Al pie de las majestuosas Montañas Hajar y entre exuberantes palmerales datileros encontramos Nizwa, antigua capital del Imanato de Omán en los siglos VI y VII y una de las joyas culturales del país. Esta ciudad histórica, una de las primeras en la región en adoptar el Islam, es un tesoro de arquitectura, tradiciones y paisajes impresionantes, una ventana a la autenticidad y tradición de Omán donde los vestigios del pasado se entrelazan con la vida moderna en un tapiz único de experiencias. Desde su imponente fortaleza del siglo XVII y su hermosa mezquita hasta su exquisita gastronomía y bullicioso zoco, famoso por su plata y sus dagas khanjar, Nizwa ofrece una experiencia inolvidable para los viajeros curiosos que quieren salirse de las principales rutas turísticas.

  1. Historia de Nizwa
  2. La fortaleza de Nizwa
  3. La Mezquita de Nizwa
  4. Otros lugares de interés
  5. Dónde comer
  6. Dónde alojarse en Nizwa

Historia de Nizwa

Nizwa, fundada en el siglo VI, ha sido durante mucho tiempo un importante centro cultural, religioso y comercial en Omán. Durante siglos, la ciudad ha sido testigo de la ascensión y caída de dinastías, gobernantes y civilizaciones, dejando tras de sí un legado histórico rico y diverso. Capital del antiguo Imanato de Omán en los siglos VI-VII, ha desempeñado un papel crucial en la historia del país por su ubicación estratégica en las rutas comerciales entre el sur de Arabia, Persia e India, que la convirtió en un importante enclave comercial y cultural. Por su profundo arraigo en la fe islámica, la ciudad está surcada de mezquitas de renombre como su Yama o Gran Mezquita del Sultán Qaboos o la mezquita So’al, construida en el siglo IX d. C.

La fortaleza de Nizwa

Una visita obligada en Nizwa es su impresionante fortaleza, construida a lo largo de doce años en el siglo XVII por el Sultán Bin Saif Al Yaruba. Esta fortaleza de piedra color ocre, con sus altas murallas y sus torres de vigilancia, se alza majestuosamente sobre la ciudad, ofreciendo desde su enorme torre circular de 30 metros de altura y 36 de diámetro vistas panorámicas del paisaje circundante. En su interior, los visitantes pueden explorar sus intrincados pasillos, cámaras y museos, que albergan una impresionante colección de artefactos históricos y exhibiciones sobre la historia y la cultura de la región. La fortaleza de Nizwa es un testimonio tangible del pasado glorioso de la ciudad y una ventana a su fascinante historia.

La Mezquita de Nizwa

Otro punto destacado de Nizwa es su hermosa mezquita Al Qala´a, situada en el centro del casco antiguo de la ciudad y casi indistinguible de la fortaleza anexa. Construida originalmente en el siglo VII, aunque renovada, esta mezquita está entre las más antiguas del mundo y es un magnífico ejemplo de la arquitectura islámica, con su impresionante cúpula verde y su minarete alto y esbelto desde el que el almuecín anuncia la llamada a la oración. Los visitantes pueden admirar los detalles intrincados de la mezquita mientras exploran su interior, que incluye una amplia sala de oración y un hermoso patio ajardinado. La mezquita de Nizwa es un importante centro religioso y cultural en la ciudad, donde los fieles se reúnen para la oración y la reflexión, y ofrece a los visitantes una visión única de la intensa vida religiosa de Omán.

Gran Mezquita de Nizwa, Sultanato de Omán

Otros lugares de interés

Además de su fortaleza y mezquita, Nizwa esconde algunas otras gemas que merece la pena explorar. Los viajeros pueden perderse en el Zoco de Nizwa, donde comprar una variedad de productos locales, desde artesanías tradicionales de plata y cerámica hasta dátiles (se cultivan 40 especies diferentes en los alrededores), especias exóticas, productos frescos y khanjar, las tradicionales dagas omaníes que son uno de los símbolos del país. Los viernes, merece la pena visitar una de las estampas típica de Nizwa, el mercado de ganado, una experiencia única en la que ganaderos y comerciantes de todas partes del país se dan cita trayendo consigo sus cabras, vacas y camellos.

También pueden visitar el Museo de Nizwa, que alberga una impresionante colección de artefactos históricos y exhibiciones sobre la historia y la cultura de la región. Para los amantes de la naturaleza, los alrededores de Nizwa ofrecen numerosas oportunidades para practicar senderismo y explorar los paisajes montañosos y desérticos de Omán.

Dónde comer

Después de un día de exploración, los viajeros pueden disfrutar de una deliciosa comida en uno de los muchos restaurantes de Nizwa. El restaurante Al Aktham ofrece auténtica cocina omaní, con platos como el shuwa, un cordero cocido lentamente en un horno subterráneo, y el majboos, un arroz especiado con carne o pescado. Para una experiencia más internacional, el restautante Tamrah ofrece una variedad de platos internacionales en un ambiente elegante y acogedor.