Es todo un símbolo del Tánger más internacional, bohemio y libre. En 2021 cumplió su centenario y a sus mesas se han sentado personajes tan ilustres como The Rolling Stones o los escritores Paul Bowles, Juan Goytisolo y William S. Burroughs. Y es que hubo un tiempo en que el Café Hafa actuó como un poderoso imán de personajes bohemios y creativos de todo el mundo.
Ya queda poco en el Café Hafa de su identidad contracultural, pero sigue siendo una referencia para cualquier viajero curioso que llega a Tánger. No es un lugar lujoso ni mucho menos. Se trata de una edificación tradicional con unas vistas, eso sí, que quitan el hipo. Además de un sencillo espacio interior, con mesas de azulejos y macetas de barro, tiene una gran terraza escalonada en varios niveles que miran al estrecho de Gibraltar.
100 años del Café Hafa
Fue en 2021 cuando el Café Hafa de Tánger celebró sus 100 años de vida. Un aniversario redondo que obligó a hacer historia desde aquel día del siglo pasado en que un joven tangerino de nombre Mhamed Alouch (1901-1999), apasionado de los gatos, decidió abrir este local como un espacio de ocio para sus vecinos del barrio del Marshan. Lo que no pudo imaginar es que su café iba a ser el foco de la colonia extranjera que entonces vivía en Tánger y de los muchos artistas e intelectuales que entonces visitaban la ciudad.
El escritor Juan Goytisolo, que pasaba largas temporadas en Tánger, inmortalizó el Café Hafa de Tánger (Marruecos) en su libro “Reivindicación del conde Don Julián” y en un programa de televisión. Otros ilustres clientes fueron The Rolling Stones, el filósofo francés Bernard-Henri Levy y el pintor chileno Claudio Bravo. Hasta el ex ministro francés de Cultura Jack Lang se compró una casa antigua al lado del Hafa Café.
No hay que olvidar que el cantautor Luis Eduardo Aute dedicó a este símbolo de Tánger una bonita canción, “Hafa Café”, fruto de su estancia en la ciudad. En este tema, que aparece en su disco “Slowly” de 1992, recrea el ambiente de este local icónico de Tánger e incluye referencias literarias a “El cielo protector”, la novela más conocida de Paul Bowles, que también fue llevada al cine. Otros escritores que pisaron el Hafa fueron Jean Genet (1910-1986), Jack Kerouac (1922-1969), Tennessee Williams (1911-1983), Truman Capote (1924-1984) y Allen Ginsberg (1926-1997).
El café Hafa de Tánger en la actualidad
Hoy apenas queda nada del café bohemio e intelectual de otro tiempo, si bien son muchos los viajeros que visitan el local por su singular pasado. Su actual propietario, Abdulrahman, es un hijo adoptivo del fundador y lleva trabajando en el establecimiento desde que tenía 16 años.
Y es que, a pesar de que los intelectuales y los bohemios ya no hacen parada en el Café Hafa, sigue siendo un icono de Tánger y sigue mirando al mar, a ese punto exacto donde se encuentran el Mediterráneo y el Atlántico. Y continúa recibiendo a un público variopinto que va desde jóvenes locales que comparten juegos de mesa hasta viajeros internacionales llegados de todo el mundo.
Otras cafeterías en Tánger
Pero el Café Hafa no es el único café tradicional que existe en Tánger. Hay muchos otros que bien merecen una visita. Te recomendamos los siguientes:
Gran Café de París (Place de France). Situado frente al palacio y los jardines del Consulado de Francia, aquí también se reunían los escritores que dieron fama al Café Hafa (Paul y Jane Bowles, Genet, Capote, Tennessee Williams, Burroughs…), además de espías de la Segunda Guerra Mundial. Construido en 1920, este local cuenta con espejos y ventanales, con columnas art decò forradas de madera y una terraza. El que fuera un día moderno café hoy se ha convertido en un interesante local de aire decadente.
Gran Café Central (Zoco Chico). Fue fundado nada menos que en 1813 y desde su terraza uno se empapa del bullicio de la ciudad antigua de Tánger. También fue parada de intelectuales y bohemios llegados de Europa y América, hasta el punto de que William S. Burroughs afirmó que éste era uno de sus cafés favoritos. Son célebres sus tes a la menta.
Café Panorama (Av. Mohammed VI). Este café rinde honor a su nombre. Con relajantes vistas al mar, está muy bien valorado, tanto por los locales como por los viajeros que llegan a Tánger y lo descubren. Tiene un servicio excelente y su carta es muy atractiva. No dejes de probar su pastel de queso, sus tostadas de huevos con jamón y sus crepes de chocolate.
Café Ibn Batouta (Rue Sekkaya Jdida). Ubicado en la antigua medina de Tánger, tiene varias plantas y una terraza a dos alturas desde la que se divisa todo el mar de terrazas de la vieja ciudad. Es muy frecuentado por jóvenes y estudiantes.