Aprovechar un viaje a Marruecos para conocer varias ciudades o rincones turísticos es una excelente opción. Por este motivo, te recomendamos realizar algunas excursiones desde Agadir que te brinden la oportunidad de conocer otras facetas del país magrebí. Si has elegido Agadir como tu lugar de vacaciones, seguro que eres un apasionado del mar o de los destinos costeros. Siguiendo esta línea de preferencias, te interesa conocer algunas poblaciones cercanas que también ofrecen un ambiente muy auténtico, buenas playas, y excelentes condiciones para la práctica de deportes como el surf o el windsurf. Toma nota de las poblaciones de Taghazout, Amesnaz, Tamri e Imsouane. Un poco más lejos se sitúa Essaouira, pero es también una excursión idónea desde Agadir ya que ofrece, además de surf, recorridos culturales por una medina protegida por la Unesco y un bello entorno natural.
Si aún no conoces Marrakech, lo ideal es hacer un combinado con Agadir de forma que puedas pasar una noche en la ciudad y así no tener que hacer 500 kilómetros (ida y vuelta) en un día. Esta ciudad representa la tradición marroquí, y como tal reúne todos los ingredientes propios de la cultura del país: mezquitas, palacios, numerosos zocos, y palmerales. Es interesante hacer noche para vivir en primera persona cómo la ciudad se transforma al atardecer y la plaza de Jemaa el-Fna cobra vida entre encantadores de serpientes, aguadores, tatuadores de henna, puestos de zumos de naranja y de comida rápida que llenan el ambiente del humo de las brasas.
Y si te atraen los paisajes inhóspitos, no dudes en organizar excursiones al desierto desde Agadir porque pueden convertirse en experiencias inolvidables.
- Marrakech, guardián de las tradiciones
- Taghazout, meca del surf
- Amesnaz, la playa tranquila
- Tamri, surf y plataneras
- Imsouane, ideal para el buceo y el surf
- Essaouira, entre zocos y surf
- Dónde dormir en Agadir
Marrakech, guardián de las tradiciones
Si no conoces Marrakech, esta ciudad es una de las candidatas para hacer una excursión desde Agadir aunque la separan unos 250 kilómetros. Recorrer esta ciudad es introducirse en un universo de emociones donde descubrir el encanto de su medina, la algarabía de sus zocos, y sus pequeños oasis bien nutridos de palmeras. Algunas visitas que no debes perderte en Marrakech son la plaza de Jemaa El-Fna, epicentro de la vida en la ciudad; la mezquita de Koutubia, con un precioso minarete de 77 metros de altura; el palacio de la Bahía; los Jardines de la Menara, cuyo estanque rodeado de olivos al atardece cobra magia; y los Jardines de Majorelle.
Además de la visita al casco antiguo, recorre también las nuevas avenidas con sus mansiones y exclusivas firmas internacionales. Es interesante conocer las dos caras de la moneda.
Taghazout, meca del surf
Taghazout, situada apenas a 20 kilómetros de Agadir se vive un verano eterno. Cualquier momento del año es bueno para descubrir la faceta de vacaciones de antiguo pueblo de pescadores convertido en una de las mecas del surf de Marruecos. Su ubicación parece un escenario de película donde las miradas oscilan entre el profundo azul del Atlántico y las montañas del Alto Atlas. Los amantes de los deportes acuáticos descubrieron este destino allá por los años setenta y aún sigue contando con una excelente reputación. Cómo resistirse a combinar el encanto de esta localidad y perderse entre sus callejuelas, comer ricos platos marroquíes con vistas al mar, ver sus barcas varadas en la arena y observar cómo las montañas simplemente arropan su trazado urbano.
Amesnaz, la playa tranquila
No es necesario alejarse mucho de Agadir, unos 30 kilómetros, para conocer la pequeña población de Amesnaz. No es tan frecuentada como Taghazout pero ahí radica también parte de su encanto. Sus preciosas playas protegidas por la orografía del cabo Rhir también son visitadas por los deportistas, allí acuden amantes del windsurf, el kitesurf y el surf. Una curiosidad de esta playa son sus piedras y cactus sobre la arena, y alguna que otra barca que parece estar esperando la ocasión para hacerse a la mar.
Tamri, surf y plataneras
Otra de las excursiones desde Agadir que te puede interesar es la que conduce a la playa de Tamri, a unos 50 kilómetros. La población de Tamri está situada al norte del cabo Rhir y brinda una experiencia con toque rural, más relajada que las anteriores. Sus bahías y playas no están junto al núcleo poblacional –que se sitúa en el interior entre plataneras– e invitan a ser recorridas casi en soledad disfrutando de dunas, cuevas y acantilados de curiosas formas. Los surfistas también han descubierto el potencial de sus olas y se acercan a este lugar principalmente durante los meses estivales. Observar a los pescadores, ver cómo llegan los barcos con su pescado recién capturado, visitar alguna cooperativa de aceite de argán o degustar la gastronomía local son actividades imprescindibles en Tamri.
Imsouane, ideal para el buceo y el surf
A unos 70 kilómetros de Agadir se sitúa Imsouane, otro bello rincón de la costa atlántico donde disfrutar del contacto con el mar, los deportes acuáticos y la buena gastronomía. En esta población marinera la actividad pesquera siempre ha sido el principal recurso pero el turismo de surf y las vacaciones playeras se han convertido en buenas fuentes de ingresos. Los amantes de los deportes que dependen del viento suelen acudir en invierno ya que se dan las condiciones más propicias. Es un buen lugar también para la pesca deportiva y el buceo. Y si no eres deportista, sólo por recorrer sus extensos arenales y disfrutar del ambiente, ya merecería la pena elegir Imsouane como una excursión desde Agadir.
Essaouira, entre zocos y surf
Un poco más alejada de Agadir, a unos 175 kilómetros, la ciudad de Essaouira es uno de los destinos marroquíes que se deben visitar en algún momento de nuestra vida. Esta ciudad de unos 80.000 habitantes sigue conservando el encanto de un pueblo pero con las ventajas que ofrece su dimensión real. En una excursión desde Agadir lo más interesante es centrarse en sus principales atractivos. En primer lugar, recorrer su medina, que ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, con sus puertas fortificadas, plazoletas, laberinto de callejuelas y talleres artesanos. Visitar su zoco, mucho más tranquilo que el de otras ciudades marroquíes, donde encontrarás artesanía de distinto tipo (telas, cerámicas, forja) y productos como el aceite de argán.
Tampoco hay que olvidar el Castelo Real, las bien conservadas murallas, y el puerto de Essaouira, que regala la imagen más pintoresca con sus decenas de barcas azules alineadas.
Te recomendamos comer en la plaza de Mulay El Hassan, epicentro de la vida local y un excelente lugar donde tomar el pulso a la ciudad. Y, por último, reserva un rato para relajarte en las playas o practicar surf.
Dónde dormir en Agadir
Junto a una playa de 12 kilómetros y en pleno corazón de Agadir se sitúa el hotel Allegro Agadir, un cuatro estrellas idóneo para disfrutar de esta ciudad marroquí y hacer excursiones por los alrededores. Este hotel, totalmente reformado, ofrece la comodidad de sus 321 habitaciones, amplias y con una decoración moderna. Este resort de playa es idóneo tanto para los que viajan en pareja, como con amigos o en familia, ya que cuenta en sus instalaciones con incentivos para todos ellos.
Su gran piscina, jardines, restaurantes, snack bar, discoteca y programa de entretenimiento son el complemento perfecto a las visitas o excursiones que organices. Si viajas con niños, te interesará conocer el Mini Club, que dispone de piscina y jardín exclusivo para los más pequeños.