Viajar con niños a Malta es un buen plan para los padres que quieren salir al extranjero y pasar unos días en un lugar donde se respire tranquilidad, haga bueno y haya actividades para los más pequeños. 

Castillos y bastiones cargados de historia, playas, calas y cuevas bañadas por agua cristalina de color azul turquesa, viajes en barco a otras islas o parques temáticos y acuáticos son algunas de las opciones que ofrece el archipiélago de Malta (Malta, Gozo y Comino son las islas principales). 

Verano suele ser el momento para hacer este tipo de viajes. Es la época más calurosa y en la que hay más turistas, pero también es el mejor momento para hacer excursiones a otras islas o para bañarse y disfrutar del sol y la playa. 

Debajo, incluimos una selección de planes para hacer con niños en Malta. 

  1. Pasear por ciudades históricas, fuertes y visitar museos
  2. Playas, calas, cuevas y esnórque
  3. Parques acuáticos y temáticos
  4. Recomendaciones y consejos

Pasear por ciudades históricas, fuertes y visitar museos

Probablemente, el turista que viaje con niños a Malta tenga su base o alojamiento en La Valeta, la capital de la República de Malta. Esta ciudad está cargada de historia, reflejada en 320 monumentos en tan solo 55 hectáreas: su parte vieja fue declarada Patrimonio Mundial de la Humanidad por la UNESCO en 1980.

Cerca de La Valeta (se puede ir en autobús o en ferry) se encuentran las ciudades históricas de Cospicua, Senglea y Vittoriosa -también conocidas como “las tres ciudades de Malta”-. 

Probablemente a los niños les guste pasear por calles empedradas que discurren entre fachadas de piedra caliza, balcones de hierro forjado y edificios de estilo barroco. Y puede que también les gusten los fuertes de San Telmo (La Valeta) o Rinella (Vittoriosa), lugares en los que viajar al pasado glorioso y defensivo de la Orden de los Caballeros de San Juan -hoy conocidos como la Orden de Malta-.  

También en esta zona de ciudades históricas maltesas hay un museo en el que los niños podrán aprender cosas nuevas. El museo marítimo, en Vittoriosa, es un espacio fascinante en el que se exponen objetos relacionados con los 7.000 años de historia marítima de Malta. 

Y a poco más de 20 minutos por carretera desde La Valeta, está el Museo de la Aviación de Malta, concretamente en el antiguo aeródromo de la RAF en Ta’Qali. Los más pequeños podrán ver de cerca aviones, helicópteros o equipos de aviación que abarcan el periodo desde el primer vuelo maltés hasta la actualidad. 

Playas, calas, cuevas y esnórquel

Los 253 kilómetros de costa que tiene el archipiélago de Malta dan para mucho. Las costas escarpadas de las islas de Malta, Gozo y Comino ofrecen a padres y niños rincones de ensueño donde las aguas cristalinas y de color azul turquesa del mar bañan bellas calas ubicadas entre rocas, playas de arena dorada o piscinas naturales llenas de riqueza marina.

En la isla de Malta, Ghadira Bay, en la población de Mellieha, destaca por ser una playa de arena de gran tamaño. Una buena opción para quienes quieran pasar un día de playa e ideal para familias ya que, desde la orilla, la profundidad del agua va in crescendo poco a poco y no suele haber muchas corrientes marinas. Hay todo tipo de servicios -alquiler de tumbonas y hamacas, alquiler de equipo para hacer windsurf u otros deportes acuáticos, quioscos para comprar algo de comer, así como hay zonas de pic-nic-. Golden bay, en el noroeste de la isla de Malta, es otra de las playas de Malta más populares entre los turistas por su tamaño y el color dorado de su arena. 

Por último, a menos de media hora en coche desde La Valeta en dirección al sur de la isla de Malta, se sitúan las cuevas Blue Grotto (Gruta azul en su traducción al castellano). Se trata de cuevas marinas formadas por la erosión del agua y el viento y a las que se puede acceder desde el agua. Su nombre se debe al efecto de las luces del sol al proyectarse con la roca, que son de un tono azul intenso. Los niños vivirán una aventura al ir en barca hacia el interior de estas cuevas. 

En la isla de Comino se encuentra Blue Lagoon (o Laguna Azul). Es, quizá, la cala más paradisíaca y popular del archipiélago de Malta. El intenso color azul de sus aguas cristalinas es la que le da nombre y atrae a viajeros que quieren darse un baño en sus aguas y, si a los niños les gusta el esnórquel, bucear largo y tendido viendo peces y otras especies marinas. El problema es que suele estar muy concurrida -sobre todo en verano-. Una alternativa es alquilar una excursión de unas horas en barco para visitar esta bella laguna natural, darse un chapuzón y ver otros puntos de interés de Comino. 

Junto a Malta, Gozo y Comino son las tres islas más conocidas y visitadas del archipiélago maltés. Ambas islas merecen la pena una vista de uno o dos días en familia. Se llega en ferry desde el puerto de Ċirkewwa, al noroeste de Malta.

A poco más de 20 minutos en barco desde Malta, la isla de Gozo ofrece al viajero tranquilidad, paisajes costeros espectaculares, pueblos con casas e iglesias de piedra y vestigios históricos que datan de miles de años atrás y que representan a culturas y civilizaciones que se asentaron o pasaron por esta isla (bizantinos, romanos, otomanos, aragoneses, castellanos, franceses, etcétera). 

Los templos de Ggantija, construídos hace más de 5.000 años; la ciudad de Victoria, su capital, y la ciudadela construida en el siglo XIII; o las salinas del pueblo de pescadores de Marsalforn, con una historia de 2.000 años, son puntos de interés turístico que visitar con niños. Además, si hay tiempo para hacer una pequeña excursión y darse un chapuzón, la playa de Ramla (al norte, en la localidad de Xaghra) goza de fama por su arena de color dorado y por tener un sendero que lleva durante media hora de caminata a la cueva de Calipso, donde según leyendas locales Ulises, el protagonista de La Odisea de Homero, estuvo siete años en su regreso a Ítaca al estar retenido por la ninfa Calipso quien le prometía la eterna juventud

Tal y como sucede con la isla de Gozo, Comino también es un buen lugar para visitar con los niños durante una jornada. En esta isla maltesa se han rodado películas en alguno de sus bellos paisajes (Troya, El Conde de Montecristo, Popeye…). Ir al Blue Lagoon (o Laguna Azul); acercarse a la Torre de Santa María, que se encuentra en el punto más alto de la isla, en el suroeste; o llegar en barco hasta las cuevas de Santa María, en la bahía que lleva el mismo nombre, son algunos planes para hacer con los más pequeños. 

Parques acuáticos y temáticos

La isla de Malta alberga parques temáticos y acuáticos que harán las delicias de los más pequeños. Una gran opción para pasar un día en familia lleno de diversión y aprendizaje. 

Popeye Village Fun Park. Cerca de la población de Il-Mellieħa se ubica este pequeño pueblo construído para rodar la película de Popeye, de 1980 y protagonizada por el actor Robbin Williams en el papel del famoso dibujo animado amante de las espinacas. Un gran plan para que los niños disfruten visitando esta ciudad de dibujos, donde los propios personajes van paseando por el pueblo y hay barra libre de palomitas. 

Playmobil Fun Park. Casi en la punta más al sur de Malta se encuentra el Playmobil Fun Park, el paraíso de los niños amantes de los muñecos Playmobil. Además de poder visitar la fábrica donde se hacen los juguetes, hay una zona exterior y otra interior de grandes dimensiones con juguetes de tamaños para diferentes edades. 

Mediterraneo Marine Park. Delfines, leones marinos, cocodrilos, etcétera, son algunos de los animales que se pueden observar en este parque enfocado al Mediterráneo y a la conservación del mar. Está en la localidad de Naxxxar, al noreste de Malta.

Splash and fun water park. En Naxxxar también está el mayor parque acuático de Malta. El Splash and fun water park tiene todo tipo de atracciones acuáticas para todas las edades y hay todo tipo de servicios para comer o descansar. Un plan ideal para un día de diversión con el agua como protagonista. 

Recomendaciones y consejos

Si voláis desde España, compañías low cost como Vueling, Easyjet o Ryanair ofrecen viajes con frecuencia semanal. Otras compañías como Iberia o Lufthansa también vuelan desde España al archipiélago maltés. 

Si viajáis en verano a Malta, prepararos para altas temperaturas y un calor húmedo. Es, además, temporada alta por lo que quizá os costará más el alojamiento y conseguirlo. Sin embargo, es el momento de mayor fiesta nocturna. En este periodo la actividad suele pararse entre las 13.00 y las 16.00, quizá el momento para echarse una buena siesta. 

Si visitáis Malta en invierno, las temperaturas son suaves -una media de 15 grados centígrados-, pero hay viento y es cuando más llueve. Es un buen momento para encontrar precios económicos en hospedajes y para visitar las islas sin tanta afluencia de turistas. 

Al ser un país miembro de la Unión Europa tan solo tenéis que llevar DNI y pagar en euros. Para entenderse con la población local basta con saber inglés (o italiano). 

En cuanto a productos para bebés y los más pequeños, en Malta se puede comprar todo: leche de fórmula, pañales, biberones, empapadores, etcétera. Conviene, eso sí, llevar repelente para los mosquitos, aunque no supone un problema.