La siempre concurrida playa del Duque, en la turística zona de Costa Adeje, en Tenerife Sur, es el lugar ideal para aquellos que deseéis disfrutar de unas vacaciones clásicas de turista: tumbarse a la bartola en la playa teniendo todos los servicios imaginables a dos pasos. Eso sí, en un entorno con mucha clase. Y es que esta larga playa de arena dorada y aguas limpias y tranquilas, galardonada con el distintivo de ‘bandera azul’, se encuentra junto a un elegante y agradable paseo lleno de cafeterías chic, prestigiosos restaurantes, tanto de cocina internacional como canaria, y boutiques de moda. En los alrededores encontramos también varios centros comerciales y hoteles de cinco estrellas. La nota histórica la pone el castillo del Duque que domina la playa en su extremo este. De su curiosa historia procede el nombre del lugar.
- Una playa con todas las comodidades y poco viento
- Bahía del Duque y el castillo del duque de Abrantes
- Dónde comer en la playa del Duque
- A dos pasos de centros comerciales y hoteles de lujo
Una playa con todas las comodidades y poco viento
Playa del Duque es el paraíso del veraneante que no quiere demasiados sobresaltos. Como playa con el distintivo de ‘bandera azul’, cuenta con todos los servicios necesarios: socorristas, duchas, vestuarios, aseos, un servicio de hamacas y sombrillas, aparcamientos y un acceso con rampas y pasarelas habilitado para personas minusválidas.
Además, en la misma playa pueden contratarse todo tipo de diversiones acuáticas, desde los clásicos patines a pedales y las “bananas” hasta nuevas atracciones para descargar adrenalina como el parascending (parapente arrastrado por un barco), el flyboard (una tabla aerodeslizadora a propulsión hidráulica) o el flyfish (una gran colchoneta hinchable arrastrada por un barco).
Por si fuera poco, playa del Duque se encuentra al suroeste de la isla, a resguardo de los vientos que suelen azotar otras partes de la costa, y está protegida por una escollera que frena el oleaje del Atlántico, por lo que bañarse resulta muy agradable.
Bahía del Duque y el castillo del duque de Abrantes
En la playa salta a la vista inmediatamente el pequeño cabo que la cierra por el este, un promontorio sobre el que se encuentra el llamado castillo o casa del Duque, que da nombre a este paraje. Este hermoso palacete, que cuenta con una ubicación privilegiada con vistas al océano y a la bahía del Duque, fue construido durante la II República por el duque de Abrantes, cuya intención era que el edificio sirviera como residencia para el exiliado rey Alfonso XIII, y que así no tuviera que marcharse al extranjero. No fue así, ya que el monarca pasaría su exilio en hoteles de lujo de varias ciudades europeas.
En la actualidad, la finca es una vivienda privada y no puede visitarse, aunque el cabo puede rodearse a pie por su base.
Dónde comer en la playa del Duque
Junto al bonito paseo que bordea la playa –donde encontramos un mirador dedicado a Javier Pérez Ramos, un héroe local que murió rescatando a una turista atrapada por las olas–, existen varias terrazas y restaurantes donde tomar una copa o comer sin necesidad de ir más lejos. El más destacado es La Torre del Mirador, todo un balcón sobre el océano Atlántico desde el que se puede ver la isla de la Gomera mientras se come una exquisita parrillada de pescado y marisco o un arroz caldoso con bogavante. También son buenas opciones –y tienen terrazas con vistas al mar– el restaurante La Nonna, especializado en cocina tradicional mediterránea con influencias italiana, griega, española y francesa; el japonés Sensu, con una estrella Michelin y un exclusivo ‘sake bar’; y el mexicano La Hacienda. Para tomar unas tapas o un cóctel con la brisa marina, a pie de playa encontramos El Chiringuito, y en el paseo marítimo, el Café La Bahía y el Bar Acanto.
A dos pasos de centros comerciales y hoteles de lujo
Las compras y el alojamiento tampoco van a ser un problema en la playa del Duque. Justo al lado podemos elegir entre dos centros comerciales. El centro comercial El Mirador, acondicionado al aire libre como si fuera un pueblo canario tradicional, es un lugar agradable donde pasear mientras se echa un ojo a los escaparates de exclusivas tiendas de moda y diseño.
Al este de la playa, el moderno y elegante centro comercial Plaza del Duque tiene todo lo que podamos necesitar, incluyendo tiendas de moda y complementos, joyerías, perfumerías, cafeterías, terrazas y zonas de juego para los niños.
En los alrededores de la playa podemos elegir entre varios hoteles de cinco estrellas como el hotel Bahía del Duque, que recrea una villa colonial canaria del siglo XIX. A cinco minutos en coche de la playa del Duque, también podemos disfrutar de la experiencia única del Royal Hideaway Corales Resort, del Grupo Barceló, un vanguardista edificio obra del arquitecto tinerfeño Leonardo Omar que establece un diálogo con la naturaleza que lo rodea y está abierto al océano en su totalidad.
