Aunque Casablanca no es una de las cuatro ciudades imperiales de Marruecos ya que nunca fue capital del país, esto no la exime de tener un Palacio Real entre sus calles. Y es que el Palacio Real de Casablanca es uno de los monumentos más bellos de la ciudad.
Sin ser tan antigua como otras ciudades del país, Casablanca vivió un fuerte desarrollo durante los siglos XIX y XX, gracias a la industrialización y a su poderoso puerto. Hoy en día está considerada la capital económica de Marruecos. Fruto de este desarrollo, la construcción del Palacio Real en los años 20, en plena época del Protectorado francés, fue todo un mensaje por parte del rey, que quería tener plaza en la floreciente ciudad.
Hoy, Casablanca es una enorme urbe con más de tres millones de habitantes. Una importante plaza en la costa atlántica de Marruecos que no pasa desapercibida para la monarquía alauí, presente aquí en su Palacio Real.
- Historia
- Visitar el Palacio Real de Casablanca
- Qué ver en los alrededores
- Donde alojarse en Casablanca
Historia
El Palacio Real de Casablanca se construyó en los años 20 del siglo pasado bajo la dirección de los hermanos Pertuzio, Louis-Paul y Felix-Joseph, arquitectos de la época que trabajaron para el Protectorado francés y formaban parte de la dirección del plan que desarrolló la ciudad de Casablanca. Su rúbrica está en varios edificios. Ambos se convirtieron en los arquitectos personales del rey Mohammed V.
El estilo del edificio es árabe-musulmán contemporáneo y cuenta con magníficos jardines mediterráneos en su interior, así como imponentes ventanales e impresionantes paredes exteriores. Pero lo que más destaca es la grandiosidad de la puerta principal del palacio, un gran pórtico de tres arcos de herradura, con la puerta central de color dorado metalizado y esculpida con un sinfín de patrones geométricos tan característicos de esta arquitectura. Todo ello coronado por un tejado verde. Por ello merece la pena acercarse hasta aquí.
El edificio está notablemente vigilado, protegido por guardias en todo el perímetro, que convierten la zona en un lugar de alta seguridad.
Visitar el Palacio Real de Casablanca
No es posible visitar el Palacio Real de Casablanca. Actualmente, el edificio es una de las residencias oficiales de la casa real alauí cuando el monarca visita la ciudad, por lo que no se permite la entrada al público.
Sí es posible acercarnos hasta la entrada, con la enorme explanada que precede al acceso principal del palacio.
Por otro lado, el Palacio Real es sede de determinadas recepciones oficiales. Famosa fue la que acogió a Juan Pablo II en su visita del año 1985, durante el reinado de Hassan II, la primera que hacía el entonces Papa a un país islámico. En el Palacio también se organizó la cumbre fundacional de la Organización de la Conferencia Islámica de 1969, una organización que aúna a 57 países del mundo musulmán.
Qué ver en los alrededores
El Palacio Real de Casablanca se encuentra ubicado en el barrio de Habous, también conocido como la Nueva Medina. Esta zona de la ciudad se desarrolló en la misma época que el Palacio Real, los años 20 del siglo pasado, durante el Protectorado francés.
El nombre Habous trata de reconstruir una medina con aspecto moderno, basada en las reglas del urbanismo francés pero respetando las tradiciones marroquíes. Hoy, es un barrio pintoresco, un gran bazar, el hogar de numerosos artesanos que cuentan con puestos y bazares donde comerciar.
También es zona de librerías especializadas en libros árabes, como se puede comprobar en el cercano bulevar Victor Hugo, que cuenta con varios de estos establecimientos.
Al lado del Palacio Real está la antigua Mahkama du Pacha, un monumental edificio administrativo de estilo hispano-morisco que sirvió de palacio de justicia, residencia del pasha (gobernador) y cárcel. Cuenta con varios patios, algunos de ellos al estilo del Patio de los Leones de la Alhambra de Granada.
No muy lejos también está el Jardín Murdoch o Parque Isesco, el segundo espacio verde más grande del centro tras el Parque de la Liga Árabe.
Sin duda, el entorno del Palacio Real es muy interesante para explorar.
Donde alojarse en Casablanca
Como ciudad con atractivo turístico, Casablanca cuenta también con importantes hoteles y alojamientos. En pleno centro, podemos encontrar los hoteles Barceló Casablanca y Barceló Anfa Casablanca, dos modernos establecimientos que te sorprenderán.
El Barceló Casablanca es un hotel de cuatro estrellas ubicado en el bulevar de Anfa, a escasos 15 minutos caminando del Parque de la Liga Árabe y a media hora de la Mezquita de Hassan II. Precisamente, algunas habitaciones del hotel gozan de inmejorables vistas sobre la mezquita, la más grande del mundo. Junto a ellas, incorpora un moderno restaurante de gastronomía marroquí, el vanguardista B-Bar e instalaciones para reuniones de empresa.
El vecino Barceló Anfa Casablanca está unos metros más adelante, también en el bulevar Anfa. Este hotel es de categoría cinco estrellas, lo que lo convierte en un establecimiento de lujo para una estancia en Casablanca. El edificio cuenta 206 habitaciones de estilo B-Room, un completo gimnasio con spa, restaurante, bares, salas para grandes eventos y una de las joyas, una magnífica terraza con piscina.
Ambos hoteles constituyen dos alojamientos ideales para descubrir Casablanca e, incluso, establecerse aquí como base para explorar otras ciudades cercanas como Rabat, Meknés o Marrakech.