7 cosas que hacer al menos una vez en la vida

Es sin duda una de las experiencias estrella para los viajeros más aventureros. Tanto es así que se calcula que alrededor de 40 millones de personas viajan a Capadocia cada año para ver la región desde las alturas y sentir en sus carnes la sensación de libertad e ingravidez de montar en globo, y más en un lugar con tanta magia como este.

Una buena noticia es que los globos en Capadocia vuelan aproximadamente 250 días al año, lo que significa que puedes disfrutar de esta experiencia en el momento que mejor te venga viajar a Turquía. Eso sí, en invierno no hay vuelos, por lo que deberás planear tus vacaciones para los meses que van desde la primavera hasta el otoño. Los precios oscilan entre los 200 y 300 euros, y es necesario reservar, si bien cada día hay unos 100 globos en funcionamiento.

El otro gran aliciente de montar en globo en Capadocia es que te permite divisar desde arriba si increíble paisaje y las famosas chimeneas de hadas (formaciones rocosas en forma de cono) del valle de los Monjes. ¿Se necesitan más excusas?

Una experiencia que probablemente no hubieras pensado (sobre todo si tienes miedo de las profundidades marinas o de los animales gigantescos) es nadar con tiburones ballena. Pero tranquilo/a, antes que nada, conviene saber que a pesar de su gran tamaño (10 metros de longitud de media y 9 toneladas de peso), estos animales son completamente inofensivos. El animal no-cetáceo más grande del mundo se alimenta únicamente de plancton y se caracteriza por ser muy simpático y amistoso con los humanos. Nadar con ellos es una de las experiencias más top que existen y que es posible vivir en las islas Maldivas, siendo uno de los grandes atractivos de este destino para viajeros ávidos de nuevas emociones. Un lugar idóneo para ello es la isla de Bodufinolhu, en el atolón de South Malé. Esta está formada por un amplio banco de arena de 800 metros de largo y 30 metros de ancho y cuenta con una de las playas más bellas de la zona, así como dos islotes desiertos. 

Sri Lanka se postula como uno de los mejores destinos para los próximos años. Una experiencia difícilmente olvidable (y la mejor manera de conocer de cerca la exuberante naturaleza del país) es subirse al popular tren que va de Kandy (capital cultural de Sri Lanka y puerta de entrada a las impresionantes Tierras Altas) hasta Ella. El trayecto dura un total de 6 horas y cubre una distancia de 163 km a través de bosques, plantaciones de té, cadenas de montañas y grandes cascadas.

El tren hacia paradas en Nuwara Eliya, Ratnapura, Badulla o Haputale, desde donde visitar las llanuras de Horton. La pequeña ciudad de Ella es la parada final del trayecto, donde se encuentra el famoso majestuosos puente de los Nueve Arcos o la roca de Ella, dos de los puntos más instagrameables de la isla. Una experiencia única que no deberás pasar por alto si tienes pensado viajar a Sri Lanka.

En un entorno declarado Reserva de la Biosfera Intercontinental del Mediterráneo nos encontramos con uno de los mayores atractivos turísticos en la provincia de Málaga, sobre todo para aquellos aficionados al  senderismo y, por qué no decirlo, a la sensación de vértigo. Hablamos del  Caminito del Rey.  Se trata de una pasarela peatonal construida en las paredes del desfiladero de los Gaitanes, entre las localidades de Ardales, Álora y Antequera. Con una extensión de más de 3 kilómetros y 105 metros del río, este paseo supone una experiencia tan liberadora como inolvidable. Eso sí, aunque es 100% seguro, si te dan miedo de las alturas, te recomendamos que mejor ni te acerques… 

Desde arriba del camino se puede contemplar un paraje que impresiona por su singular belleza. Inaugurado por el rey Alfonso XII –de ahí su nombre- para poder divisar los embalses Guadalhorce-Guadalteba, el camino empezó a construirse en 1905, aunque sus diferentes restauraciones llegan hasta nuestros días, llegando a posicionarse como uno de los mejores sitios que visitar en diferentes publicaciones especializadas.

Eso sí, si estás pensando viajar a Málaga para hacer el Caminito del Rey es necesario reservar en la web, o apuntarse a una experiencia organizada ya que suele haber mucha demanda, sobre todo en periodos vacacionales. Eso sí, la gestión ¡merece la pena! 

Cada año, el turismo de observación gana adeptos. ¿En qué consiste? Muy sencillo: aprovechar los días de vacaciones para conectar con el destino y sus ecosistemas, ya sea avistando aves, construyendo hides fotográficos (refugios para observar la naturaleza de cerca) o simplemente disfrutando de un paseo en el que descubrir las especies propias del lugar. Otra manera de practicar este turismo es relacionándonos directamente con los animales, siempre respetando su hábitat natural y sin intervenir en sus ciclos vitales. En Funchal, capital de la isla portuguesa de Madeira, uno de nuestros destinos recomendados para 2023, es posible nadar con uno de sus habitantes más queridos: los delfines. Y es que muchos de los tours en barco organizados por diferentes compañías ofrecen la posibilidad a los pasajeros de disfrutar de un baño en el océano junto a estos seres tan simpáticos y amigables con los humanos. Además, existen altas probabilidad de contemplar también las ballenas que viven en la zona. Una experiencia que no puede faltar en tu próximo viaje a Madeira.

De todos es sabido que Costa Rica es uno de los mejores destinos para perderse en la naturaleza más salvaje y practicar el ecoturismo. Selvas tropicales, volcanes, arenales que son auténticos paraísos y un estilo de vida fundamentado en el respeto a la tierra. El esfuerzo volcado por parte de sus habitantes en preservar la biodiversidad y los ecosistemas hacen de este país de Centroamérica un rara avis entre los destinos turísticos más convencionales, donde los placeres de la vida están directamente conectados con la vivencia de experiencias auténticas.

Una actividad que no podía faltar en nuestro listado de cosas que hacer al menos una vez en la vida es descubrir el Parque Nacional Tortuguero en un recorrido por el río. Y es que adentrarse en esta espesa selva a bordo de un kayak no tiene parangón. Existen varios recorridos, pero todos ellos tienen algo en común: brindar la posibilidad de descubrir de muy cerca la vida salvaje de este edén tropical, y contemplar la flora y fauna (tortugas verdes y negras, caimanes, monos colorados, lapas verdes…) de este espectacular paraje.

Antes de organizar tu viaje conviene saber que en esta zona predomina el bosque tropical húmedo y bosque tropical muy húmedo, siendo los meses de mayor precipitación julio y diciembre; y los menos lluviosos, marzo, abril y octubre. La temperatura promedio anual oscila entre los 25°C y los 30°C, por lo que más allá de evitar la lluvia, ¡cualquier fecha es buena para lanzarse a la aventura!

A las faldas del collado de Estiviellas (Huesca) y entre vestigios glaciares, se erige la Estación Internacional de Canfranc; una estación de ferrocarril del 1928 con un pasado de película. Declarado Bien de Interés Cultural en 2002, la estación estuvo controlada durante la Guerra Civil por el Ejército nacional, siendo tapiado el túnel que la unía con Francia para evitar que los franceses irrumpieran en España desde el país vecino. Más tarde, durante la Segunda Guerra Mundial, fue utilizada por los nazis para importar todo tipo de materiales hasta que en 1941 las instalaciones de la parte española pasaron a manos de RENFE. En el 1970, tras el derrumbe del puente de L'Estanguet a consecuencia del descarrilamiento de un tren de mercancías francés, la estación echó el cierre, marcando el inicio de su decadencia debido al casi inexistente tráfico ferroviario.

El espacio de la antigua estación acoge hoy Estación Canfranc, a Royal Hideaway Hotel, un hotel que mira al futuro sin olvidar su trepidante pasado, devolviéndole su esencia en cada uno de sus muros, cuyo diseño interior se inspira en la estética de las antiguas estaciones y los lujosos trenes de largo recorrido de principios del siglo XX. Tejidos en terciopelo, elementos art déco, materiales nobles, inspiración regional y una gama cromática que evoca a los años 20 para vivir una experiencia inolvidable.

¿Un plus? El hotel cuenta con una oferta gastronómica que quita el sentido y que, te advertimos, merece la pena probar al menos una vez en la vida. Aquí se encuentra el restaurante Canfranc Express (1 estrella Michelin), uno de los mejores lugares en los que vas a comer en kilómetros a la redonda y avalado por la exclusiva marca hotelera Royal Hideaway Hotels & Resorts especialista en crear momentos únicos. Un ambicioso espacio liderado por el chef Eduardo Salanova y Ana Acín que sorprende al comensal en un vagón de principios del siglo XX -ya te adelantamos que todo en este hotel es una experiencia- con una original propuesta que fusiona el recetario tradicional aragonés con creaciones de vanguardia. Y es que, al menos una vez en la vida, necesitas comer en un restaurante con estrella Michelin.