Kanchanaburi, una tranquila provincia en el oeste de Tailandia, se ha convertido en un destino emblemático gracias al legendario Río Kwai y su famoso puente, inmortalizado en la película ‘El Puente sobre el Río Kwai’. Este lugar selvático y apartado, que combina una historia conmovedora con paisajes impresionantes y una rica cultura local, atrae a viajeros de todo el mundo que buscan explorar su pasado bélico, sumergirse en la exuberante naturaleza del Parque Nacional de Erawan y reflexionar sobre los trágicos eventos que marcaron su historia. Desde recorrer el puente hasta explorar los memoriales y museos dedicados a la Segunda Guerra Mundial, Kanchanaburi ofrece una experiencia que es tanto emotiva como fascinante.

  1. Historia y contexto cinematográfico: de la Segunda Guerra Mundial a la legendaria película de David Lean
  2. Cómo llegar: travesía en tren desde Bangkok, la opción para los más aventureros
  3. No todo es el puente en Kanchanaburi: qué puedes ver en tu visita
  4. Visitas cercanas: excursiones a las cascadas de los parques nacionales y al terrorífico sendero de Hellfire Pass

Historia y contexto cinematográfico: de la Segunda Guerra Mundial a la legendaria película de David Lean

Kanchanaburi y el Río Kwai están íntimamente ligados a uno de los episodios más oscuros de la Segunda Guerra Mundial: la construcción del «Ferrocarril de la Muerte». Durante la ocupación japonesa de Tailandia, miles de prisioneros de guerra aliados y trabajadores asiáticos fueron forzados a construir en tiempo récord un ferrocarril que conectaría Tailandia con Birmania (la actual Myanmar). La construcción, llevada a cabo en condiciones extremas y con una brutalidad inconcebible, resultó en la muerte de más de 100,000 personas. El Puente sobre el Río Kwai, parte crucial de este ferrocarril, se convirtió en un símbolo de sufrimiento y resistencia.

Puente del río Kwai

Este trágico capítulo de la historia fue llevado a la pantalla grande en 1957 con la película «El Puente sobre el Río Kwai», dirigida por David Lean. Aunque la película tomó ciertas libertades artísticas, capturó la atención mundial y colocó a Kanchanaburi en el mapa turístico global. Hoy en día, el puente y el ferrocarril son visitados por miles de personas cada año, no solo por su valor histórico, sino también por su resonancia cultural.

Cómo llegar: travesía en tren desde Bangkok, la opción para los más aventureros

Kanchanaburi se encuentra a unos 130 kilómetros al oeste de Bangkok, lo que lo convierte en un destino de fácil acceso desde la capital tailandesa. Existen varias formas de llegar a Kanchanaburi, dependiendo del presupuesto y las preferencias del viajero.

La opción más popular es tomar un autobús desde la terminal de autobuses del sur de Bangkok (Sai Tai Mai). Los autobuses salen con frecuencia a lo largo del día y el viaje dura aproximadamente tres horas. Para aquellos que prefieren un viaje más cómodo y rápido, también hay minibuses que parten desde diferentes puntos de Bangkok, como Khao San Road, y llegan directamente a Kanchanaburi.

Ferrocarril de la Muerte con tren Lugar famoso en Kanchanaburi Tailandia

Otra opción interesante y pintoresca es tomar el tren desde la estación de Thonburi en Bangkok. El viaje en tren, que también dura alrededor de tres horas, ofrece vistas impresionantes de la campiña tailandesa y cruza el famoso puente sobre el Río Kwai. Para los más aventureros, también es posible alquilar un coche y conducir hasta Kanchanaburi, lo que permite explorar a su propio ritmo y detenerse en puntos de interés en el camino.

No todo es el puente en Kanchanaburi: qué puedes ver en tu visita

La visita a Kanchanaburi ofrece una combinación de historia, naturaleza y cultura. El Puente sobre el Río Kwai es, sin duda, la principal atracción. Aunque el puente original fue destruido durante la guerra por la aviación norteamericana, la estructura actual fue reconstruida y sigue en funcionamiento, permitiendo a los visitantes caminar sobre él y reflexionar sobre su pasado. Muy cerca del puente se encuentra el Museo del Ferrocarril de la Muerte, que ofrece una visión detallada y conmovedora de las condiciones a las que se enfrentaron los prisioneros de guerra durante la construcción del ferrocarril.

El Cementerio de Guerra de Kanchanaburi, que alberga las tumbas de miles de prisioneros de guerra muertos durante la construcción del ferrocarril, es otro lugar esencial para visitar. Aquí, la serenidad del lugar contrasta con la tragedia que representa, ofreciendo un espacio para la reflexión y el recuerdo. También merece la pena visitar el Museo de Guerra JEATH, que recrea las condiciones y las viviendas de los campos de prisioneros y expone artefactos, fotografías y relatos de supervivientes.

Cementerio de guerra de Kanchanaburi

Más allá de la historia bélica, Kanchanaburi ofrece una naturaleza exuberante que invita a la exploración. El Parque Nacional de Erawan, famoso por sus refrescantes cascadas de siete niveles, es un lugar ideal para aquellos que buscan relajarse en la naturaleza. Sus aguas cristalinas y senderos rodeados de selva hacen de este parque un refugio para quienes desean un respiro del bullicio urbano.

Y, por supuesto, tratándose de Tailandia, no puede faltar una visita a algún templo y al mercado nocturno de la ciudad, donde probar deliciosa comida tailandesa a precios irrisorios. El Wat Ban Tham, con unas empinadas escaleras que llevan directas a la boca de un dragón, ofrece espectaculares vistas del paisaje, mientras que el el monasterio de la cueva del Tigre ol Wat Tham Seua, a las afueras de Kanchanaburi, alberga un Buda de 14 metros de altura.

Visitas cercanas: excursiones a las cascadas de los parques nacionales y al terrorífico sendero de Hellfire Pass

Además de los puntos históricos y naturales de Kanchanaburi, hay varias excursiones cercanas que ofrecen una experiencia más completa de la región. Una de ellas es la visita a las Cascadas Sai Yok Noi y Sai Yok Yai, ubicadas en el Parque Nacional Sai Yok. Estas cascadas, menos concurridas que las de Erawan, ofrecen un entorno tranquilo donde los visitantes pueden nadar, hacer picnics o simplemente disfrutar del sonido del agua cayendo.

Hermosa cascada de bosque profundo en la provincia de Kanchanaburi, Tailandia.

Otra visita imprescindible es el Hellfire Pass, un corte en la roca que formaba parte del Ferrocarril de la Muerte y que fue excavado a mano por los prisioneros de guerra. Hoy en día, el Hellfire Pass Memorial Museum y el sendero adyacente permiten a los visitantes comprender mejor el sacrificio y sufrimiento de aquellos que trabajaron en esta ardua tarea.

Para los amantes de la naturaleza, una excursión al Parque Nacional de Erawan es altamente recomendada. Aquí, como ya hemos mencionado, la atracción principal son las cascadas de Erawan, una serie de caídas de agua que descienden en siete niveles, cada una con su propia piscina natural de color turquesa. Es un lugar perfecto para nadar, hacer senderismo y disfrutar de la exuberante selva tailandesa.