El cenote de Hoyo Azul es el atractivo natural más famoso del parque recreativo y de aventuras Scape Park, ubicado en el área de Cap Cana, y una de las visitas más demandadas de Punta Cana. Un escenario natural realmente mágico, de aguas frescas y cristalinas, en el que se puede nadar, pasear por la selva y los jardines que lo rodean, y disfrutar de las distintas atracciones dentro del mismo parque. Vive un buen día de emociones y sensaciones, en familia o con amigos, visitando este divertido lugar en el que se combinan acción, aventura, naturaleza, cultura, gastronomía y mucho más.
El cenote de Punta Cana: un tesoro natural
Formaciones geológicas características de los suelos kársticos de algunas zonas del Caribe, desde la Península de Yucatán hasta las Antillas, los cenotes son todo un tesoro natural. Estas hermosas albercas naturales se forman cuando el techo de un río subterráneo o cueva inundada se desploma, dejando al descubierto sus aguas. Según su edad, hay varios tipos: los más antiguos están prácticamente a cielo abierto y los más jóvenes suelen conservar buena parte de su cúpula o techo.
Además de su espectacular fisonomía, los cenotes se encuentran generalmente enmarcados por una exuberante vegetación, dando lugar a paisajes realmente encantadores. Toda la riqueza de flora y fauna de la selva virgen se suma a la impactante imagen de estas cuevas inundadas para crear lugares asombrosos. No es casualidad que las civilizaciones prehispánicas, en especial los antiguos mayas pero también los taínos dominicanos, los consideraran sitios mágicos y sagrados.
En particular, Hoyo Azul tiene unos 12 metros de profundidad y está ubicado al pie de un acantilado de piedra caliza de unos 75 metros de altura. La vegetación que lo rodea es un buen ejemplo del típico bosque tropical bajo de esta zona de la República Dominicana. El fondo rocoso del cenote es plenamente visible gracias a sus aguas totalmente transparentes y la intensa tonalidad azul que le da nombre al lugar se debe a un fenómeno de haloclina formado por distintas capas de agua de diferente salinidad. En resumen, Hoyo Azul es uno tesoro natural que vale mucho la pena visitar.

Un día de ecoturismo y aventura en Hoyo Azul
En general, Punta Cana ofrece muchas opciones para los amantes del ecoturismo y la aventura, como la Reserva Ecológica Ojos Indígenas, el Bávaro Adventure Park o el propio Scape Park de Cap Cana. Para aprovechar al máximo cualquiera de estas opciones, es importante preparar bien la vista.
Al tratarse de un parque temático, Hoyo Azul tiene la ventaja de contar con todo lo necesario para vivir una experiencia inolvidable, así que una vez dentro del Scape Park solo hay que seguir las indicaciones y disfrutar. En concreto, para llegar hasta el cenote hay que recorrer un sendero en medio de la selva, cruzar un divertido puente colgante y atravesar algunas pasarelas de madera que desembocan en el propio ojo de agua. Una vez ahí, se puede entrar en el cenote por dos escaleras o de clavado desde una plataforma. Disfrutar de sus aguas turquesa es un auténtico placer.
Más emociones y sensaciones
Por el lado más activo, el resto del parque ofrece una emoción tras otra. Empezando por una docena de tirolesas y hamacas de agua que hacen volar a los visitantes para terminar “acuatizando” dentro de una gran alberca rodeada de cuevas y cascadas, o por encima de la copa de los árboles a lo largo de un enorme acantilado llamado El Farallón, que tiene una altura promedio de 75 metros.
Una de las mejores aventuras de Scape Park es la que ofrece la cueva Iguabonita, una red subterránea de túneles y cavernas. El recorrido por este increíble laberinto de piedra en las entrañas de la tierra muestra todo tipo de extraordinarias formaciones geológicas, desde estalactitas y estalagmitas hasta columnas y “tragaluces” naturales que iluminan dramáticamente el interior de las cuevas. También bajo la superficie, la cueva Las Ondas, utilizada por los antiguos taínos para realizar rituales sagrados, cuenta con un hermoso manantial subterráneo en el que se puede nadar.

Tiempo para descubrir
Además de la adrenalina, en el entorno del Hoyo Azul también se tiene la oportunidad de aprender y descubrir muchas cosas sobre este rincón de Punta Cana. Un ejemplo es la Ruta Cultural, un conjunto de senderos que ofrecen una interesante combinación entre historia y naturaleza, con reproducciones de un bohío, la típica vivienda de los indígenas taínos, de una casa colonial española, de un palenque como los que construían los esclavos africanos y de una pintoresca casa campesina dominicana.
También por el lado más educativo, pero sin perder la diversión, la zona de El Rancho invita a convivir con varios animales de granja, desde burritos hasta chivitas. Del mismo modo, en el Animalario se puede ver, en su hábitat natural, a varios ejemplares de iguana rinoceronte, una especie endémica de la isla de La Española, así como a juguetones monos ardilla y capuchinos, y coloridos loros y guacamayas. Una buena oportunidad para enseñarle a los más pequeños de la familia la importancia de la vida silvestre.
Naturaleza, aventura, tesoros culturales, diversión, relax… el Hoy Azul y su entorno ofrecen todo eso y más. Un plan perfecto para disfrutar de un día de nuestras vacaciones en Punta Cana, en cualquier época del año. Bueno, quienes tienen la oportunidad de viajar en temporada baja, es decir, fuera del periodo de vacaciones de verano, la época de Navidad y Año Nuevo, o en Semana Santa, seguramente podrán disfrutar de este maravilloso lugar con menos gente y menos colas; una situación muy común en cualquier destino turístico importante.