Pamukkale es uno de esos lugares que más parecen fantasía que realidad. Desde luego, sus blanquísimas formaciones geológicas no dejan a nadie indiferente.
Antigua Constantinopla y cuna de emperadores, hoy es una ciudad viva y cosmopolita que alberga auténticas joyas de la Antigüedad.
La Basílica de Santa Sofía, en el siglo VI, marcó un antes y un después en la arquitectura: durante mil años, nadie pudo ignorarla ni igualarla.
Si estás preparando un viaje a Turquía, te animamos a seguir algunos consejos para que tu estancia en este hermoso y exótico país sea todo un éxito.
La Mezquita Azul fue construida frente a Santa Sofía para superarla en grandeza. La magia, sin embargo, queda flotando en su atmósfera interior turquesa
El Gran Bazar, uno de los mercados más grandes y antiguos del mundo, es un lugar que se debe visitar en Estambul. Más de cuatro mil tiendas aguardan.
Estambul es un inmenso centro de restauración: en cada esquina y plaza hay un restaurante o puesto callejero en el que disfrutar de la deliciosa cocina turca.
Déjate mimar un poco, disfruta de momentos de sosiego en los spas Barceló de Estambul, para una necesaria sesión de relax después de un ajetreado día.
Corazón político de Turquía durante cuatro siglos, es hoy una de las maravillas de Estambul. Conoce el Palacio de Topkapi y su famoso harén.
El Cuerno de Oro es un lugar que se debe contemplar tanto desde sus puentes y cruceros como paseando por sus barrios.
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