Los 10 destinos cálidos a dónde viajar en Invierno

Viajar al archipiélago canario siempre es una buena idea, pero se hace todavía más apetecible en los meses de otoño-invierno por la menor afluencia de viajeros y un clima que continúa siendo agradable mientras en el resto de España se instalan las bajas temperaturas.

Aunque cada isla presenta sus singularidades, llevándonos a hablar de microclimas, lo cierto es que Canarias parece vivir en una eterna primavera. Su localización, a medio camino entre el mundo templado y el tropical, es la responsable.

Da igual cuál de las islas escojas (Lanzarote, Fuerteventura, Gran Canaria, Tenerife, La Palma, La Gomera, El Hierro o La Graciosa) para pasar tus vacaciones, porque todas presentan una propuesta de turismo irrechazable. Al codiciado combo de sol y costa, se suman la riqueza paisajística, el turismo de salud y bienestar en el que se han especializado, y la gastronomía. Además, su geografía resuelve el eterno dilema entre mar y montaña, porque aquí costa y naturaleza conviven en perfecta sintonía.

Esta comunidad autónoma, al igual que el resto de la península ibérica, se incluye en la zona templada de la Tierra, más cerca del trópico que del círculo polar. Pero en el caso de Andalucía, la influencia del mar Mediterráneo hace que los inviernos sean más suaves y las lluvias escasas, sobre todo en la provincia de Almería, haciendo que la comunidad sea un destino ideal para visitar en invierno. No es extraño, por tanto, que ciudades como Huelva y Málaga se cuelen en la lista de destinos españoles con la temperatura más agradable durante todo el año (junto a Las Palmas de Gran Canaria, Vigo y Palma de Mallorca) elaborada por la web Eltiempo.es.

Málaga es uno de esos sitios donde viajar en Enero sin temor a aburrirse o a congelarse. Una apuesta segura en cualquier estación del año. La temperatura media durante los meses de frío suele rondar en torno a los 20 grados, el tiempo perfecto para disfrutar de su amplísima agenda cultural, darse un homenaje frente al mar o pasear por la arena con los pies descalzos. Si te animas a visitar la Concepción Jardín Botánico-Histórico creerás que estás en pleno Caribe.

Esta ciudad de los Emiratos Árabes es conocida por el comercio de lujo, su moderna arquitectura y una trepidante vida nocturna. Recibe al visitante con los brazos abiertos y los cielos despejados. Entre los meses de diciembre y marzo, el clima es templado con temperaturas que oscilan entre los 24º y los 28º, lo que se traduce en una maleta ligera y en ropa liviana, perfecto si buscas un lugar al que viajar en invierno en el que haga calor (el justo y necesario).

En Dubái te esperan playas kilométricas y edificios colosales como la torre Burj Khalifa, que con sus 828 metros de altura domina un paisaje lleno de rascacielos. Un destino en el que la célebre cita “The eyes has to travel” (La mirada debe viajar) de la editora Diana Vreeland cobra más sentido que nunca.

Hablar del Caribe mexicano es hablar de la Riviera Maya, localizada en la península de Yucatán. Los meses que van de diciembre a abril son los mejores para disfrutar de este tramo de costa que supera en fama al estado donde se ubica, Quintana Roo. La razón es que, en este período, las lluvias son menos frecuentes. Un destino envidiable donde viajar con niños en invierno gracias a sus múltiples playas paradisíacas, sus cenotes naturales, sus pueblos mayas, sus ciudades coloniales, sus paisajes selváticos... y una larga lista de atractivos. De hecho, ya te contamos por qué Riviera Maya es un destino top para los más pequeños.

El primer motivo para encapricharse de Punta Cana, el extremo más oriental de la República Dominicana, es por su climatología, ideal para los viajes de invierno de 2024. Las otras siete razones  pasan por: la excursión a Isla Saona, la belleza de playa Bávaro, su sabrosa gastronomía, la expedición al cenote Hoyo Azul, los Altos del Chavón, el delfinario Dolphin Island Park y la impresionante cascada Salto del Limón. ¡Se dice pronto!

Hace no mucho descubríamos cuál es la mejor época para viajar a Costa Rica y todas las particularidades de este país tropical. Has de saber que cuenta con dos épocas marcadas: la seca, que va de diciembre a abril, y la de lluvias, que va de mayo a noviembre. De media, las temperaturas más bajas oscilan entre los 14º y los 17º y las más altas entre los 24º y los 27º, proporcionando un clima confortable. Probablemente, marzo sea el mejor mes para explorar Costa Rica debido a la escasez de lluvias, el buen tiempo y las especies animales que se pueden avistar.

El invierno maltés se caracteriza por ser breve y suave. El archipiélago bañado por el Mediterráneo, localizado entre Sicilia y la costa de África del Norte, goza de un clima templado durante todo el año. Además, es uno de los lugares a donde viajar en invierno por poco dinero, dado que durante los meses de diciembre, enero y febrero –al considerarse temporada baja– los precios caen considerablemente.

Perderse por las callejuelas de La Valeta, la capital de la nación isleña de Malta, u organizar un día en la Laguna Azul, una bahía que se encuentra entre las islas de Comino y Cominotto, son dos de los planes que te cautivarán. En esta zona el tiempo parece detenerse y los problemas se volatilizan.

El clima de Marruecos es mediterráneo en la costa, más seco en el interior y tirando a continental en las montañas. Pero lo que hay que saber es que, a rasgos generales, el invierno es suave y el verano muy cálido. Marrakech o ciudades costeras como Esauira y Agadir son una buena elección. Los zocos de las medinas, los ricos tajines y las dunas del Sáhara te estarán esperando.

El clima de Madeira puede definirse como oceánico subtropical, o en otras palabas, presume de suaves temperaturas durante todo el año. Otro dato interesante es que sus aguas son tibias, manteniéndose entre los 25 y los 17 grados a lo largo de los doce meses (¡hasta es factible darse un chapuzón en diciembre!). Este paraíso teñido de verde es un enclave ideal donde viajar en invierno con bebés. Salpicado de montañas y recortado por acantilados, sobresale por su frondosa belleza. Una base estupenda para conocer la isla es Funchal, una moderna capital con mucha solera y cosmopolita como pocas.

Si lo que buscas en esta región de Portugal es pasar el día pegado al mar y realizar actividades acuáticas hasta el hartazgo, entonces el invierno no es la época más recomendable por los vientos que azotan la costa. Pero si lo que andas buscando es un viaje tranquilo donde todo orbite en torno a la naturaleza, las actividades al aire libre y los pueblecitos de la zona, este es tu sitio.

Los meses de diciembre y enero son ideales para practicar senderismo. De hecho, se organizan varios eventos con esta temática de fondo, véanse el Festival de Senderismo de Madeira y el Festival de Orientación de Madeira. Dos oportunidades únicas para explorar el lugar.

Chipre es un país que, situado en la isla homónima, tiene mucho que ofrecer. Que levante la mano quien no ha soñado con bañarse en sus aguas azul turquesa, explorar los restos arqueológicos que atesora, pasear por sus pueblos de cuento y beber el vino de la zona. Probablemente no encontraríamos ninguna levantada, porque es capaz de atraer tanto a los amantes del mar como de la montaña.

Bajo el influjo de la diosa Afrodita, chipriota de nacimiento según la mitología griega, es fácil prendarse de la isla mediterránea, cuyas temperaturas invernales llegan hasta los 20 grados. Desde las montañas de Troodos, coronadas por el monte Olimpo, a la ciudad de Pafos. Sin olvidar tampoco Akamas, el cabo Greco o el castillo Kolossi (por mencionar algunos de sus puntos de interés).

Si te preguntas por los mejores destinos dónde viajar entre los meses de Diciembre, Enero y Febrero, desde nuestra experiencia, te recomendamos estas diez maravillosas.