipiélago suele ser alguno de sus muchos resorts o complejos turísticos. Los hay de distintas categorías, desde los más asequibles, ubicados en alguna de las islas habitadas, hasta los complejos de lujo situados en islas privadas. Una estampa muy habitual son las siempre instagrameables Water Villas (las típicas, y glamorosas, villas suspendidas sobre el las cristalinas aguas del Índico) que se suelen encontrar en los mejores resorts de Maldivas. En todo caso, la hospitalidad es una clara seña de la identidad local.
Tiempo y época de lluvias: cuándo viajar a Maldivas
El archipiélago disfruta de un clima cálido y soleado durante todo el año. Sin embargo, de mayo a octubre, el monzón (típico viento estacional) del suroeste (hulhangu), más húmedo, suele regalarle a los visitantes sus características lluvias, de moderadas a intensas.
Por su parte, el monzón seco del noreste (iruvai) se encarga de calmar las aguas, abrir los cielos y “refrescar” un poco el ambiente entre noviembre y abril (la temporada alta en Maldivas). En todo caso, las temperaturas anuales de este paraíso tropical insular oscilan entre los 26 y los 32 grados Celsius, y muy rara vez desciende de los 25 grados.
Seguros de viaje y médico: no tiene sentido arriesgarse
Como en cualquier país ajeno a la UE, la Tarjeta Sanitaria Europea no tiene validez, con lo que se recomienda en todo caso viajar provisto de un seguro médico adecuado. Una opción que permita hacer frente a cualquier imprevisto (cobertura general, deportiva, submarinismo, covid-19, repatriación…) y, desde luego, evitar asumir elevados gastos sanitarios.
Por otra parte, la mayoría de los resorts cuentan con asistencia médica, de mayor o menor alcance, y cada atolón tiene al menos un hospital, lo que permite atender contingencias en caso de ser necesario.
¿Euro, dólar o rufiyaa? Moneda local y gestión del dinero
La divisa oficial es la rupia maldiva o rufiyaa, aunque los dólares estadounidenses y los euros se aceptan habitualmente en los resorts y puntos más turísticos. Desde luego, las principales tarjetas de crédito internacionales suelen ser bienvenidas en la mayoría de los comercios.
En este sentido, Maldivas es un destino más o menos caro, con lo cual es importante tener previstos ciertos gastos más allá del alojamiento (que suele estar pagado previamente). Sobre todo si se piensa realizar actividades acuáticas, visitas a otras islas, comidas fuera, compras… Desde luego, las cosas suelen ser algo más baratas en las islas habitadas que en los resorts, pero como prácticamente todo es importado, los precios nunca bajan demasiado. En cualquier caso, todo dependerá de la temporada (la alta es más cara, obviamente) y el plan: si vas a cenar en un resort o a contratar una expedición de buceo o esnórquel, podrás pagar con tarjeta; si piensas comprar alguna artesanía en una pequeña tienda de Malé o comer en un restaurante más tradicional, quizás te resulte más conveniente utilizar moneda local (hay cajeros y casas de cambio en distintos puntos de las islas habitadas).
Dónde alojarse en Maldivas
Aprovechar al máximo todas las maravillas que ofrece este fantástico destino del Océano Índico es más fácil en Barceló Whale Lagoon Maldives (https://www.barcelo.com/es-es/barcelo-whale-lagoon-maldives/). Este exclusivo resort 5 estrellas del Grupo Barceló se encuentra ubicado en el atolón de South Ari, en la isla privada de Bodufinolhu, a escasos 50 km de Malé.
Barceló Whale Lagoon Maldives cuenta con un centenar de villas de distinto tipo, incluyendo 30 fantásticas Water Villas con terraza exterior y 63 Beach Villas, entre otras opciones. Por supuesto, también hay varios restaurantes, centro wellness (spa, sauna, gimnasio…), dos piscinas, un animado beach club… Y un sinnúmero de experiencias marcadas por la tranquilidad y un ambiente playero de lo más chic.