¡Fenómeno lunar único en 150 años!

Empecemos por lo primero, cada uno de estos fenómenos ya merecería un rato de nuestro tiempo en el que busquemos un buen lugar, oscuro y tranquilo, en el que alzar la mirada al cielo. Pero ¿qué son cada uno de ellos? ¿Por qué se producen? ¿Dónde pueden verse? Vayamos por partes:

Esta sería la segunda superluna que se produce este 2018. La primera llegó nada más empezar el año, en la madrugada entre el 1 y el 2 de enero. Este fenómeno se produce cuando el satélite se encuentra en el momento de máximo acercamiento a la Tierra –no hay que olvidar que la órbita de la luna es elíptica- y ese punto coincide en el calendario lunar con una luna llena.

Cuando esto se produce, podemos apreciar a simple vista que la luna es más grande –entre un 10-15% más, según los expertos- y más brillante –hasta un 30%-.

El fenómeno de la superluna, que ocurre entre 3 y 5 veces de media al año y puede apreciarse siempre desde cualquier parte del mundo.

Este término es un poco más raro y menos conocido que el resto de los que aquí tratamos. La luna azul se da cuando se producen dos lunas llenas en un mes; a la segunda de ellas se la llama luna azul. No es algo muy normal, ya que sucede cada 2 o 3 años.

El término “luna azul” en realidad es una deformación del vocablo inglés “blue” (azul, en español). En realidad para mencionar este tipo de fenómeno se usaba el término belewe, que significa traidor en inglés, no referido a la luna, sino al mes de febrero. Este mes, al contar normalmente con 28 días, es uno de los mejores candidatos para que se produzca la luna azul ya que tiene menos días que los del ciclo lunar. Así que se usaba el término belewe al considerarlo un mes traidor; esta palabra derivó en blwe y de ahí al ya conocido blue. De ahí, se concluyó en el ya conocido luna azul.

Al igual que la superluna, la luna azul es visible desde cualquier lugar en el que se vea la luna, aunque si utilizamos un telescopio astronómico, veremos el fenómeno con mucho más detalle.

La luna roja, llamada popularmente luna de sangre, tiene que ver con el eclipse ya que, mientras este sucede, la atmósfera filtra la luz azul y verde de los rayos solares pero deja pasar la roja. Es por esto que se produce un reflejo rojizo sobre la luna, dándole ese aspecto característico que popularmente se conoce como luna de sangre.

Precisamente, al estar directamente relacionado con el eclipse que también tendrá lugar este 31 de enero, la luna de sangre sólo será apreciable en los lugares en los que también se vea el eclipse.

Los eclipses siempre han sido fenómenos astronómicos que han causado fascinación. Los eclipses de luna totales se producen cuando la Tierra, la Luna y el Sol se alinean.

En este caso, este eclipse 2018 podrá verse en América del Norte, Asia, Australia y Nueva Zelanda. En Europa tendremos que esperar hasta julio, más concretamente el día 27, para que tenga lugar un eclipse lunar visible alrededor de las 21:30 horas.

Existen cielos especialmente indicados para ver un eclipse lunar, una superluna o cualquiera de estos fenómenos astronómicos. La Fundación Starlight, con el apoyo de la UNESCO, los selecciona en base al criterio de que son “escenarios que incorporan la observación del firmamento como parte de su patrimonio natural, paisajístico, cultural o científico y fomentan  a su vez  el “Turismo de Estrellas” o turismo astronómico.

La isla de La Palma fue la primera en conseguir la certificación Starlight pero no es la única. En Tenerife se encuentra el Parque Natural del Teide que, al encontrarse a más de 2.000 metros evita la contaminación lumínica y garantiza los cielos despejados. Desde allí pueden verse 83 de las 88 constelaciones existentes.