Ubicados en la isla maltesa de Gozo, los Templos de Ġgantija son un conjunto arqueológico que parece desafiar el tiempo y la imaginación. Con más de 5.500 años de antigüedad, estas estructuras megalíticas son más antiguas que las pirámides de Egipto y Stonehenge, lo que las convierte en uno de los hitos arquitectónicos más antiguos del mundo. Declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, los templos son testimonio del ingenio y la espiritualidad de una enigmática civilización prehistórica que habitó este rincón del Mediterráneo. Según la leyenda local, estos colosales templos fueron construidos por una gigante llamada Sansuna, quien transportó las enormes piedras desde Ta’ Cenc, a varios kilómetros de distancia, para rendir tributo a la fertilidad. Este mito, que se mezcla con el asombro que despiertan estas estructuras, da nombre a los templos: «Ġgantija» significa «gigante» en maltés.

  1. Historia del Museo de Bellas Artes de Budapest
  2. Colecciones del Museo de Bellas Artes
  3. Información de visita: horario, precios…

Historia de los templos: la proeza de una civilización perdida

Los Templos de Ġgantija fueron construidos entre el 3600 y el 3200 a.C., durante el período Neolítico. Esto los sitúa entre los templos independientes más antiguos del mundo, anteriores a muchas de las grandes civilizaciones que moldearon la historia. Su creación marca el apogeo de la cultura megalítica maltesa, una sociedad que dejó pocas huellas escritas pero que demostró una maestría técnica y espiritual asombrosas.

El diseño de los templos sugiere una conexión con rituales de fertilidad, reflejada en las curvas pronunciadas de sus muros, que algunos interpretan como un homenaje a la figura femenina. Excavaciones arqueológicas han encontrado restos de ofrendas de animales y otros objetos ceremoniales, y han acreditado el uso de fuego dentro del recinto, lo que refuerza la idea de que este era un espacio sagrado dedicado a ceremonias religiosas.

Construir estas estructuras requería no solo una comprensión avanzada de ingeniería y arquitectura, sino también una organización social sofisticada. Las piedras utilizadas, algunas de hasta 50 toneladas, fueron talladas, transportadas y ensambladas con precisión. Aunque no se sabe exactamente cómo lograron esta hazaña, se cree que utilizaron rodillos de madera, cuerdas y rampas de tierra, métodos innovadores para su tiempo.

Abandonados alrededor del 2500 a.C., los templos quedaron olvidados durante milenios hasta su redescubrimiento en el siglo XIX. Desde entonces, su estudio ha proporcionado una valiosa ventana al pasado, aunque muchas preguntas sobre sus constructores siguen sin respuesta, alimentando el misterio que envuelve a este lugar.

Templos de Ggantija
Complejo de templos megalíticos de Ggantija, isla de Gozo, Malta

Cómo llegar e información de la visita: acceso fácil a un lugar excepcional

Los Templos de Ġgantija se encuentran en la localidad de Xagħra, al noreste de Gozo. Si viajas desde la isla principal de Malta, primero necesitarás tomar un ferry desde Cirkewwa hasta el puerto de Mgarr en Gozo, un trayecto de apenas 25 minutos que ofrece vistas espectaculares del Mediterráneo. Desde allí, puedes llegar a los templos en coche o en la línea 322 de autobús en menos de 15 minutos.

El lugar cuenta con un centro de visitantes donde podrás comprar tus entradas y acceder a exposiciones que contextualizan el significado histórico de los templos. La tarifa general es de 10 euros para adultos, con descuentos para estudiantes, jubilados y familias. El horario de apertura es de 10:00 a 18:00h todos los días del año, salvo en enero y febrero que abre de 09:00 a 17:00h.

Aunque los templos son el punto focal, la visita también incluye acceso al Museo Arqueológico de Gozo, que alberga artefactos encontrados en el sitio, como figurillas y herramientas, ofreciendo un marco más amplio de la vida en la antigüedad.

Qué podrás ver: detalles que nos dan pistas del uso de ritual de los templos

La visita a los Templos de Ġgantija comienza con un paseo por los imponentes muros exteriores, construidos con piedras calizas que muestran signos de erosión, evidencia de su antigüedad. Estos muros, algunos de más de seis metros de altura, rodean dos templos conectados, cada uno con un diseño único pero complementario.

El interior de los templos revela cámaras con un diseño curvado que sugiere una intención simbólica, posiblemente relacionado con ritos de fertilidad. En los suelos de piedra, se pueden observar agujeros circulares, que se cree eran utilizados para sujetar estacas o soportes ceremoniales. Las paredes conservan detalles decorativos tallados que reflejan una estética minimalista pero impactante.

Uno de los elementos más fascinantes es la alineación de los templos con el sol. La entrada principal está orientada hacia el sureste, de modo que la luz del amanecer ilumina el interior durante los solsticios, un detalle que subraya la conexión entre los constructores y los ciclos naturales.

Otros templos megalíticos en Malta: un circuito arqueológico por las islas

Además de Ġgantija, Malta cuenta con varios templos megalíticos que complementan la experiencia. En la isla principal, destacan Hagar Qim y Mnajdra, situados en un acantilado con vistas al mar. Estas estructuras, construidas en una época similar, ofrecen detalles únicos, como intrincadas decoraciones en espiral y cámaras más elaboradas.

El Hipogeo de Hal Saflieni, en Paola, es otra joya arqueológica. Este santuario subterráneo, excavado en roca sólida, es un ejemplo impresionante de la arquitectura prehistórica y está considerado uno de los espacios rituales más sofisticados de su tiempo.

Si decides explorar estos sitios, te recomendamos planificar con antelación, ya que muchos de ellos tienen restricciones en el número de visitantes diarios para preservar su integridad.

Templos de Ggantija
Hagar Qim