Con más de cinco millones de habitantes, Ankara es uno de los destinos que hay que visitar en un viaje de turismo por Turquía. Aunque está eclipsada por la belleza de Estambul y Capadocia, Ankara es la capital histórica, política y administrativa del país y tiene mucho que ofrecer. Hoy es una ciudad moderna que mira hacia el futuro y que brinda al visitante su rostro más exótico, cosmopolita y monumental. Aquí conviven las tradiciones más ancestrales con el progreso más contemporáneo.

¿Qué ver en Ankara? Son muchos los atractivos turísticos de esta gran ciudad. Podemos comenzar nuestro itinerario en lo alto de la antigua ciudadela, recorrer las callejuelas de su casco histórico, disfrutar del impresionante Museo de las Civilizaciones Anatólicas y visitar el inmenso Mausoleo de Ataturk, considerado el padre de la patria turca.

  1. Contexto e historia
  2. Ciudadela de Ankara
  3. El mausoleo de Atatürk
  4. Castillo de Ankara
  5. Kizilay
  6. Mezquita de Kocapete
  7. Torre Atakule
  8. Museos en la ciudad
  9. Dónde comer

Contexto e historia

Ankara es una ciudad con una larguísima historia. De esto dan fe los muchos asentamientos prehistóricos existentes en las proximidades de la ciudad actual. Por ejemplo, alrededor del mausoleo de Ataturk se han encontrado muchas tumbas de civilizaciones milenarias. Con Nerón, Ankara alcanzó la categoría de metrópoli y, durante el periodo bizantino, vivió un largo periodo de prosperidad, aunque después fue saqueada por persas, árabes, turcos y cruzados. En 1923, Ataturk la elegió capital de la república turca y desde entonces ha vivido un gran desarrollo, pasando de los 300.000 habitantes que tenía hace un siglo hasta los más de cinco millones con que cuenta en la actualidad.

Ankara

Ciudadela de Ankara

Situada en lo más alto del casco antiguo de la ciudad, la vieja ciudadela de Ankara es un lugar privilegiado para contemplar una panorámica en 360 grados. Los cimientos de la antigua ciudadela fueron colocados por los gálatas y el resto fue completado por los romanos. Después, los bizantinos y los selyúcidas añadieron elementos y restauraron algunas partes de su estructura. Hoy, muchas de las casas turcas tradicionales que se hallaban dentro del recinto de la ciudadela se han transformado en bonitos restaurantes, locales de música, galerías de arte y tiendas de artesanía. Y es que estamos ante una verdadera ciudad que se desparrama entre las murallas más antiguas y las externas. 

El mausoleo de Atatürk

Abierto todos los días del año y con entrada gratuita, el mausoleo de Ataturk es uno de los grandes iconos de la Turquía moderna. Se trata de un gran complejo arquitectónico, rodeado de jardines, que permite descubrir la importancia que tuvo el considerado ‘padre de la patria turca’. Además de los turistas, los propios turcos también visitan este espacio, construido entre 1944 y 1953. Delante del mausoleo, se encuentran la Hurriyet Kulesi (torre de la libertad) y la Istiklal Kulesi (torre de la independencia), que contienen información sobre la construcción del complejo. En esta gran edificación se encuentran los objetos personales de Ataturk (1881-1938), incluido su perro embalsamado; su gran biblioteca personal, una exposición sobre la guerra de la independencia y la sepultura de Ataturk.

Anitkabir, mausoleo de Ataturk, Ankara TURQUÍA

Castillo de Ankara

El castillo de Ankara se ha convertido en uno de los grandes atractivos turísticos de la ciudad. Está formado por dos cinturones defensivos, declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Para ver todos sus rincones, se recomienda empezar por la cima del castillo y disfrutar de sus vistas panorámicas y del verdor de los campos que rodean la ciudad. Después hay que bajar por el barrio que circunda el castillo y descubrir las casas tradicionales con sus bonitos patios interiores. En el interior del castillo, hay un museo que merece la pena visitar.

Vista de cerca del castillo de Ankara

Kizilay

Kizilay es uno de los barrios tradicionales para realizar compras de la ciudad de Ankara. Su corazón se halla en la plaza de Kizilay, que se extiende desde la Ópera hasta los edificios del Parlamento y los barrios de Maltepe y Kurtulus. Kizilay se desarrolló desde los primeros años de la República turca, cuenta con un gran centro comercial y durante mucho tiempo fue la sede de la Media Luna Roja turca

Mezquita de Kocapete

La mezquita de Kocapete es la más grande de Ankara. Construida entre los años 1967 y 1987, su silueta es visible desde cualquier punto de la ciudad. Tiene capacidad para 24.000 fieles y es una de las mayores del mundo. Está edificada en estilo otomano neoclásico y su estructura arquitectónica está inspirada en la mezquita de Selim, en Edirne, y en las mezquitas Sehaza y Azul, en Estambul.

Torre Atakule

Se trata de una torre de comunicaciones y observación de 125 metros de altura ubicada en Çankaya, uno de los distritos de la Provincia de Ankara. Al encontrarse en lo alto de una colina, es visible desde cualquier punto de la ciudad, especialmente cuando los días están despejados. En la torre hay un restaurante giratorio, curiosamente llamado Sevilla, que puede dar un giro de 360 grados en sólo una hora. La estructura de la parte interior está ocupada por un centro comercial. Fue inaugurada en el año 1989.

Vista de la Torre Atakule

Museos en la ciudad

Ankara posee numerosos museos con colecciones muy interesantes que conviene disfrutar. Los más importantes de la ciudad son el Museo de las Civilizaciones Anatólicas, que reúne los vestigios de los principales yacimientos de Turquía y permite descubrir la historia antigua del país. También merece la pena visitar el Museo Etnográfico, por sus ricas colecciones de arte popular a partir de la época selyúcida, y el Museo de Arte Moderno, que da testimonio de la evolución del arte del país desde finales del siglo XIX hasta la actualidad. No hay que olvidar las Termas romanas, construidas por el emperador Caracalla en el siglo III, ni el Templo de Augusto y Roma, que data del siglo II a.C.

Dónde comer

Al tratarse de una gran ciudad, Ankara tiene una oferta muy amplia para disfrutar de la cocina tradicional turca. Hay que probar los sabores de las recetas y platos típicos, como el pan de Ankara, elaborado con carne, cebolla y pimiento; el Tamtak Tiridi, una sopa especialmente sabrosa y muy apetecible en los meses de invierno, o las hojas de parra rellenas de beypazari que se cocinan al horno. Algunos restaurantes célebres son Nukteli, L’avare Satage & Street, Trilye, Kebap 49, Duveroglu, Meyhane Asina y Masabasi Kebapcisi.